En la última edición del Rally de Alemania, Volkswagen presentó el Scirocco Cup R, una versión deportiva del atractivo compacto alemán que se destaca tanto por sus niveles de potencia y deportividad como por sus bajos niveles de consumo y emisiones. Esto es así porque el Scirocco R se alimenta de gas natural, con lo cual se muestra mucho más amigable con el medio ambiente de lo que pueden serlo las versiones convencionales y mucho más aun los coches de WRC.
El Scirocco R que recorrió los caminos alemanas del Campeonato Mundial de Rally no fue, en honor a la verdad, un coche que participara en la competencia, sino que se trato del coche de apertura. Pilotado por el último campeón del Rally Dakar, Carlos Sainz y por su compañero de equipo y subcampeón de la tradicional competencia, Nasser Al-Attiyah, el coche despertó el interés de los presentes, que se mostraron gratamente sorprendidos por la posibilidad de ver de cerca una versión de carreras del Scirocco.
El Scirocco Cup R fue presentado el año pasado, cuando se anunció con bombos y platillos que utilizaría un motor de 2.0 litros, cuatro cilindros, capaz de desarrollar 220 CV de potencia alimentado por GNC. Adaptado a las normativas del WRC, la versión mostrada el último fin de semana entregó una potencia final de 275 CV.
El Scirocco Cup R utiliza una caja DSG de seis marchas y doble embrague que se acciona desde los comandos montados detrás del volante. Monta tracción delantera con diferencial de deslizamiento limitado y pesa 1.250 Kg.
Desde comienzos de este año, el Scirocco Cup R es protagonista de la Scirocco Cup, una categoría monomarca que acompaña al DTM alemán.