Scott Pruitt dimite por sus numerosos escándalos al frente de la EPA
Ni tan siquiera año y medio ha durado Scott Pruitt al frente de la EPA. Los múltiples escándalos que ha protagonizado este declarado negacionista del cambio climático han precipitado su salida de la agencia, de la que irónicamente ha sido uno de sus peores enemigos en los últimos años.
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Publicado: 06/07/2018 11:15
Scott Pruitt en la Casa Blanca.
Hace solo unas horas Scott Pruitt comunicaba su dimisión al frente de la EPA (Environmental Protection Agency). ¿La causa?, los numerosos escándalos que ha protagonizado este curioso personaje en poco más de un año que ha estado como administrador de esta institución, de la que irónicamente, ha sido uno de sus mayores enemigos, mientras ejercía como Fiscal General del estado de Oklahoma.
Ayer mismo os detallamos las numerosas polémicas y escándalos que han salpicado su extraña gestión al frente de esta organización medioambiental y que han provocado al menos una docena de investigaciones por parte del Inspector de la EPA, la Casa Blanca y el Senado.
La Casa Blanca confirmaba mediante un tweet del propio Donald Trump que aceptaba la renuncia de Pruitt y revelaba que el Senado ya había confirmado a Andrew Wheeler como sucesor de Pruitt.
Fue en febrero del pasado año 2017 cuando Pruitt era nombrado oficialmente administrador de la EPA, por lo que no ha durado ni año y medio al frente de esta organización, cuyas acciones y políticas son tomadas como ejemplo por el resto de organismos estatales e internacionales homólogos. de esa nación, sino por las entidades homólogas a la EPA de todo el mundo.
Durante este tiempo, Pruitt ha protagonizado escándalos de todo tipo, desde relaciones más que evidentes y demostradas con los lobbies y las industrias de la energía (como el carbón) o un gasto desmesurado e injustificado en materias irrelevantes, como un equipo de seguridad tres veces mayor que el de sus antecesores. Tienes un buen resumen de sus desmanes en el artículo de ayer.
La marcha de Pruitt es una gran noticia no solo para sus ciudadanos, sino para todas las entidades internacionales centradas en materia medioambiental, pues la EPA es una de las referencias legislativas globales más tenidas en cuenta y la agenda de Pruitt estaba claramente destinada a acabar con muchas de las medidas y logros obtenidos por esta institución en los últimos años.