Todo sobre el divorcio de MV Agusta y Mercedes, la extraña pareja

MV Agusta F3 800 AMG.

Hace más de un año que sabíamos que iba a pasar, el Grupo Daimler sale finalmente del accionariado de MV Agusta, compañía de la que poseía el 25 por ciento desde hace tres años. Un extraño movimiento financiero que parecía ser la respuesta de Mercedes a la compra de Ducati por parte de Audi, ya que no parecía obedecer a ningún otro propósito industrial ni comercial.

A pesar de que tras la adquisición de la cuarta parte de MV Agusta, una marca de poco volumen y dedicada exclusivamente a productos deportivos en muy pocos segmentos, se llegó a especular con una colaboración más estrecha entre ambas marcas a nivel comercial, compartiendo espacio en algunos concesionarios del Grupo Daimler, lo cierto es que no hubo más colaboración que alguna edición especial con el nombre de AMG, como la F3 AMG que aparece en las imágenes junto al Mercedes-AMG GT. De resto, o al menos que se supiera, no hubo más colaboración entre ambas compañías. De Mercedes se creía que realmente deseaba un porcentaje más alto en la compañía, sin embargo, esto no solo no llegó a suceder, sino que parece haber sido la fuente de todos los problemas.

Fue el propio presidente de MV Agusta, Giovanni Castiglioni, el que sorprendía a todos el verano pasado cuando declaraba públicamente que deseaba hacerse de nuevo con el control del 25 por ciento de las acciones que estaban en posesión de Daimler, para lo cual, estaba ya negociando con diversos inversores.

MV Agusta F4 750, el modelo que resucitó la marca en 1999.

Estas declaraciones llegaron en un momento bastante delicado para la compañía de Varese, ya que a pesar de haber lanzado recientemente su primer nuevo modelo en años, la Turismo Veloce 800 (la primera sport-turismo de la firma) se encontraba en un momento económico muy complejo, tras una compleja reestructuración y redimesionamiento de sus operaciones a la baja, ademas de problemas con algunos proveedores amenazando detener la cadena de producción (que llegó a detenerse algunos días) y con una deuda bancaria de varias decenas de millones de euros avalada precisamente por la permanencia de Daimler en el accionariado de la compañía. Una de las cláusulas firmadas permitía a los bancos poder ejecutar la deuda en el caso de que Daimler dispusiera de un porcentaje inferior al 20 por ciento.

Por lo que la salida de Daimler de la marca de Varese no es casual, ni precipitada. La familia Castiglioni, propietarios de la firma, han sellado un acuerdo con ComSar Invest, un grupo inversor que pertene a Black Ocean Group, encabezado por Timur Sardarov, un empresario de origen ruso con intereses en el gas y el petróleo.

La cuantía de las cantidades pactadas no ha sido declarada, pero además de la compra del 25 por ciento perteneciente a Daimler (que en su día costó 40 millones de euros) se ha realizado una ampliación de capital, por lo que ahora el porcentaje completo de la marca (MV Agusta Motor S.p.A ) será propiedad de MV Agusta Holding. De esta última GC Holding (Giovani Castiglioni) será su accionista mayoritario y por tanto tendrá el control completo de la compañía, y ComSar Invest será el titular de una participación minoritaria.

MV Agusta by Zagato, la colaboración más profunda de la marca con el mundo del automóvil.

En cuanto al futuro de la compañía, lo poco que sabemos seguro es que en la mesa de diseño todavía se encuentran las sucesores de los modelos más veteranos de la marca, como la F4, que a pesar de contar con numerosas versiones y ediciones especiales durante estos años, lleva sin cambios de consideración desde que fuera presentada la F4 750 en 1999, diseñada por el genial Tamburini. Además de esta, también nos encontramos con la gama naked, que adolece del paso del tiempo.

El pasado año Castiglioni afirmaba que tenían en proyecto expandirse hacia otros segmentos, nombrando el éxito de Ducati con sus últimas líneas de producto en segmentos tradicionalmente ajenos a ellos, pero por el momento, afirmar cualquier cosa sería entrar en el terreno de la especulación.