Dubai supera a Nueva York y Londres en coches per cápita

Lo que no consiga el dinero no lo consigue ni nada ni nadie. Dubái, esa ciudad de Emiratos Árabes Unidos con casi la misma cantidad de arena que de dinero, ha pasado de ser un territorio de pastores y nómadas a convertirse en una de las urbes más cosmopolitas, modernas y adineradas del mundo. El dinero del petróleo campa a sus anchas entre las enormes avenidas, donde cada vez más se va incrementando el número de automóviles.

La evolución ha sido tan escandalosa que actualmente Dubái cuenta con un ratio de coches per cápita superior a grandes ciudades como Londres o Nueva York. En apenas nueve años el número de automóviles se ha duplicado, pasando de los 740.000 en 2006, a los más de 1,4 millones que circulan en la actualidad, es una media de un 8,2% más año tras año.

Ciudades como la americana o la británica, presentan un índice per cápita muy inferior a la ciudad árabe. Las cifras no engañan: en Nueva York hay 305 coches por cada 1.000 habitantes, en Londres esa cifra es aún menor, con 213. Pues bien, Dubái ya registra una cifra de 540 coches por cada 1.000 habitantes, es decir que un 54% de la población cuenta con un vehículo.

Los coches de lujo proliferan en Dubái

Esta es la realidad actual, pero las cifras que se barajan para dentro de apenas cinco años asustan. Se estima que de seguir esta progresión, en 2020 Dubái ya contará con más de 2,2 millones de vehículos circulando por sus calles. Una cifra tan impresionante como escandalosa, viendo que hace apenas 30 años esta ciudad ni existía en los mapas.

No es de extrañar que cada día se registren atascos inmensos, y eso a pesar de que la ciudad ha sido diseñada con vistas al futuro, donde las avenidas con cuatro carriles, son las calles unidireccionales de por aquí. El Gobierno local ha fomentado en los últimos años el uso del transporte público, creando una inmensa red de metro, pero parece que donde esté el coche, que se quite lo demás.

Aunque gran parte de los vehículos que circulan son absolutamente normales, es bien sabido por todo el mundo el gusto por los excesos de los dubaitíes. Por allí ver un Ferrari es como ver por aquí un Prius, allí los 500 CV son como aquí nuestros 120. No es de extrañar que la Policía local necesite las bestias que tan acostumbrados nos tiene a mostrar. Una ciudad de contrastes al fin y al cabo.

Fuente: CTVNews