El éxito a nivel global que goza el Fiat 500 ha llevado a Fiat a replantear su estrategia inicial para el pequeño modelo. Pensado como una solución para la movilidad urbana, pero también para atraer a aquellos clientes que le dan importancia a los productos de moda y al diseño, el "Cinquecento" se convirtió rápidamente en un suceso internacional, que superó las expectativas que la propia Fiat.
Un poco por lo explicado en el párrafo anterior, y otro poco por la intención de la automotriz italiana de posicionar al producto en el mercado estadounidense, esta semana comenzó en la planta que Chrysler posee en Toluca, México, la producción del Fiat 500. Con este nuevo punto de producción y abastecimiento, se facilitará la llegada del modelo al principal mercado americano, que no es más que los Estados Unidos. Pero también desde esta misma planta Fiat abastecerá los mercados de Centroamérica y del MERCOSUR, consiguiendo por un convenio entre esta región y México, una exención del 35% en impuestos que deben pagar los vehículos fabricados fuera de la región.
La capacidad de producción de la planta de Toluca es de 120.000 unidades al año y, una vez comenzados los envíos a Estados Unidos y Latinoamérica, llegará el turno de china, hacia donde partirá otra tanda de unidades a fines de este año.
El Fiat 500 "mejicano" montará un motor 1.4 MultiAir 16 válvula capaz de desarrollar 100 CV de potencia. Este modelo será fabricado en Dundee, Michigan, en otra planta perteneciente a Chrysler.
Para poder fabricar el pequeño 500, la planta de Chrysler recibió una inversión por parte del grupo italiano de 400 millones de dólares y abrió las puertas a 600 nuevos empleados. En esta misma planta Chrysler producía el ya discontinuado PT Cruiser y el Dodge Journey. Sobre la base de este mismo modelo se fabricará allí también el Fiat Freemont, un SUV que cambia su frontal y agrega los emblemas de Fiat para ser comercializado tanto en la Comunidad Europea como en el MERCOSUR.
Fuente: Autoblog Uruguay