Consejo de experto, este simple gesto puede salvarte la vida cuando paras detrás de un camión
La conducción plantea numerosas situaciones potencialmente peligrosas, tanto en ciudad como en vías interurbanas. En muchas ocasiones, no depende de nosotros vernos involucrados en un accidente, pero existen determinados trucos para minimizar el impacto de estos.

La conducción es una actividad placentera para muchos de nosotros, aunque para otras personas no es más que una herramienta a utilizar para otros fines.
En cualquier caso, todos estamos expuestos a los peligros de la carretera, y no solamente por nuestras acciones, sino también por las del resto de usuarios de la vía, ya sean peatones, ciclistas u otros conductores de vehículos.
Un ejemplo muy claro de ello es el que destaca el creador de contenido @miguel_assal en su cuenta de Instagram. Se trata de una situación que vivimos con mucha frecuencia, pero que con un poco de mala suerte puede acabar en tragedia.
Esta maniobra nos puede venir muy bien no solamente en atascos, también en semáforos o en pendientes
Cómo actuar al detenernos detrás de un camión
La situación es la siguiente: estamos circulando por una carretera o autovía y llegamos a un atasco. Lo hemos visto a tiempo y nos detenemos justo detrás de un camión de grandes dimensiones.
Pero, ¿qué ocurre si otro camión que circula detrás de nosotros va despistado? Entonces nuestro coche puede acabar empotrado contra el camión situado delante, incluso debajo de él… con nosotros dentro.
Sin embargo, existe un modo de evitar esto. No el accidente en sí, pero al menos esquivaremos el peor desenlace posible, que es impactar contra el camión situado delante de nosotros.
Distancia y giro de volante
Para ello, debes hacer dos cosas muy sencillas. La primera es mantener la distancia de seguridad para que la segunda acción sea efectiva. Esta consiste en girar el volante hacia el arcén, de manera que si un vehículo nos impacta por detrás y nos proyecta hacia delante, nuestro vehículo gire hacia el exterior y evite el choque por delante.
No habremos salvado el accidente, pero al menos habremos minimizado sus consecuencias y, en caso de habernos detenido detrás de un camión pesado, habremos evitado un desenlace potencialmente trágico.
Esta maniobra nos puede venir muy bien en diferentes situaciones, no solamente en atascos. También en semáforos o en pendientes, donde además los camiones en mal estado o con exceso de carga pueden llegar a perder los frenos.