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¿Compramos coches o tanques? Por qué los vehículos son tan grandes y cuándo cambiará

La industria automotriz se enfrenta a un problema cada vez más obvio: la obesidad de sus vehículos. Sin embargo, podríamos estar a punto de llegar a un punto de inflexión, ya que empieza a ser un gran impedimento.

¿Compramos coches o tanques? Por qué los vehículos son tan grandes y cuándo cambiará
El poderoso BMW X7 supera ampliamente las dos toneladas de peso.

6 min. lectura

Publicado: 17/05/2022 13:00

Los coches actuales han ganado tanto peso y tamaño que pronto las limitaciones de masa que se asocian a los carnets de conducir de una gran parte de los países del mundo podrían convertirse en un problema.

Y es que, por ejemplo, en España un conductor con carnet B no puede circular con un vehículo de más de 3500 kg. de MMA (masa máxima autorizada). Y nuevos modelos como el BMW X7 alcanzan ya 2480 kg. sin ocupantes ni carga alguna a bordo. Por su parte, el BMW i7 xDdrive60 asciende a los 2.715 kg, mientras que el Mercedes EQS se queda en 2.680 kg.

Además, se espera que el nuevo BMW XM PHEV llegue a las 3 toneladas y también está el caso extremo del GMC Hummer EV y sus más de 4 toneladas, que para poder conducirlo necesitaríamos el carnet de camión para llevarlo.

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Seguridad, lujo y modas

Muchos consideran que los coches eléctricos son los culpables del progresivo aumento de peso y tamaño a consecuencia de las grandes baterías que deben transportar para impulsarse, así como sus sistemas asociados.

Y no es del todo incierto, pues la diferencia entre el BMW Serie 7 con motor de combustión de 6 cilindros y el i7 eléctrico es de nada menos que 500 kg.

«Más comodidad ahora ya no hará que ganes más peso. Las tecnologías para conseguir comodidad son cada vez más inteligentes»

Sin embargo, esta tendencia es generalizada desde hace muchos años y precisamente BMW y el Serie 7 son un claro ejemplo de ello. La primera generación de esta prestigiosa berlina lanzada en 1977 pesaba 1470 kg. La actual pesa 2274 kg. en sus versiones de acceso. Es decir, un 40% más que la original.

Pero, ¿cuál es la razón de semejante incremento? La respuesta es sencilla: el lujo y la seguridad.

Con el paso del tiempo, los vehículos han ido ganando sistemas electrónicos relacionados con estos dos aspectos. Además, los requerimientos necesarios para la homologación de los vehículos y pruebas como las que realiza Euro NCAP han hecho que sea necesario introducir más elementos más resistentes y más pesados.

Tecnología, lujo, seguridad, habitabilidad... y cada vez más peso y volumen.

«A medida que el peso aumenta, se vuelve más difícil brindar la seguridad que queremos, y para brindar la seguridad que queremos tenemos que volver a aumentar de peso, por lo que es un círculo vicioso», cuenta Christoph Fagschlunger, gerente del proyecto del nuevo BMW Serie 7

«Los coches se estaban volviendo más pesados ​​incluso sin electrificación, con normas de seguridad y NCAP. Y luego de lujo», admite el ingeniero alemán.

Pero no sólo eso, también influye una moda y tendencia de compra claramente escenificada en los SUV, que se han convertido en los claros dominadores del mercado automotriz en los últimos 10 años.

Punto de inflexión

Hay quien teme que esta peligrosa tendencia siga aumentando en los próximos años, pero Christoph Fagschlunger, tiene una opinión diferente al respecto.

«No creo que los coches se vuelvan más pesados ​​de lo que son ahora, y hay muchas razones para eso», afirma el ingeniero alemán. «Veamos qué nos depara el futuro, pero el tamaño de los coches tendrá un final natural algún día, cuando no quepan en el garaje o sean incapaces de girar en la esquina de una calle. Ese día está cada vez más cerca».

Javier Gómara nos lo cuenta todo sobre uno de los SUV de moda, el nuevo KIA Sportage.

Lo cierto es que las ciudades, especialmente los barrios o pueblos más antiguos, no siguen el ritmo de evolución de los vehículos y en muchos casos determinadas zonas empiezan a convertirse en un problema de acceso para grandes modelos actualmente presentes en el mercado.

Pero Fagschlunger confía en que los avances tecnológicos también contribuyan a invertir la tendencia actual.

«Más comodidad ahora ya no hará que ganes más peso. Las tecnologías para conseguir comodidad son cada vez más inteligentes. Puedes eliminar el ruido de la carretera con masas alrededor del automóvil, o puede tener una cancelación activa del ruido de la carretera», pone como ejemplo.

¿Tendrá razón y, poco a poco, los vehículos comenzarán a perder peso y tamaño? Esperemos que así sea. Y, muy probablemente, las restrictivas políticas de emisiones contaminantes como la próxima EURO 7 también contribuirán a ello, pues de manera invariable el peso y el volumen derivan en un mayor consumo y contaminación.

Fuente: Carsales.comFotos: BMW Prensa

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