El nuevo Ferrari Purosangue 2023 deja ver pequeños detalles en las pruebas de invierno

Los italianos del Cavallino Rampante tienen previsto presentar su nuevo SUV deportivo a lo largo de 2022, un debut que no conllevará la comercialización inmediata sino que se postergará hasta mediados de 2023. Mientras todos los preparativos se llevan a cabo, sus técnicos han regresado un año después al norte de Europa para realizar las pertinentes pruebas de invierno. Las segundas en todo el desarrollo, ya que el pasado año fueron avistados en estos lares las mulas Frankestein.

El prototipo de producción del llamado «FUV» se presenta cubierto con lonas por completo en estas fotos espía, ya que en los alrededores de Maranello el Purosangue ha sido cazado más de la cuenta, lo que ha llevado a Ferrari a ocultarlo por completo. Y en el que apenas se dirimen detalles, más allá de unos grupos ópticos delanteros que estarán divididos con los principales en un nivel muy bajo y unas finas franjas de LED por encima que actúan para la luz diurna como para los indicadores de giro.

Fotos espía Ferrari Purosangue 2023 en las pruebas de invierno

El conocido internamente como «Progetto 175» deja ver también un nuevo camuflaje por debajo de las lonas, un indicio de que ha evolucionado en los últimos meses, dejando parte de la parrilla delantera al descubierto y un frontal muy bajo. De hecho, el recorrido de la altura de la carrocería al suelo es tan bajo que casi es más un crossover que un verdadero SUV. Y un detalle muy significativo es que, comparado con otras unidades, no presenta un gran equipo de frenos, con unos discos macizos, aunque con perforaciones delante y detrás. Pero aún así el diámetro no es el esperado para un modelo que promete unas especificaciones realmente brutales.

La lona también deja ver una curvatura falsa, pues la verdadera línea del techo se encuentra mucho más alta y, al mismo tiempo, la luneta abierta en la lona está mucho más separada de la real. Un camuflaje muy habitual en este tipo de modelos para disimular las verdaderas líneas, que son las propias de un GT, frente al estilo familiar que muestra el prototipo cazado a las puertas de las instalaciones que Stellantis dispone en el norte de Suecia, con lagos helados convertidos en pistas donde el Purosangue demostrará su capacidad dinámica.

Con un habitáculo configurado para cuatro plazas, la marca italiana promete una verdadera revolución en el interior, con un nuevo sistema de infoentretenimiento que dispondrá de una gran pantalla táctil en el salpicadero y pantallas adicionales tras los asientos traseros. Toda la carne en el asador para un modelo que ya está considerado como uno de los verdaderos pilares de la marca, y en el que los clientes podrán elegir entre un potente sistema híbrido con un motor de seis cilindros en V como base y un brutal V12, todos con tracción a las cuatro ruedas y con cambio automático deportivo.