Prueba Aiways U6, la sorpresa de la temporada de primavera

El despertar de la industria automovilística china parece haber cogido a muchos por sorpresa. El lejano oriente está imponiendo su poder a base de lanzamientos sensatos basados en la electrificación. Marcas que hasta ahora nos eran desconocidas se convierten en el pan nuestro de cada día. Aiways es una de las firmas menos conocidas, pero eso puede estar a punto de cambiar con la llegada de su segundo coche, el Aiways U6. Un SUV eléctrico que promete no dejar indiferente a nadie.

Su hermano, el Aiways U5, fue uno de los primeros eléctricos de China en llegar a España. La marca, a diferencia de otras, no esconde su origen y lo luce con estilo. Tras la marca Aiways, fundada en Shanghái en 2017, se encuentran algunos nombres de la antigua división de Volvo en el país. Tras unos inicios discretos, la llegada del U5 marcó un punto de inflexión. Con el acelerador pisado a fondo, el U6 aterriza ahora en Europa para plantar cara a modelos como el Nissan Ariya, el Volkswagen ID.5, el KIA EV6 o el Skoda Enyaq Coupé, entre otros. Todos ellos considerados del segmento generalista.

A simple vista está claro que hablamos de un SUV algo extraño en cuanto a su presentación, los chinos dicen haberse inspirado en un tiburón para diseñar el morro. No se parece en absolutamente nada a su hermano y en esta ocasión los diseñadores han optado por un formato cuanto menos llamativo. A pesar de su diseño no se puede decir que estemos ante un coche feo. Siempre digo que en cuestión de gustos no hay nada escrito, pero reconozco que cuanto más observo el U6 más me convence su estilo. No se parece a nada que haya en el mercado actualmente y eso es algo de debemos valorar positivamente.

Muchos también podrían decir que estamos ante una berlina elevada y no irían muy desencaminados. La altura libre con respecto al suelo es limitada (16,5 cms), pero sin duda me quedo con la vista lateral. El diseño parece muy equilibrado con una cabina instalada justo en el medio tras un capó grande para tratarse de un eléctrico y antes de una parte trasera con un marcado acento coupé. La trasera es la que presenta un aspecto más típicamente SUV con un gran portón de maletero y unas ópticas muy llamativas que recorren toda la anchura del coche.

No faltan los detalles por toda la carrocería, como los aletines aerodinámicos de los parachoques. Un recurso estético a la vez que funcional que permite dirigir el aire por donde se quiere. El coeficiente de resistencia de 0,25 es correcto, no es el mejor del mercado, pero demuestra que la aerodinámica se ha trabajado para buscar esa menor resistencia al aire. También destacan elementos como las franjas verticales de las taloneras, las llantas de 20 pulgadas y una paleta de colores algo escasa, apenas hay 4 tonalidades, donde destacan el amarillo racing (+400 euros) y el verde menta, que llega de serie.

De puertas para fuera puede haber dudas y controversia con la presentación que Aiways ha decidido darle al U6, pero nadie puede negar que en el interior el resultado es tan bueno como vistoso. El departamento creativo ha apostado firmemente por una combinación interior de tres colores: azul, blanco y rojo. La distribución de los colores genera la sensación de estar ante un coche de categoría. Pocos fabricantes generalistas, por no decir que ninguno, optan por algo así y sólo es habitual verlo en firmas premium como BMW, Mercedes o Volvo. El atrevimiento es digno de reconocer.

Pero no vayas a pensar que el interior sólo destaca por sus colores porque no es así, también lo hace por la calidad. Como ya me pasó durante la prueba del Aiways U5, he quedado muy sorprendido con el trato que los chinos han aplicado al habitáculo. La tapicería tiene una calidad al tacto extraordinaria y en líneas generales todo está perfectamente ensamblado y montado. Si nadie te dijese en qué coche estás rápidamente tu cabeza lo asociaría con una marca premium. Así de bueno es. Ya se podría decir lo mismo de cierto fabricante americano de coches eléctricos que es tachado de premium cuando no lo es.

Siguiendo con el apartado de equipamiento hay que decir que en España el Aiways U6 está disponible, al menos por ahora, únicamente con el acabado Prime, el más alto de la gama. Eso quiere decir que de serie cuenta con todo el equipamiento posible, que es bastante. Apunta: faros Full LED, climatizador bizona, conectividad para smartphones, techo panorámico, tapicería de cuero, asientos delanteros eléctricos (conductor calefactable), cámara de aparcamiento de 360 grados, cargador inalámbrico y sistema multimedia con pantalla de 14,6 pulgadas. A eso hay que sumar un equipo de 22 cámaras y radares con un nivel 2 de asistencia. El estándar del mercado.

Con todo esto quiero decir que el Aiways U6 dispone de todos esos sistemas que a día de hoy resultan prácticamente esenciales. No se echa en falta nada grave, aunque sí podemos criticar las pocas opciones de personalización disponibles. Aiways tiene que simplificar al máximo las alternativas para que la fábrica de Shangrao, China, pueda trabajar al máximo rendimiento. Por cierto, dicha fábrica cuenta con instalaciones de última generación y tecnologías, en su mayoría, procedentes de Europa. Ahora ya podrás entender el por qué del trabajo bien hecho.

El U6 es el modelo más grande de Aiways en estos momentos. Ubicado perfectamente en el segmento D-SUV, sus cotas alcanzan los 4,8 metros de largo, los 1,88 metros de ancho y los 1,64 metros de alto. A esas medidas hay que sumar una distancia entre ejes de 2,8 metros. Eso quiere decir que las plazas traseras son bastante generosas para pasajeros adultos. Hay mucho espacio para las piernas, algo menos para la cabeza, pero aún así pasajeros de 1,85 metros de estatura pueden ir cómodamente en viajes largos.

El maletero del U6 destaca con una capacidad mínima de 472 litros. No hay cortinilla, lo que para mí supone un defecto

Vamos allá con lo más importante en un coche eléctrico, la mecánica. Al igual que en las opciones de personalización, los chinos han confiado la propulsión a una variante. Se trata de un motor síncrono de imanes permanentes delantero desarrollado por ellos mismos con una potencia de 218 caballos y un par máximo de 315 Nm. Se alimenta de una batería de iones de litio tipo sandwich con 24 módulos y 61,1 kWh de capacidad neta desarrollada por el gigante CATL. Su cifra homologada de autonomía es de 405 kilómetros en el ciclo de homologación WLTP. Es el mismo conjunto que se instala en el Aiways U5.

Prueba del Aiways U6

Ya con el U5 tuve la impresión de estar ante un buen coche, con algunos defectos, pero en líneas generales muy bien. Y la verdad es que con el U6 esas sensaciones de mejora son superiores. Aiways sabe hacer muy bien las cosas y hay que quitarse un poco la venda de los ojos para darse cuenta de lo mucho que han evolucionado las marcas chinas. A pesar de contar con sólo 6 años de edad y de ser su segundo coche en el mercado mucho tendrían que aprender otros que dicen llamarse premium.

Al volante se siente un coche cómodo y bien asentado en la carretera. El aislamiento podría ser algo mejor, pero también reconozco que la rumorosidad es baja y que permite mantener una conversación sin apenas elevar el tono de voz. El conjunto está enfocado claramente al confort y a poder rodar largas distancias sin apenas inmutarse. El chasis absorbe muy bien los cambios de dirección, gracias en parte a un peso de 1.790 kilogramos (poco para ser un eléctrico de 4,8 metros). Sin embargo, achaca algo de conservadurismo en un trato más agresivo. La suspensión tiende ligeramente al rebote, pero mirando el conjunto no hay nada que desentone.

A la hora de afrontar un tramo más exigente dinámicamente hablando, el U6 saca a la luz dos defectos. El primero es la poca sensibilidad que transmite el volante. Si bien la dirección se endurece en el modo deportivo, sigue siendo demasiado ligera y poco comunicativa. El segundo fallo está en los frenos. En la primera mitad del recorrido las pastillas apenas actúan sobre los discos y es necesario pisar bien fuerte para bajar la velocidad. Cuesta acostumbrarse y en ciudad provoca cierta desconfianza inicial. Es difícil regular la frenada para no acabar dando un pequeño pisotón final.

Hay que tener en cuenta que no hablamos del eléctrico más prestacional del mercado. El motor desprende bien la energía, aunque no hay que esperar de él la misma patada que un Ioniq 6, por ejemplo. La entrega es enérgica a baja velocidad y algo más gradual a medida que elevamos el ritmo. La agresividad del sistema se puede gestionar a través de cinco modos de conducción: Eco, Normal, Sport, Custom y Pedal. En este último el coche acentúa su deceleración a la hora de levantar el pedal del acelerador, permitiendo conducir con un sólo pedal. Hay que trabajar con él, pero rápidamente se le coge el truco.

La regeneración no se puede gestionar de forma particular y siempre está asociada a esos modos de conducción. El resto de sistemas apenas cambian su comportamiento, así que lo más sensato es conducir en los programas más conservadores para así poder optimizar los recursos de la batería y maximizar la autonomía. Ya que hablo de eso debo reconocer que durante esta primera toma de contacto no ha habido lugar a analizar al detalle los datos de consumo y rango, pero sí que puedo decir que las cifras homologadas parecen estar muy próximas a las reales. El U5 ya advirtió esa cualidad.

A la hora de recargar, Aiways ha optado por alimentadores de media y alta potencia. Hasta 90 kW en corriente continua y hasta 11 kW en corriente alterna. Los datos oficiales anuncian un tiempo de espera de 35 minutos para pasar del 20 al 80% de la carga y un plazo de 7 horas cuando la conexión se realiza en una conexión doméstica de 11 kW. Tiempos razonables, no excepcionales, que permiten poder viajar largas distancias sin apenas preocupaciones.

Para ir concluyendo es hora comentar otro factor decisivo en la compra de un coche eléctrico, el precio. El Aiways U6 está disponible desde un precio base de 49.140 euros, sin ofertas o promociones. Al poder acogerse al plan MOVES III podemos restar hasta 7.000 euros a esa cifra, quedándose en unos razonables 42.140 euros. Para que te hagas una idea, un ID.5 de rendimiento similar cuesta 11.000 euros más. Por precio y tamaño el rival más directo es el Tesla Model Y básico que se ofrece desde los 48.200 euros sin contar con las ayudas.

Aiways comercializa sus productos en España a través de Astara, el mayor importador de vehículos de la península. Por el momento dispone de cinco centros de venta: Las Palmas de Gran Canaria, Tenerife, dos en Madrid y Barcelona. A eso hay que sumar 12 talleres oficiales repartidos por localidades como Bilbao, Burgos, Valencia, Alicante, Málaga, Palma de Mallorca y Sevilla. La marca quiere seguir expandiendo sus operaciones en España, aunque por el momento consideran que tienen cubiertas las principales zonas comerciales del coche eléctrico.

Conclusiones

Al igual que me pasó con el U5, me he quedado sorprendido con el Aiways U6. Tras haber recorrido los primeros cientos de kilómetros con él las sensaciones han sido muy positivas. El diseño me gusta, la calidad es extraordinaria, el sistema multimedia sigue flojeando, pero ha mejorado, el espacio interior es muy generoso, el confort de marcha es elevado y los consumos correctos. Obviamente en la parte eléctrica no es el mejor del mercado. Le falta algo de autonomía para serlo, pero en todo lo demás creo que es una excelente alternativa para aquellos conductores que quieran salirse de lo habitual sin correr grandes riesgos.