¿Qué ha cambiado en el diseño del BMW X4? Comparamos ambas generaciones
La segunda generación del BMW X4 ha sido desvelada. La esperada renovación del SUV Coupé de BMW llega cargada de novedades en todos los ámbitos. Estéticamente, la evolución que presenta es notable. Por ello, vamos a comparar al modelo saliente (F26) con el nuevo X4 (G02) para conocer de manera clara y rápida en qué ha cambiado su diseño.
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Publicado: 14/02/2018 13:00
Comparativa del frontal. A la izquierda el nuevo X4 y a la derecha el modelo saliente.
El nuevo BMW X4 está listo para su puesta de largo en sociedad. La marca bávara ha desvelado con todo lujo de detalles la segunda generación de su conocido SUV Coupé que pronto podrá ser visto en vivo ya que estará presente en el Salón del Automóvil de Ginebra 2018 que se celebrará el próximo mes de marzo, será la verdadera prueba de fuego para el renovado «Sports Activity Coupe» (SAC) de BMW.
La nueva generación del X4 llega cargada de importantes novedades en todos los ámbitos. Tenemos desde un ligero crecimiento de su tamaño hasta una renovada imagen pasando por un apartado mecánico más refinado y la última tecnología de la marca en materia de conectividad, seguridad y confort. El resultado es un producto más interesante, llamativo y pasional al resto de sus «hermanos» de la familia BMW X.
A pesar de que en nuestro artículo sobre el BMW X4 2018 ya hemos analizado todas las novedades, avances y mejoras que ha recibido la nueva generación, queremos ir un paso más allá y analizar de manera gráfica y visual cuál ha sido el cambio estético del X4 de segunda generación. Es algo más que un simple lavado de cara ya que adopta la nueva filosofía de diseño que BMW está aplicando a todos sus nuevos SUV.
La segunda generación del BMW X4 mantiene su característica línea lateral.
¿Qué versiones hemos utilizado para realizar la comparativa de las imágenes que acompañan este artículo? Del nuevo BMW X4 (G02) hemos usado la versión M40d, la única de la que la marca ha publicado fotografías. Y para el modelo saliente (F26), hemos optado por la versión M40i. Cabe señalar que esta última versión también estará disponible en el nuevo X4, aunque su llegada se producirá más adelante.
Si ponemos el punto de mira en su frontal, la nueva mirada que estrena el BMW X4 es notable. Los faros, de nuevo diseño, ya no conectan directamente con la parrilla que, por cierto, aumenta su tamaño de forma importante y mantiene los característicos riñones con barras verticales de un mayor grosor. El capó también ha cambiado, sus nuevas formas transmiten un aire más atlético, fuerte y rudo.
Por otra parte, y no menos importante, señalar el nuevo diseño de los faros antiniebla y las entradas de aire así como el paragolpes. Si nos damos una vuelta por su lateral, nos daremos cuenta de que conserva su característica línea. Ahora bien, los diseñadores de BMW también han realizado varios ajustes para adaptar la silueta del vehículo a su nuevo frontal y zaga. Los pasos de rueda adoptan una forma casi hexagonal, mientras que las ventanas laterales traseras están extendidas hacia la parte trasera. La línea de cintura también ha cambiado.
En la zaga, encontramos una evolución notable de las ópticas y la parte interior.
Terminando nuestro tour de la comparativa exterior del nuevo y viejo BMW X4 en la zaga, también encontraremos novedades reseñables. En primer lugar, tenemos un nuevo grupo de ópticas de diseño más estilizado, delgado y horizontal. Sin embargo, y al igual que ocurre con la primera generación (F26), también se extienden hacia los laterales. El paragolpes y zona inferior también ha cambiado. El nuevo BMW X4 ofrece una mayor sensación de anchura.
¿Y qué hay del interior? ¿Ha cambiado mucho el habitáculo de una generación a otra? Aunque conserva la base del modelo saliente, el BMW X4 2018 ofrece un ambiente más refinado y tecnológico. Teniendo en cuenta que estamos comparando dos versiones M Performance, si dejamos a un lado detalles propios de ellas como las costuras de los tapizados y/o guarnecidos, veremos realmente en qué ha cambiado el interior del X4.
El cuadro de instrumentos estrena nuevos diseño, al igual que la consola central (tanto los controles del equipo de audio como de la climatización). Las salidas de aire también son nuevas y todo ello está coronado por una pantalla táctil de hasta 10,25 pulgadas para la versión Professional del sistema de navegación. El volante, a pesar de seguir teniendo tres radios, también es nuevo.
El interior no es ajeno a los cambios. Arriba el del nuevo X4 y abajo el de la primera generación.
La llegada del nuevo BMW X4 a los concesionarios está prevista para el próximo verano. La producción del modelo actual se finalizará el próximo mes de marzo.
