Hamilton, dispuesto a arriesgarlo todo: «Mi trabajo, mi reputación, no me importa»

Lewis Hamilton siempre ha sido algo polémico, pero desde que en 2020 comenzara a pronunciarse activamente sobre temas de desigualdad social y racismo, lo es aún más. Incluso, su popularidad como deportista ha caído bastante si nos atenemos a los datos de la reciente encuesta publicada por Motorsport Network.

Y es que los deportistas que suelen involucrarse en asuntos no relacionados con su actividad suelen sufrir las consecuencias de sus opiniones y forma de ser. Un carácter que, según el propio piloto británico, tardó en mostrar a su llegada a la Fórmula 1.

«Reprimimos tantas cosas que no nos damos cuenta del dolor que experimentamos»

«Los pilotos tienen que ser cuadriculados para llegar a la Fórmula 1», apunta el piloto británico en declaraciones a The Wall Street Journal. «Debes trabajar duro, irte a la cama a las 10 de la noche o lo que sea. Ningún piloto trabajaba en moda, ningún piloto hacía nada más, así que recuerdo estar allí y pensar: “Soy diferente”. Me gusta hacer todas estas otras cosas».

«Al principio, pensaba que me tenía que ajustar a cómo la gente quería que fuese y no estaba cómodo. Recuerdo el primer año, cuando llegué a la Fórmula 1 y experimenté racismo por parte del público y nadie dijo nada», recuerda Hamilton en relación a los efectos nocivos de su duelo por el Mundial con Fernando Alonso.

«Yo no era feliz. Había conseguido mi sueño, pero no era yo, no podía ser yo y no tenía la confianza en mí mismo por aquel entonces, así que simplemente me mantuve callado. Reprimimos tantas cosas que no nos damos cuenta del dolor que experimentamos», reitera.

Dispuesto a arriesgarlo todo

En la misma entrevista, Lewis Hamilton ha explicado cómo se produjo un cambio en su mentalidad, que pasó de estar completamente centrada en su actividad profesional y sus aficiones a abrirse a asuntos más serios y relevantes para la sociedad.

«En mi año número 14º o 15º (2020), estaba revisando las fotos de celebración y me di cuenta de que los equipos todavía son completamente blancos, hay muy poca gente de color y me pregunté cómo podía estar pasando esto después de que yo llevara aquí tanto tiempo», relata Hamilton.

«Luego todo lo que pasó tras la muerte de George (Floyd) me golpeó fuerte. No me podía creer que tanta gente siguiera callada con lo que había pasado», prosigue. «Así que ahora estoy dispuesto a arriesgar mi trabajo o mi reputación, no me importa. Quiero que la comunidad de raza negra sepa que les escucho y que estoy con ellos», concluye.

Fuente: The Wall Street JournalFotos: Mercedes AMG F1