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Por qué es una buena noticia que Mercedes-AMG use turbocompresores eléctricos

Mercedes-AMG ha confirmado que su próxima generación de modelos de producción en serie utilizará turbocompresores eléctricos. Una tecnología que está siendo desarrollada en colaboración con Garrett Motion y que proviene directamente de la Fórmula 1. El uso de turbocompresores eléctricos permitirá resolver los problemas que presentan los turbocompresores actuales.

Por qué es una buena noticia que Mercedes-AMG use turbocompresores eléctricos
Mercedes-AMG confirma que sus próximos modelos usarán turbocompresores eléctricos.

4 min. lectura

Publicado: 17/06/2020 18:45

El futuro de Mercedes-AMG pasa, irremediablemente, por la electrificación. La firma de Affalterbach es consciente de los nuevos tiempos que corren y, sobre todo, del proceso de transición que está viviendo la industria automotriz. Es por ello que los ingenieros de la submarca deportiva de Mercedes trabajan a pleno rendimiento en el desarrollo de nuevas tecnologías relacionadas con la electrificación.

Uno de los pasos confirmados por Mercedes-AMG pone el punto de mira en la próxima generación de sus modelos. Los nuevos Mercedes-AMG apostarán por el turbocompresor eléctrico. La compañía alemana ha confirmado que este proyecto ya se encuentra en las fases finales de desarrollo. En un futuro próximo será usado en los modelos de producción en serie de Mercedes-AMG.

Turbocompresor eléctrico de Mercedes-AMG
La nueva generación de modelos Mercedes-AMG usarán turbocompresores eléctricos.

La tecnología de turbocompresor electrificado está siendo desarrollada en colaboración con Garret Motion y proviene directamente de la Fórmula 1. Una vez más, queda patente que numerosos avances tecnológicos vistos en dicha categoría automovilística acaban llegando a los coches de calle.

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El fabricante de vehículos deportivos asegura que esta tecnología resuelve «los conflictos» entre un turbocompresor pequeño de reacción rápida, que alcanza un rendimiento máximo relativamente bajo, y un turbocompresor grande con un elevado rendimiento máximo pero que, por otra parte, puede sufrir retardo en su respuesta. Un hecho que se conoce popularmente como «turbo lag».

Turbocompresor eléctrico, adiós al «turbo lag»

La clave principal de este sistema de sobrealimentación es la incorporación de un pequeño motor eléctrico que mide aproximadamente 4 centímetros y que está integrado directamente en el eje del turbocompresor. Más concretamente entre la turbina del lado de escape y la rueda del compresor en el lado de la admisión de aire fresco.

Turbocompresor eléctrico de Mercedes-AMG
Los modelos de producción en serie de Mercedes-AMG recurrirán al turbocompresor eléctrico.

Este motor eléctrico está controlado de manera electrónica y su función es accionar la rueda del compresor antes de que llegue el flujo de gases de escape. Ello permite mejorar significativamente la inmediatez de la respuesta desde el ralentí y a lo largo de todo el régimen de giro del motor. El motor eléctrico elimina el mencionado «turbo lag» o retraso del turbo. Por lo tanto, el resultado del accionamiento eléctrico del turbocompresor es que el motor de combustión responde de forma más instantánea al apretar el acelerador.

La electrificación del turbocompresor tiene otra derivada igualmente relevante. Y es que permite un mayor par a bajo régimen, lo que permite mejorar la agilidad así como la capacidad de aceleración desde parado. Incluso en momentos en los que se levanta el pie del acelerador o durante la frenada, esta tecnología permite mantener la presión de sobrealimentación en todo momento.

El turbocompresor eléctrico de Mercedes-AMG alcanza velocidades de hasta 170.000 rpm, lo que permite una velocidad muy elevada del flujo de aire. Se puede accionar a través de un sistema eléctrico de 48 voltios. Tanto el turbocompresor, como el motor eléctrico y la unidad de mando, están conectados al circuito de refrigeración del motor de combustión para trabajar en un entorno de temperatura óptima.

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