Williams anticipa un nuevo Sainz desde Singapur

La temporada de Williams ha estado marcada por dos tendencias principales. La positiva, protagonizada por un monoplaza competitivo y un Alexander Albon habitualmente eficaz. La negativa, marcada por numerosos errores del equipo y la mala racha de Carlos Sainz.

Sin embargo, un podio lo cura todo y el conseguido por el piloto español en el Gran Premio de Azerbaiyán no solamente cambia la perspectiva de muchos con respecto a Williams, sino también el ánimo y la motivación del propio equipo.

«Ahora entiendo por qué pasó todo esto: porque el primer podio tenía que llegar así»

La recompensa merecida

Así lo ha expresado James Vowles al menos, afirmando que el podio de Bakú va a impulsar al equipo hacia una nueva fase de su crecimiento.

«He tenido la suerte de conseguir algunos podios en mi carrera, pero este lo recordaré para siempre. Nos lo ganamos juntos como equipo. Un equipo que, en los últimos años, ha estado atrás, apenas luchando por sobrevivir, y ahora lo hace para volver a esta posición», ha expresado en primera instancia, antes de personalizar en Carlos Sainz.

«Realizó una carrera fenomenal, una conducción excepcional de principio a fin, fue un placer verlo», apunta el director del equipo británico. «Se podía ver y oír lo mucho que significaba para él. Quería que obtuviera un gran resultado como este desde principios de año. Se podía ver que estaba en las cartas, pero nunca se concretó por una razón u otra».

«Creo en el impulso positivo y esto le da a Carlos una base real sobre la cual progresar. De repente, aumenta tu confianza y tu impulso y te permite dar un paso adelante, eso es lo que quería para Carlos. Creo que lo necesitaba», reitera un James Vowles que anticipa un Sainz más parecido al que vimos en McLaren y Ferrari.

«Todos lo necesitábamos como equipo. Simplemente, le muestra al mundo que aquí es donde estamos y que este es el viaje que estamos emprendiendo juntos. Para Carlos, creo que es fundamentalmente una ratificación de las decisiones que tomó hace un año», reitera el ingeniero británico.

Un éxito compartido

El podio de Carlos Sainz se ha personalizado mucho en el piloto madrileño, pero lo cierto es que cada miembro lo ha sentido como suyo. Eso también incluye a Alexander Albon, que a pesar de vivir un mal domingo en Bakú celebró como el que más el éxito de su compañero de equipo.

«Esto es lo que me encanta de este equipo, somos exactamente así. ¡Antes de darme cuenta, Alex [Albon] literalmente saltó del coche y estaba justo detrás de mí! Él quiere que este equipo tenga éxito y estuvo allí para celebrarlo a nuestro lado», cuenta James Vowles.

«Estoy deseando volver a la fábrica con el trofeo y sentir cómo se cae el techo del lugar. Este resultado es una recompensa a la increíble dedicación de toda la fuerza laboral, que da gran parte de su vida a este equipo», concluye.

Carlos Sainz también ha querido repartir responsabilidades, asegurando estar «muy orgulloso de todos en Williams por superar un año muy difícil. Hemos demostrado a todo el mundo el enorme paso que dimos en comparación con el año pasado».

«Estamos en ascenso y en la dirección correcta. Desafortunadamente, tuvimos mucha mala suerte e incidentes. Ahora entiendo por qué pasó todo esto: porque el primer podio tenía que llegar así», zanjó un Carlos Sainz que espera comenzar una nueva etapa, mucho más exitosa, desde Singapur en adelante.

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Fotos: Williams Racing