Williams desvela un problema recurrente en el motor Mercedes
En los últimos grandes premios, los equipos motorizados por Mercedes han tenido varios problemas mecánicos que les ha impedido terminar las carreras. El Williams de Alexander Albon fue el último en sufrirlo en el Gran Premio de Canadá.
El desarrollo de los propulsores de la Fórmula 1 lleva cuatro temporadas congelado, por lo que puede parecer extraño que se produzcan problemas de fiabilidad en unas unidades de potencia tan probadas y que no han sufrido cambios de importancia en los últimos años.
Sin embargo, Mercedes está viendo como sus equipos acumulan abandonos en las últimas carreras. Primero fue Kimi Antonelli en Imola, luego fue Fernando Alonso en Mónaco y de nuevo Antonelli en España, con la misma unidad utilizada en tierras italianas.
Ya en Canadá, el agraciado con el premio del abandono fue Alexander Albon. Su compañero Carlos Sainz también sufrió el mismo problema, pero lo pudo gestionar para terminar la carrera en décima posición. Pero, ¿qué ocurrió exactamente?
«Tenemos que hacernos con los neumáticos, tenemos que entender el coche con la sensibilidad del viento»
Al motor Mercedes le entran los calores
Parece que la llegada de las altas temperaturas no le está sentando bien al motor Mercedes que, si bien no ha cambiado en los últimos años, debe hacer frente a la cada vez mayor exigencia aerodinámica de los monoplazas en materia de refrigeración.
No es, por tanto, un problema directamente relacionado con la marca alemana, pero que sí parece estar afectando más a sus equipos que a los de Ferrari, Honda y Renault.
El propio Alexander Albon reconoció, tras el abandono en Montreal, que «el hecho de que el coche se quedara atascado en el aire sucio dificultaba la entrada de aire limpio en la admisión».
Sin embargo, también reconoció que este problema «no va a ser solamente en esta carrera cuando suceda», ya que rodar en grupo es algo a lo que todos los coches deben hacer frente en cada gran premio.
El enfado de Albon con Williams
Aunque Alex Albon terminó abandonando por problemas en su motor, lo cierto es que la carrera del tailandés se torció desde el comienzo.
Nada más empezar, pugnando por posición con Franco Colapinto, Albon se salió de pista y recorrió dando saltos la escapatoria de hierba de la chicane formada por las curvas 8 y 9.
«El coche fue muy fuerte en la carrera, [era] fácil estar entre los 10 primeros y es frustrante perderlo. Mi primera vuelta no fue buena. Necesito hacer un mejor trabajo», reconoció el propio piloto a este respecto.
La estrategia y la radio
Posteriormente, la estrategia de Williams tampoco le ayudó a exprimir el potencial del coche, ya que le mantuvieron en pista durante 23 vueltas con unos neumáticos medios usados que sufrían de un importante granulado.
De hecho, Albon llegó a perder la paciencia por radio, preguntándose por qué el equipo no le hacía caso al solicitar entrar en boxes para cambiar los neumáticos.
«No sé por qué no me escuchas», se oyó durante la retransmisión, algo que posteriormente Albon matizó señalando a la realización de la carrera. «Siento que reprodujeron estratégicamente mis mensajes de radio. En cada vuelta decía que no era lo correcto, pero esperan hasta ciertos momentos para publicarlo».
Un cúmulo de situaciones que finalizaron con el abandono de Albon en un circuito en el que Williams esperaba sacar bastantes puntos, pero en el que al final debió conformarse con uno a cargo de Carlos Sainz.
«Perdimos una oportunidad este fin de semana. Creo que hemos sido rápidos», lamentaba Albon, que cree que el equipo no supo encontrar la puesta a punto óptima. «Nos perdimos en la clasificación, tenemos que hacernos con los neumáticos, tenemos que entender el coche con la sensibilidad del viento», concluyó.
Fotos: Williams Racing
