Dartz Prombon Black Shark, radicalismo extremo con 1.500 CV

No es la primera vez que os hablamos de Dartz Prombon, un muy particular fabricante ruso que es el responsable de auténticos despropósitos, ejem, todoterrenos absolutamente excesivos, como por ejemplo el reciente Dartz Prombon White Horse. Y si aquel ya era un buen ejemplo del extremismo de los vehículos de estos rusos, ahora llega el Dartz Prombon Black Shark, dispuesto a superarlo.

Según Leo Yankelovich, propietario de Dartz Prombon, "el Black Shark es el verdadero coche de espía del Siglo XXI", y cita a James Bond como una de sus principales inluencias. No parece que su principal misión sea la de pasar desapercibido, desde luego, y yo lo ubicaría más bien dentro de alguna película de cómic, por lo exagerado de su propuesta, o dentro de un videojuego apocalíptico de guerra.

En fin, el Dartz Black Shark ha sido concebido como si el helicóptero ruso de idéntico nombre se hiciese automóvil, y desde esta aproximación podemos entender mucho mejor las cosas... Como es tradición en el fabricante ruso, estamos ante un mastodonte de gran peso y dimensiones, y cuenta con blindaje B7, uno de los niveles más elevados, de ahí que la comparación con un tanque militar, más allá de su aspecto, no esté tan fuera de lugar.

Otros elementos característicos de este Black Shark son sus cristales de privacidad electrocromáticos, carrocería fabricada en Kevlar y titanio capaz de resistir la explosión de minas magnéticas, una parrilla frontal orientable a prueba de balas, techo capaz de resistir disparos de francotiradores o un detector de explosivos a distancia. Además, su perímetro está completamente vigilado por un sistema de cámaras. Sí, con excesos o sin ellos, como vehículo militar no tendría precio.

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Está claro que el Dartz Prombon Black Shark no es un coche destinado a las calles o autopistas de un país cualquiera, aunque quizás algún millonario de países en conflicto no piense igual.

Sus características técnicas son un poco más mundanas, ya que está basado en el Mercedes-Benz GL, y se podrá escoger con dos motores AMG diferentes, el 5.5 V8 del GL 63 AMG o el 6.0 V12 del GL 65 AMG. Eso sí, con una potenciación exclusiva que, a gusto del propietario, puede alcanzar hasta 1.500 CV.

El Dartz Prombon Black Shark se fabricará en una exclusivísima producción limitada a sólo cinco unidades(menos mal), junto a otra unidad especialmente personalizada destinada a un cliente londinense.

En palabras del propio Yankelovich, "estás aburrido de los coches de producción en serie, y lo sabes...Todos lo estamos. Las leyes y regulaciones, el downsizing, o la ecología y materiales reciclados hacen que no sea fácil destacar entre los mejores de la industria del automóvil". En el fondo, el propietario de Dartz es un verdadero outsider...

Fuente: Top Gear