Hace 12 meses, Williams se encontraba en una situación crítica al haber sufrido retrasos como consecuencia de no haber pasado los test de impacto del chasis exigidos por la FIA. Ello propició una crisis que desembocó en media pretemporada perdida, lo que agravó las ya de por sí grandes carencias del FW42.
Parece que este año las cosas han mejorado considerablemente, al menos en lo que al cumplimiento de los plazos respecta. El equipo confirmó recientemente que los test de impacto de la FIA habían sido pasados y en la mañana del 6 de febrero ha hecho lo propio con el tradicional ritual de arranque del motor una vez montado en el nuevo monoplaza.
Cargando tweet... 1225345752702050307
De este modo, Williams se dirige con confianza hacia la presentación del 17 de febrero (sólo con la nueva decoración) mientras envía el FW43 a Barcelona para el inicio de los test dos días más tarde.
Fuente: Williams Racing / Fotos: Williams Racing