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Toyota Prius 4g contra Toyota Prius 3g, conducción y dinámica (II)

Comparamos dos de los coches más eficientes del mercado en su correspondiente aparición. El Prius de 2009 homologa 4 l/100 km (con 17") y el modelo nuevo 3,3 l/100 km con las mismas ruedas. ¿Hasta qué punto se mantiene esa diferencia en carreteras reales? Comprobémoslo

Toyota Prius 4g contra Toyota Prius 3g, conducción y dinámica (II)

10 min. lectura

Publicado: 27/07/2016 19:00

Cuando apareció el Toyota Prius 3g en 2009 era el coche con motor a gasolina de su tamaño que menos consumía del mercado. Su sucesor vuelve a hacer lo mismo en 2016. Solo se puede consumir menos con un híbrido enchufable, y eso cuando la carga de las baterías es alta. Es posible consumir algo menos con algunos coches más pequeños, que no son rivales directos.

El modelo nuevo ha perdido un poco de potencia, 122 CV frente a 136 CV, y todo está en la parte eléctrica (el motor de gasolina solo cede 1 CV). Aunque en teoría el nuevo Prius es más lento, sin cronómetro la diferencia es inapreciable. Tendremos la sensación subjetiva de que el anterior anda más, porque hace un poco más de ruido.

Una conducción tranquila y sosegada se premia más en el Prius 4g, porque es capaz de circular en muchas circunstancias con el motor de gasolina apagado, incluso por encima de 100 km/h. Su predecesor, además, tiene más pérdidas por rozamiento, y una gestión térmica de peor calidad. En consecuencia, el nuevo Prius aprovecha mejor cada gota de gasolina.

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Toyota Prius 3g (2009)

Como la unidad de Prius 3g de las imágenes está modificada para consumir menos, he rescatado los datos de consumo de cuando probé uno de serie en las mismas condiciones que el nuevo, con pocos kilómetros. Los ordenadores anuncian una diferencia de 1,4 l/100 km, aunque las condiciones de uso no fueron directamente comparables, empezando por la velocidad media. Ese Prius 3g lo usé mucho en autovía, mayor desnivel y a más velocidad.

La aceleración del 4g es subjetivamente más natural y el motor hace menos ruido

Si nos vamos a los datos de Spritmonitor, que son muy válidos por la población de coches existente, los Prius 3g gastan una media de 5,1 l/100 km frente a los 4,3 l/100 km del nuevo modelo. La diferencia es de 0,8 l/100 km, prácticamente lo mismo que hay en la ficha técnica (0,7 l/100 km). Aunque el nuevo tiene dos litros menos de depósito, la autonomía es superior a igualdad de conducción.

A velocidades moderadas el nuevo tiene las de ganar por la mejor gestión térmica del motor (se reducen pérdidas por enfriamiento), una parte eléctrica que trabaja más y un motor optimizado. A velocidades altas también tiene las de ganar, porque pesa menos y su aerodinámica es mejor. En igualdad de condiciones, siempre vence el nuevo. Si el Prius 3g dispone de una gestión térmica similar (mediante tapado de radiador) entonces el nuevo solo gasta 0,3 l/100 km menos.

Toyota Prius 4g (2016)

Conducir gastando poca gasolina se volvió más intuitivo en el Prius de tercera generación al incluir una barrita a modo de potenciómetro. En el modelo de segunda generación el conductor tenía que ir más pendiente a sus sensaciones para no activar el motor de combustión en una aceleración suave. Es más intuitivo todavía en el modelo nuevo, incluso el HUD muestra la carga de la batería.

Si el conductor presta atención a las pantallas y la información, puede hilar más fino y optimizar el trabajo de la parte eléctrica. En el Prius 3g se pueden conseguir maravillas a menos de 80 km/h, sobre todo si el conductor conoce perfectamente el terreno por el que se mueve, con el motor de gasolina apagado durante pocos kilómetros. El Prius 4g permite eso a más velocidad aún, y sin recurrir al truco de insertar punto muerto.

Esta técnica de conducción ultraeficiente no es recomendable para coches convencionales porque entraña riesgos para la circulación. En un Prius no tiene problema alguno, porque los sistemas de seguridad no dependen de la generación de vacío del motor, ni de sus revoluciones, ya que son eléctricos. Apostaría a decir que en el nuevo Prius la posición "N" del cambio sobra, no hace falta.

Toyota Prius 3g (2009)

Lo que está claro es que en el modelo nuevo la calidad de conducción es superior. El nuevo bastidor con plataforma TNGA es más rígido, más ligero, cuenta con suspensión independiente a las cuatro ruedas y el tarado de los amortiguadores es un poco más blando. Eso sí, el modelo 2009 tiene un tacto de dirección un poco más realista. En 2012 se reforzó la rigidez de la carrocería con mejores soldaduras, y también se endureció la columna de la dirección.

Toyota ha mantenido la dimensión de los neumáticos y de los frenos

El Prius 4g es más cómodo en cualquier circunstancia, solo tiene la pega de que reemplazar componentes de la suspensión es más caro. El Prius 3g tiene suspensión trasera por barra de torsión, muelles y amortiguadores; es más simple y ruda, no requiere hacer paralelo (ni se puede) y tiene menos piezas. Es más, con casi 150.000 kilómetros la suspensión de serie tiene un comportamiento aún muy digno, aunque el balanceo ha ido a más (obvio).

SI ya el comportamiento era muy predecible en el modelo 3g, el nuevo demuestra estar muy por encima de lo que pueden hacer los motores: es la misma sensación que en el Lexus CT 200h. Parece que el bastidor puede tranquilamente con más potencia. No es que el Prius vaya pidiendo guerra al conductor, pero puede sorprender mucho en una utilización exigente.

Toyota Prius 4g (2016)

Por sensaciones de conducción, incluso considerando el tacto de la dirección, prefiero claramente el nuevo. Por consumo, ni un atisbo de duda, prefiero claramente el nuevo. Por confort y calidad de rodadura, prefiero claramente el nuevo. Solo prefiero el comportamiento del Prius 3g al ser un poco más divertido en conducción exigente, si el conductor sabe cómo dominarlo. No se puede desactivar el ESP en ese modelo, pero sí en el nuevo. Más que nada, será útil en caso de nevada o similares.

No es tan interesante la conversión a GLP del nuevo Prius, ya que se tarda más en amortizar. Con medias reales en torno a 4 l/100 km poco margen hay para la mejora. Harían falta más de 100.000 kilómetros para empezar a recuperar la inversión. A largo plazo, el nuevo también es preferible porque es más fiable. Al ir la toma de aire de la batería filtrada, el ventilador tardará mucho más en fallar, así que la batería durará mucho más tiempo

Un conductor normal no tendrá que plantearse nunca un cambio de batería en el 4g

Merece la pena valorar la compra del Prius, a pesar de lo caro que es -también va muy equipado- por lo poco que consume, sin ser diésel. Es más, a similitud de equipamiento, apenas ha cambiado el precio. Por otro lado, el mantenimiento preventivo y correctivo es claramente más económico que en un diésel, además, tendrá más facilidades para moverse por ciudades como Madrid o Barcelona, gracias al distintivo ECO. Eso también es aplicable al modelo 3g, solo que el gasto en gasolina es un poco superior.

En cualquier caso, un amante de la conducción eficiente se enamorará de cualquiera de los dos.

Continuará...

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