¿Una nueva era en la energía eólica? Este aerogenerador flotante y autonivelante aguanta vientos de 252 km/h

Los aerogeneradores flotantes están de moda y, de hecho, España acaba de estrenar el primero de ellos conectado a su red eléctrica.

Pero el aerogenerador flotante Touchwind representa una innovación en el campo de la energía eólica gracias a un diseño radicalmente diferente y su potencial para reducir costes y aumentar la producción de energía, podría desempeñar un papel crucial en la transición hacia fuentes de energía más limpias y sostenibles en alta mar.

Y es que uno de los mayores desafíos para la energía eólica es la ubicación de las turbinas. Aunque las fuentes más prometedoras de energía eólica se encuentran en alta mar, las profundidades oceánicas plantean dificultades para las turbinas convencionales de torre fija.

Sin embargo, estos mares profundos podrían representar la clave para una mayor contribución de energía limpia, sin los inconvenientes asociados a las turbinas terrestres.

Hasta ahora, se ha buscado la tecnología perfecta para capturar esta energía de manera eficiente y rentable. Múltiples diseños innovadores están siendo probados con el objetivo de encontrar el equilibrio adecuado en términos de coste, producción energética, durabilidad, fiabilidad y facilidad de instalación.

Touchwind, un diseño radicalmente distinto

El diseño de Touchwind es revolucionario en todos los sentidos. Imagina una enorme aspa doble sostenida por un poste inclinado sobre un barril flotante, equilibrada por una gran boya. Según la empresa, este diseño cuesta aproximadamente un 30 % menos que las turbinas tradicionales de tres aspas.

Pero la innovación no se detiene ahí. Mientras que las turbinas convencionales se apagan con vientos de 90 km/h, el diseño de Touchwind puede resistir vientos de hasta 252 km/h. Esto significa menos interrupciones y, en última instancia, una mayor producción de energía.

Funcionamiento del aerogenerador Touchwind.

El secreto radica en el ángulo de inclinación del aspa y el efecto de la boya. En vientos suaves, la boya mantiene el aspa fuera del agua. Pero cuando el viento se intensifica, el aspa comienza a girar rápidamente, generando una fuerza de elevación similar al rotor principal de un helicóptero.

Esto provoca que la boya se eleve del agua, actuando como contrapeso y reduciendo el estrés en los anclajes del fondo marino. Además, el diseño se ajusta automáticamente a la dirección del viento, asegurando una posición óptima en todo momento.

Simplicidad en la fabricación e instalación

Otro punto fuerte de esta turbina es su facilidad de fabricación. Puede ser construida en cualquier puerto capaz de manejar su gigantesca aspa de 200 metros. Una vez fabricada, es sencilla de remolcar y anclar, lo que facilita enormemente su instalación en alta mar.

Touchwind ya ha completado prototipos en tierra y flotantes a pequeña escala. Con la inversión de la compañía japonesa Mitsui O.S.K. Lines, la empresa está acelerando su programa de pruebas y desarrollo.

Aunque aún no se tienen detalles precisos sobre cuándo se espera una operación a gran escala o el coste nivelado de energía, es innegable que Touchwind podría convertirse en un jugador revolucionario en el futuro de la energía eólica marina si confirma sus ventajas y no añade inconvenientes.

Fotos: Touchwind