Primeras imágenes del Ferrari 512S Modulo Pininfarina tras su restauración

El pasado mes de junio se dejaba ver en Europa el ejemplar único del Ferrari 512S Modulo, pues fue uno de los clásicos más destacados de la edición 2019 del Concorso d'Eleganza Villa d'Este, celebrado a las orillas del Lago Como, en Italia. Poco despues de ese evento, esta pieza única creada por Pininfarina participaba en otro evento europeo de carácter menor cuando sufrió el peor percance de su vida, su sistema de escape provocó un incendio que afectó a la zona trasera del vehículo.

Afortunadamente, el incencio no producjo graves consecuancias debido a la rápida actuación de los presentes, por lo que los daños fueron solo de carácter leve. Afectando tan solo al propio sistema de escape y al extremo del capó trasero. Elementos fácilmente reparables aunque no por cualquier taller. Su propietario, el coleccionista James Glickenhaus, confirmó en ese momento que planeaba restaurar el deportivo italiano y al parecer, los trabajos están a punto de terminar.

Como podemos ver en las imágenes superiores, publicadas por el mismo propietario en sus redes sociales, el Ferrari 512S Modulo ya ha sido reparado a nivel a nivel estético, pues la zaga y el capó ya lucen como nuevos. No obstante, si atendemos a los comentarios de las imágenes, el sistema de escape aún no ha sido reemplazado. Motivo por el que sospechamos aún no ha sido instalada la placa vertical trasera de color negro.

El Ferrari 512S Modulo o simplemente Ferrari Modulo (que es como lo llama la mayoría) fue un radical concept único creado por Pininfarina en 1970. Aunque este proyecto no fue para nada convencional, pues la propia base empleada ya era muy especial, el bastidor y el V12 de 5.0 litros especificaciones Can Am del Ferrari 512S de competición. Este era el biplaza de Sport (Grupo 5 FIA) más poderoso de Ferrari en aquel momento, por lo que hablamos de un conjunto ultraligero que desarrollaba más 550 CV en su especificación más alta.

Hace unos años, Glickenhaus logró convencer a Pininfarina para que le vendiera el Ferrari 512S Modulo, que llevaba años siendo un mero objeto de adorno en la colección del carrocero. Tras hacerse con él, el coleccionista estadounidense lo restauró para devolverle sus capacidades funcionales, por lo que hablamos de un chasis diseñado para competir en Le Mans o Sebring con unos 558 CV capaz de circular como cualquier otro vehículo, aunque solo sea en circuito, pues nunca ha sido matriculado.