El duro reto de Mitsubishi en Europa con los Colt y ASX se mide por un sólo detalle que les abre más posibilidades de éxito frente a Renault
Un Renault Clio con otra imagen y otro logo. Así es el nuevo Mitsubishi Colt que se ha estrenado en el mercado europeo, la misma estrategia que han seguido con una nueva generación del ASX, el SUV equivalente. La marca nipona se enfrenta a una dura batalla con los homólogos franceses, una apuesta con un riesgo más que elevado.
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Publicado: 23/10/2023 06:00
Mitsubishi tiene muy clara su hoja de ruta en el mercado europeo, nuevos coches eléctricos y más crossovers y SUV, pero no tan a corto plazo como se esperaba. Los desarrollos de nueva generación llevan su tiempo, y con el Eclipse Cross que, no es uno de los mejores vendedores del mercado -apenas 40.000 unidades vendidas en Europa en solo dos años- y el Space Star, la marca de los tres diamantes no puede competir en igualdad con el resto de fabricantes.
La firma japonesa, integrada en el gigante del Rombo, se ha aprovechado al máximo de las sinergias para ampliar su oferta con dos apuestas en el segmento B en forma de utilitario tradicional y su correspondiente variante SUV. Los Mitsubishi Colt y ASX tienen un importante reto por delante para conquistar al gran público, teniendo en cuenta que son un simple Renault Clio y Captur con otra imagen delantera, porque la trasera es idéntica a la francesa. E, incluso también los interiores son los mismos.
Las claves del importante desafío de Mitsubishi en Europa a corto plazo
Lo cierto es que no se puede decir que la apuesta sea segura o redonda, porque la distinción entre los cuatro modelos prácticamente no existe, y eso es algo que los clientes valoran especialmente. Lo sabe el fabricante y también los concesionarios de que el reto está en dos factores muy concretos: equipamiento y garantía, porque en el plano de las mecánicas tampoco hay diferencia. Los «japoneses» se han hecho con toda la oferta de los dos franceses.
Porque en precio, la versión más básica del Clio sigue siendo 2.000 euros más barata que la del Colt, y en el caso del Captur tampoco hay una gran diferencia, especialmente si tenemos en cuenta que Mitsubishi ha confirmado que el grueso de las ventas, nada menos que un 45 por ciento, sea de la versión microhíbrida de gasolina de 140 CV. Frente a frente, la diferencia se repite en poco más de 2.000 euros y, una vez más, a favor del galo. La verdadera distinción entre los nipones y los franceses radica en el equipamiento de serie, más cargado en los primeros, y el plus de una garantía de cinco años en lugar de dos.
Lo que motivó a Mitsubishi a relogotipar los modelos de Renault
El por qué de esta decisión de relogotipar los dos modelos clave de la marca francesa se remonta tres años atrás, cuando la marca de los tres diamantes decidió no introducir nuevos modelos en el continente europeo al analizar el pobre rendimiento comercial y los estrictos requisitos de emisiones de sus motores, obligando a realizar una inversión en la que no se estimaba que diera la vuelta a las ventas.
