El nuevo Giulia deberá liderar el cambio de Alfa Romeo

Alfa Romeo está pasando por su particular peregrinaje por el desierto. Históricamente es una marca que ha cosechado tan buenos resultados en los circuitos como en las carreteras. Su legión de seguidores es prácticamente inigualable en el mundo del motor. Su época dorada pasó y no han sabido adaptarse a los cambios, pero será ahora, con la llegada del nuevo Alfa Romeo Giulia, cuando se espera revitalizar la marca.

Esta es una de las pocas imágenes que tenemos del Giulia, montado sobre la carrocería de un Maserati

Con tres modelos no se puede subsistir en el mercado, y menos con dos unidades compactas y un deportivo radical. El descenso de la ventas han provocado que la marca italiana se encuentre en un momento casi desesperado, y ante estas situaciones no hay mejor solución que hacer lo que mejor se te da, y en el caso de Alfa Romeo son berlinas tan pasionales como bellas.

Ya os hemos hablando en más de una ocasión del nuevo proyecto de Alfa Romeo. Toda la marca tiene depositadas sus esperanzas en esta berlina. Su llegada está prevista para este verano, de hecho ya lo hemos visto rodar en una etapa de su fase de pruebas, sobre una carrocería del Ghibli eso sí, pero es que ambos compartirán plataforma, aunque modificada en el caso del Alfa.

La parte mecánica será uno de los puntos en los que se preste más atención en el desarrollo del modelo. Los directivos quieren recuperar esa época de pasión, y por ello se han fijado un objetivo que es cuanto menos arriesgado: quieren superar a la mejor berlina deportiva del mundo, el BMW M3. Pero no todo serán unidades prestacionales, sino que lógicamente también estarán disponibles versiones normales, pero que sean capaces de aportar unas mejores sensaciones tras el volante que el resto de competidores.

Para lograr ambos objetivos Alfa Romeo se va a apoyar en bloques de cuatro y seis cilindros, gasolina y diésel. Se estima que la potencia de salida puede estar en los 135 CV. Sin embargo lo realmente llamativo llega a la hora de hablar de la unidad más deportiva, aquella que debe competir con el M3. Esta podría emplear un motor V6 biturbo con una potencia cercana a los 480 CV.

Las recreaciones seguro que se quedan cortas ante el resultado final, lo veremos en verano

A fin de cuentas Alfa es Alfa y lo es en parte por sus diseños. Las sensaciones deportivas siempre han estado apoyadas sobre una carrocería de bella factura. Una vez más los italianos quieren volver a sus orígenes en este terreno, y por eso el Giulia va a tener muchos elementos característicos del Alfa 4C. Veremos si todas estas propuestas al final acaban siendo una realidad, pero una cosa está clara, la cosa promete.