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Comprar un coche en Alemania: cómo importarlo tú mismo

Alemania es la meca de los coches usados, especialmente en marcas Premium, dado el alto ritmo de sustitución de su mercado. Es posible encontrar coches seminuevos a un precio muy atractivo, aunque hay que considerar una serie de gastos para que merezca la pena.

Comprar un coche en Alemania: cómo importarlo tú mismo
Fotografía: Stephen Hanafin (Flickr) CC BY-SA

11 min. lectura

Publicado: 17/12/2019 22:00

Gracias a la libertad de circulación de personas, mercancías y capitales en la Unión Europea tenemos una relativa facilidad para comprar un coche en Alemania o en países cercanos. Eso sí, deben estar de serie o sin reformas de importancia, de lo contrario tendrás que hacer frente a una pesadilla administrativa. En Alemania habrá mucho donde elegir, sobre todo en los Länder (estados) del sur.

Si tienes claro qué tipo de coche quieres, hay que iniciar la búsqueda en portales de compraventa de vehículos usados (Gebrauchtwagenbörse), filtrar por las características deseadas y sobre todo por la zona: región (Land) o código postal (PZL o Postleitzahl). Toma nota de los candidatos que más te interesen, y lo digo en plural por si no sale la operación a la primera. Si no sabes alemán, necesitarás intérprete o un nivel fluido de inglés.

No adelantes dinero por un coche (menos el total), puedes ser víctima de estafadores; tienes que verlo en persona

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La forma más rápida y económica de viajar a Alemania es en avión, teniendo en cuenta que allí hará falta seguramente un coche de alquiler si no estudias previamente las combinaciones de transporte público. Recurrir a taxis hará que los costes se puedan desmadrar un poco, sobre todo en el caso de concesionarios, compraventas o domicilios particulares alejados del centro.

Fotografía: photoheuristic.info (Flickr) CC BY

Tienes que prever unos días hábiles para hacer la gestión, en un día no vas a poder, así que resérvate un mínimo de tres días, deseables cinco, lo que te sobre inviértelo en hacer turismo o visita a conocidos. Si el billete de avión te sale más barato con la vuelta, no lo dudes, tendrás un plan Z si fracasa el retorno con el coche o no pretendes volver conduciendo.

Los concesionarios oficiales ofrecen la mayor seguridad, pero son más lentos a la hora de entregar el vehículo. Los más rápidos son los particulares, y en el término medio los compraventas. Comprando a particular necesitamos un contrato de venta, y a profesional necesitamos factura con: precio (Kaufpreis), número de identificación fiscal (DE-) y número de bastidor (Fahrzeug-Identifizierungsnummer). Pide también el certificado de conformidad (Zertifikat der Konformität), ahorrarás más de 90 euros.

El IVA se paga en Alemania (en España no hay que pagarlo otra vez) al profesional, un particular no cobra IVA pero habrá que abonar el impuesto de transmisiones patrimoniales (ITP) en España. El contrato de venta tendrá que traducirse mediante intérprete jurado, elige uno de la lista oficial. A modo de referencia, serán 70-100 euros.

Si tienes paciencia y sabes elegir, puedes llevarte un buen chollo en coches de menos de 5 años

El pago del coche se puede hacer en efectivo sin límite, solo que por encima de 10.000 euros nos pedirán nuestros datos y el DNI. Mediante transferencia internacional y estándar SWIFT el dinero tardará uno a tres días hábiles en llegar. Sin que llegue la transferencia no te vas a llevar el coche. Consulta las comisiones si pretendes sacar el dinero en un cajero y los límites de operativa de tu tarjeta.

Evita las unidades que han sufrido accidentes, se marcan como "Nicht Unfallfrei"

Para iniciar el papeleo alemán hace falta un certificado de inspección técnica (Hauptuntersuchung) emitido por Drekra, TÜV, ADAC, KÜS... Si no va incluido te costará 100 euros pasar esa inspección. Además, precisarás el certificado de superar la prueba de gases (Abgasuntersuchung), otros 30 euros. Los papeles del vehículo (Fahrzeugbrief) no pueden faltar. Contrata a un gestor y sáltate el siguiente párrafo, o lee:

En la oficina de matriculación (Zulassungsstelle) tienes que aportar los papeles anteriores, además de un certificado de seguro temporal (Versicherungsbestätitung o Haftpflichtversicherung) por días. Allí nos darán unas matrículas provisionales para exportación (Ausfuhrkennzeichen), ya que en ese país los coches a la venta se entregan siempre sin placas, se asocian al dueño. Esto te costará unos 100 euros. Con toda la documentación dirígete a una oficina de tráfico (Verkehrsamt), y cuidado con los horarios.

Las placas provisionales alemanas tienen un aspecto similar a esta, con la fecha de vigencia a la derecha

Si todo ha ido bien, podrás irte conduciendo hasta España, con lo que implica en consumo de combustible y más de 100 euros en peajes. En Alemania habrás gastado alojamiento y comidas, y esto es totalmente variable según lo quisquillosos que seas, la temporada y la zona. Haz un estudio previo de todos estos costes.

La alternativa es mandar el coche en camión (de 500 a 1.000 euros) a España, que llega en unas semanas, y volver en avión. Se tienen que pagar los costes de exportación en la sucursal de tráfico igualmente. Antes de que caduque el seguro provisional hay que dirigirse a una ITV española a por la ficha técnica, pero necesitas documentación adicional.

Siendo previsores, pues las sedes de la DGT pueden tardar mucho en darnos cita, hay que iniciar el expediente de matriculación ordinaria, abonar las tasas (96,80 euros), el IVTM en nuestra localidad (se hace antes) y llevar toda la documentación de Alemania. Lo más sano a nivel mental es pagar 300 euros a una gestoría y que se encarguen ellos.

Matrícula provisional española, con una vigencia de 60 días y prorrogable otros 4 plazos

También existe la posibilidad de dejar pagado el coche en Alemania, volver a España, iniciar los trámites para obtener unas placas de matrícula provisional verdes -sin que nadie haya visto el coche en persona- y, con ellas, volver conduciendo a España con un seguro español convencional, como el que sacarías habitualmente. No se pueden asegurar matrículas de fuera.

Dispondrás de 60 días para terminar el expediente de matriculación y puedes pedir cuatro prórrogas de otros 60 días cada una. También puedes iniciar el trámite de las placas provisionales antes de que llegue el vehículo en camión, porque de ahí a la ITV o va con placas verdes o en grúa. Ni siquiera valores la posibilidad de circular sin placas o sin seguro vigente.

Recuerda que si has comprado el coche a un particular tendrás que abonar el ITP correspondiente y tienes que saber cuál es el valor de Hacienda que toca. En cualquier caso, tendrás que pagar también el impuesto de matriculación (IM), que depende de las emisiones de CO2, salvo que sea un modelo anterior al 2006, con otros criterios.

Sin certificado digital o DNI-E te tocará visitar una sede de Hacienda por el ITP o IM, tenlo en cuenta

Si todo te ha salido bien y dispones de toda la documentación, tienes que pasar la ITV (sí, otra vez). Con la inspección técnica superada se completa el expediente de matriculación en la DGT, se asigna matrícula española, y ya solo queda ir a imprimir las placas y comunicar a la aseguradora y al ayuntamiento donde vives el cambio de matrícula.

En el caso de los vehículos históricos que quieran catalogarse como tales, las placas provisionales las vas a necesitar sí o sí, armarte de paciencia y echarle otros 600-1.000 euros en completar los trámites. En este caso te asignarían una matrícula ordinaria (que solo tendrás en papeles) y una definitiva que comienza por "H".

Consulta por adelantado todos los trámites que has de hacer en España en la página web de la DGT. Si aceptas un consejo de amigo, recurre a los servicios de gestores o de empresas especializadas en importación de coches de Alemania, siempre y cuando puedas acreditar que a) existen, b) tienen buenas críticas y c) no te sale mucho más caro.

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