Mercedes estrena un nuevo centro de pruebas de alta tecnología en Alemania

Cerca de 70 kilómetros de carreteras con diferentes firmes y hasta una pequeña ciudad se ha reproducido en el nuevo centro de pruebas de Mercedes en un antiguo complejo militar

Mercedes está de estreno, aunque esta vez no se trata de un modelo nuevo, sino que cuenta con unas nuevas instalaciones donde casi no tendrá que salir al exterior para probar nuevas tecnologías y el comportamiento dinámico de los futuros modelos de la marca de la estrella.

Todos los fabricantes cuentan con pistas de pruebas secretas en las cercanías de sus sedes, así como avanzados túneles aerodinámicos capaces de reproducir cualquier tipo de inclemencia meteorológica. Pero el avance tan rápido de la tecnología, por ejemplo, la conducción autónoma, hacen casi imposible que esta pueda ser probada amplia y estrechamente en la vía pública, especialmente porque todavía no existe una reglamentación para un nivel 5.

Para ello, cuentan con un área de 100.000 metros cuadrados, que hereda el nombre de la mujer de Carl Benz, Bertha Benz, y en donde se pueden reproducir cualquier tipo situación de tráfico que ponga en aprieto a los sensores y cámaras de los que se vale la conducción autónoma

Vista de las nuevas instalaciones de pruebas de Mercedes en Alemania

Aunque el nuevo centro de pruebas se estrenó realmente hace un año, la marca de la estrella lo ha inaugurado oficialmente hoy, dando una nueva vida a un antiguo complejo militar en las cercanías de Stuttgart, y que cuenta con una superficie tan grande como dos veces la del Principado de Mónaco. Nada menos que cinco kilómetros cuadrados de extensión, con 68 kilómetros de caminos y hasta una reproducción de una ciudad -con sus calles- para probar sistemas de asistencia a la conducción bajo diferentes condiciones.

Asfalto, tierra, grava, empedrados, pistas de resistencia, pendientes pronunciadas y caminos rurales, curvas por doquier y todas con diferentes marcas viales. Incluso, los alemanes disponen de un área especial para probar tecnologías de estacionamiento autónomo bajo unas estructuras protegidas de las señales de los satélites, de modo que los vehículos no pueden hacer trampas al usar las señales mientras buscan una plaza de aparcamiento.

Aunque Mercedes apunta que esta nueva instalación sólo es necesaria para realizar cálculos por ordenador y que no desplazará a un lado las pruebas de conducción en carreteras reales, no lo tenemos tan claro. En un futuro no muy lejano, las pruebas en vía pública quedarán relegadas por completo, amén del auténtico fortín que han diseñado hace casi imposible revelar un modelo completamente nuevo realizando pruebas en nuestras habituales fotos espía.

Dentro de un bosque de cinco kilómetros cuadrados de extensión, Mercedes cuenta con diferentes trazados para probar todos sus nuevos modelos y tecnologías

Fotos: Daimler