Ricciardo: "No voy a amargarme, pero no quiero que seamos cuartos para siempre"

A sus 29 años, Daniel Ricciardo comenzará toda una aventura de la mano de la escudería del rombo en su novena temporada en Fórmula 1, un viaje que comenzó en 2011 de la mano de HRT y que continuó con Toro Rosso, como piloto del programa de jóvenes talentos de Red Bull, tan sólo un año después. Su llegada al primer equipo no se produjo hasta 2014, aunque no tuvo mucho que celebrar en su país en la cita inaugural al ser descalificado tras arrancar desde la segunda posición en parrilla en Australia por un flujo de gasolina demasiado alto.

El hombre de la sonrisa eterna decidió cambiar de aires ante la llegada del motor Honda a Milton Keynes, con un incómodo compañero de equipo al que la escudería de la bebida energética llevaba en volandas. El #3 es plenamente consciente de que Renault se encuentra inmerso en un plan de cinco años que culminará cuando el nuevo reglamento que pretende implementar Liberty Media debería entrar en vigor, y en sus primeros instantes en las entrañas de su nuevo equipo, el australiano se mostró decidido a ayudar desde el comienzo.

“Apenas me había pasado por la fábrica y dije: ‘Red Bull tenía esto, vosotros lo necesitáis’. No hay nada en particular que crea que nos falta, imagino que hasta que no me suba al coche no sabré qué es lo que necesita, pero veo cosas buenas por aquí”, explicó Ricciardo. “Estuve aquí en diciembre, había mucho ruido y todo estaba en construcción, pero ya han terminado y todo está en marcha. Han trabajado duro durante el invierno, ese es un punto positivo que he visto de inicio, la ética de trabajo. Seré el primero en decirlo: al término de la temporada estás listo para hacer un parón y descansar, pero sé que hay mucha gente aquí que no tuvo ese tiempo, y eso me hace pensar que están hambrientos, algo realmente positivo”.

Ricciardo hizo gala de su habitual actitud bromista frente a la prensa a la hora de describir el objetivo que perseguirá junto a Renault en las próximas carreras. “En pocas palabras, y quizás sea aburrido para vosotros a la hora de escribirlo, es progreso, seguir progresando”, afirmó. “Es increíble lo que han hecho desde 2016; continuar en esta trayectoria, decir ‘vale, fuimos cuartos el año pasado, este año tenemos que ser terceros’ no es tan sencillo, porque la distancia con los tres de arriba es bastante grande, pero lo ideal es reducir la brecha. Si esto nos lleva a estar entre los tres primeros bien, pero sigue siendo una diferencia grande. Si conseguimos avanzar, será un año muy exitoso”.

Decir ‘vale, fuimos cuartos el año pasado, este año tenemos que ser terceros’ no es tan sencillo, porque la distancia con los tres de arriba es bastante grande

Por último, el nuevo hombre de Renault reconoció que no perderá ojo de su antigua escudería, si bien su ambición le llevará a no perder detalle de los puestos de cabeza. “Cuando firmé por Renault era consciente de que, de forma bastante realista, Red Bull iba a estar por delante en Melbourne; lo acepté, es algo bastante probable, porque ahora, de algún modo, me lo espero, no va a ser un shock ni nada parecido. Naturalmente voy a fijarme en ellos, pero también me fijaré en Mercedes y Ferrari. No voy a amargarme si nos superan en Melbourne, creo que ahora estamos en un camino diferente, pero no quiero conformarme con ser cuartos para siempre”, concluyó.

Fotos: Renault Sport F1 Team