Los coches diésel no tienen cabida en Múnich, la ciudad se enfrenta a una gran demanda
Múnich ha cerrado el paso a los coches diésel Euro 4. La capital alemana implantó una norma el pasado otoño que prohibía la circulación a estos vehículos por sus elevados niveles de emisiones, una fórmula para obligar a los propietarios a apostar por modelos más eficientes y que ahora se le ha vuelto en contra con importantes demandas.
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Publicado: 04/02/2023 18:00
Fomentar el cambio de movilidad con prohibiciones a determinados coches no es la mejor forma para alcanzar el objetivo impuesto por Europa para 2035. El ayuntamiento de Múnich implantó una medida más que polémica el pasado otoño, al detectar altos valores de óxido de nitrógeno en la calidad ambiental de la ciudad. ¿La solución? Prohibir la circulación de los vehículos más viejos.
Una medida que, en un principio, no afectaría a los residentes de zonas concretas de la ciudad alemana ni a los trabajadores o a los que deben de acudir a centros médicos. Esta medida se implantó el pasado octubre, y ya está teniendo tal nivel de repercusión que el propio gobierno de la ciudad se enfrenta a una gran demanda judicial. En solo unos meses no ha sido posible determinar si el hecho de prohibir la circulación de los modelos Euro 4 ha sido suficiente para rebajar los óxidos de nitrógeno, por lo que planea la larga sombra de la siguiente fase, que afectará a miles de diésel más matriculados entre 2011 y 2015.
Los diésel matriculados de 2005 a 2010 no pueden circular en Múnich
Y es que, a partir de octubre de 2023, si los niveles de NOx en la calidad del aire no disminuyen, la prohibición se extenderá a los diésel Euro 5. Y si aún persisten valores altos, hay una tercera fase prevista para abril de 2024 con el consiguiente cierre de la ciudad a los diésel Euro 6. En definitiva, casi que solo podrán circular los híbridos, enchufables y eléctricos, además de los modelos más modernos que hayan sido ya homologados para cumplir con la futura norma Euro 7 que entrará en vigor después de mediados de la década, allá por 2026.
La decisión del gobierno local de la capital alemana se ampara en la superación del límite impuesto por la Unión Europea de calidad del aire, que no puede superar los 40 microgramos de dióxido de nitrógeno por metro cúbico de aire, habiendo medido en diferentes puntos de la ciudad entre 43 y 49 mcg/m cúbicos. Las principales asociaciones de conductores ya han interpuesto varias demandas en el Tribunal de Múnich, que ha admitido a trámite y en las que se refleja que, en el último trimestre de 2022 los valores se rebajaron considerablemente, mejorando hasta en un 50 por ciento en los últimos años.
¿Peligra la prohibición de los diésel Euro 6 en Europa?
Una medida que consideran desproporcionada, y su posible traslado a otros países del entorno. Los parques móviles no pueden renovarse totalmente con vehículos de bajas, o cero, emisiones en poco tiempo, por lo que las asociaciones tampoco entienden por qué la medida afecta exclusivamente a los diésel y no a otras instalaciones que también generan grandes emisiones de óxidos nitrógeno. Berlín también implantó esta medida pero ha tenido que recular y levantar la prohibición, mientras que Hamburgo no prohíbe la circulación en toda su extensión más allá de un anillo central en el que sí sanciona la circulación.
