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IndyCarJack Harvey sustituye a Takuma Sato como piloto de Rahal

  • El británico es el segundo piloto confirmado en Rahal Letterman Lanigan Racing para 2022, pero competirá en el tercer coche del equipo, el #45
  • Los tres candidatos para completar la formación aspiran ahora al #30 que deja vacante Takuma Sato.
  • Sato es el principal favorito para ocupar la vacante de Romain Grosjean en Dale Coyne Racing.
Jack Harvey sustituye a Takuma Sato como piloto de Rahal
Harvey busca dar un salto de calidad en uno de los equipos más sólidos del campeonato

7 min. lectura

Publicado: 11/10/2021 17:30

Después de cuatro temporadas, Takuma Sato no seguirá siendo piloto del equipo Rahal Letterman Lanigan Racing en 2022. La salida del nipón, que cumplirá 45 años en febrero, fue confirmada por su equipo el pasado martes 5 de octubre, después de una andadura relativamente exitosa para ambas partes en IndyCar. La llegada de Sato en 2018, con una vitola de vigente ganador de las 500 millas de Indianápolis que acabó reeditando en 2020, fue toda una sorpresa, motivada por las dudas de Andretti Autosport a la hora de renovar con Honda, y proporcionó una segunda baza de calidad a un equipo que hasta entonces no tenía un segundo coche a tiempo completo. Su hueco en el equipo, aunque no en el mismo coche, será ocupado por el británico Jack Harvey.

El anuncio de este lunes se anticipaba desde hacía meses, pero a diferencia de lo esperado, Harvey no se subirá al #30 que deja vacante Sato, sino al coche #45, la tercera unidad para la que Rahal confirmó un programa completo el pasado mes de agosto. Contará por tanto con el patrocinio de Hy-Vee, la compañía que ha permitido financiar esta ampliación, así como el regreso del óvalo de Iowa. La confirmación de Harvey se produce dos meses y medio después de anunciar su inesperada salida de Meyer Shank Racing, donde será sustituido por un Simon Pagenaud anunciado a bombo y platillo hace dos semanas.

Hasta ahora, Bobby Rahal había manifestado en múltiples ocasiones que el #45 era el coche objetivo en su búsqueda de un tercer piloto entre los tres candidatos que lo han conducido este año: Christian Lundgaard, Santino Ferrucci y Oliver Askew. Con este cambio de paradigma, no queda claro si el elegido necesitará traer una financiación propia sustancial para formar parte del programa de Rahal, lo que beneficiaría en primera instancia al danés por el apoyo de Alpine ante un Ferrucci que perdió su asiento el año pasado por falta de patrocinios, y un Askew que nunca ha aportado patrocinadores personales en sus dos años en IndyCar.

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Pese a salir del equipo que ha conquistado este año la Indy 500, Harvey busca dar un salto de calidad con una formación que ha frecuentado el top 10 este año con sus tres máquinas, aunque sin victorias por primera vez desde su salto de calidad en 2015. El piloto británico, de 28 años, tampoco cuenta aún con triunfos en su palmarés, gozando de una gran reputación como calificador (tres primeras líneas y 15 clasificaciones en el top 6) que solo se han traducido en un solitario podio en 2019 en el rutero de Indianápolis y dieciséis top 10. Hasta ahora, Harvey había sido el hombre franquicia de Shank desde que piloto y equipo debutaron en la categoría durante la Indy 500 de 2017, disputando 49 carreras hasta la fecha.

En su segunda temporada a tiempo completo, Harvey ha mejorado dos puestos para terminar 13º en la general, con dos cuartos puestos en St. Petersburg y Portland como mejores resultados, pero con la sensación general de que Shank ha desperdiciado múltiples oportunidades de obtener buenos resultados con frecuencia a raíz de malas estrategias o paradas desafortunadas. Una sensación a la que probablemente no contribuyó el triunfo en Indianápolis, en su primera carrera con el equipo, de un Hélio Castroneves que pilotará una segunda unidad de Shank a tiempo completo en 2022. Aún con todo, el brasileño sufrió esos mismos desmanes estratégicos en Long Beach, cuando un potencial podio se convirtió en un 20º lugar por una incomprensible decisión de no parar en boxes cuando tocaba.

Por su parte, las cuatro victorias de Sato como piloto de Rahal han sido las únicas del equipo en estos cuatro años, añadiendo a los triunfos en Portland (2018), Barber y Gateway (2019) su segunda conquista de la Indy 500 en la histórica edición sin público de 2020. Aquel año terminó séptimo en la general, su mejor posición en la tabla desde su llegada al campeonato en 2010. No obstante, la inconsistencia marca de la casa le hizo terminar en tres de esos cuatro años por detrás de su compañero Graham Rahal, y en esta última temporada, pese a terminar en una sólida undécima posición, pasó por lo general bastante desapercibido, sin podios (un cuarto puesto en Detroit como mejor resultado) y sin clasificar por encima del 15º lugar en ningún evento.

Pese a todo, este parece no ser el final de la aventura IndyCar para el veteranísimo Sato, con seis victorias, 14 poles y 10 podios en su haber en 198 carreras. Si todo va como debe, el ex piloto de Fórmula 1 será anunciado en próximos días o semanas como nuevo ocupante del #51 de Dale Coyne Racing, alineado en co-propiedad con Rick Ware Racing. Dicha máquina ha quedado vacante tras la salida de Romain Grosjean rumbo a Andretti Autosport, con tres podios y una pole en las 13 carreras que ha disputado. El francés no hizo la temporada completa, cediendo su asiento en tres carreras de óvalo a un Pietro Fittipaldi que terminó 25º en las 500 millas de Indianápolis, y el coche fue el 14º con más puntos de la temporada, un puesto por encima de la posición de Grosjean en la general.

Fotos: IndyCar Media

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