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Tesla vuelve al ojo del huracán: segundo accidente con Autopilot

Una semana después de hacerse público el accidente mortal ocurrido en Ohio, donde perdió la vida un hombre de 45 años de edad, conocemos otro caso, aunque sin víctimas mortales, a bordo, esta vez, de un Tesla Model X en Pennsylvania.

3 min. lectura

Publicado: 07/07/2016 09:00

No corren buenos tiempos para la marca de lujo de automóviles de movilidad sostenible, porque apenas una semana de hacerse público el accidente mortal que sufrió una persona a bordo de su flamante Tesla Model S en mayo, se acaba de registrar un nuevo incidente. Esta vez con un Model X mientras su propietario circulaba con la función piloto automático activada, según declaraciones.

Ha ocurrido en Pennsylvania, en una autopista cuando el 1 de Julio, hacia las 17:00, el propietario del vehículo y su yerno circulaban con el coche en modo autónomo cuando este zozobró hasta el quitamiedos procediendo posteriormente a su vuelco instantáneo. Pese a todo, no se lamentan victimas mortales y parece que incidente no sobrepasó la barrera de lo material.

Queda en el aire lo ético de llevar entre manos un automóvil cuando no prestamos la mínima atención a la trayectoria de la ruta dejando, de alguna manera, nuestra vida e integridad física y la de los demás a merced de una serie de dispositivos que guían el coche de manera totalmente automática hasta tu destino. ¿Hasta que punto son fiables estos sistemas?, ¿Qué pasa si algo falla?, ¿Quién es el culpable en caso de que esto ocurra, el propietario o el fabricante? Las respuestas al algunas de estas preguntas pueden ser confusas, pero de lo que no cabe duda es de que si algo falla estar atento y no relajarse por completo es la mejor medicina, pudiendo reaccionar ante cualquier anomalía detectada si cabe.

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Numerosos son los vídeos en los que se muestra como un grupo de amigos vuelven de fiesta totalmente dormidos, conductor incluído, tras la noche de juerga o conducir mientras visualizas tu serie favorita, como es el caso del primer accidente que se registró, cuyo pasajero se encontraba viendo Harry Potter hasta que el dispositivo de conducción automática falló, encontrando la muerte.

No hay lugar a un miedo popular ante este tipo de vehículos, y tampoco a hacer de Tesla una diana de dardos envenenados por líderes de opinión, dado que la posibilidad de que se trate de casos aislados aún es tangible así como la porción de responsabilidad por parte del propietario. Queda esperar para comprobarlo, pero el hecho de dejarnos llevar por un "asistente de conducción avanzado" en fase de desarrollo sin ningún tipo de reparo es un tema que va a traer mucha cola.

Aquí unos vídeos de Joshua Brown, de 45 años, el primer accidentado a bordo de Tesla Model S:

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