5 razones para montar la gigafactoría de Tesla en España
Ya sabemos que Tesla tiene planeado montar una segunda gigafábrica de coches y baterías eléctricas en el viejo continente, lo que no sabemos es cuándo. Recuperando el espíritu de #SpainLovesTesla, vamos a recordar cuáles son los puntos fuertes de nuestro país
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Publicado: 12/11/2016 11:00
Allá por mayo surgió una campaña desde Paterna, una localidad próxima a Valencia, para solicitar a Tesla que piense en España para la implantación de una fábrica en suelo europeo. Este fabricante quiere multiplicar su producción por cinco antes de que acabe la década, y la fábrica de Fremont (California) no será suficiente para atender semejante demanda.
Ahora que tenemos claro que Europa no solo tendrá fábrica, sino un parque de producción que se ocupe del proceso entero, la reivindicación patria tiene más sentido. Tesla se ha hecho con los servicios de una empresa de ingeniería alemana para automatizar todo el proceso. Reclamemos, España tiene buenas razones para acoger la factoría.
1) Somos el segundo productor europeo de automóviles
España es el segundo productor europeo combinando turismos, vehículos industriales ligeros y pesados. A nivel mundial estamos en el octavo puesto. Si solo tenemos en cuenta los vehículos industriales, somos el productor líder. Contamos con 17 fábricas de nueve grupos automovilísticos: Daimler (Mercedes), FCA (IVECO), Ford, General Motors (Opel), Grupo PSA, Renault Nissan y Volkswagen-Audi. El automóvil representa el 10% de nuestro producto interior bruto, con 300.000 empleados directos y unos dos millones indirectos.
A lo largo de 2017 se debería alcanzar el objetivo de tres millones de unidades. En los tres primeros trimestres acumulamos un volumen de 2.220.722 vehículos, es decir, un 7,89% más que en el mismo periodo de 2015. No solo producimos utilitarios y compactos, también producimos SUV de gama media y algunos modelos de gama más alta, como Ford Vignale o Audi Q3. En cuanto a proveedores, hay en torno a mil empresas que fabrican componentes para fábricas nacionales o extranjeras.
2) Somos competitivos y exportamos mucha producción
El 83% de la producción española de 2015 se destinó al extranjero, tenemos una gran tradición exportadora desde que Henry Ford II convirtió la planta de Almussafes en una de sus niñas mimadas en Europa. Las exportaciones se pueden cifrar en 30.000 millones de euros, es decir, el 19% de las exportaciones del país. España es un país muy atractivo para producir, el más competitivo de Europa Occidental.
Tal es ese grado de competitividad que sindicatos, empresas y trabajadores han conseguido que no se cierre ninguna fábrica de producción de turismos en lo que va de crisis económica. Solo han echado la persiana la inviable planta de Santana (Linares, Jaén) y una dedicada a autobuses en Barcelona. En cambio, a lo largo de Europa hubo decenas de cierres y deslocalizaciones.
3) Tenemos un país ideal para utilizar energía solar masiva
Una de las particularidades de la gigafactoría establecida en Nevada (EEUU) es su elevado consumo de energía eléctrica de origen solar. La situación española es envidiable, con la mitad inferior del país muy rica en radiación solar, solo comparable con Italia, Grecia o Turquía. Varias zonas de Andalucía tienen un promedio anual de casi 2.000 kWh por metro cuadrado, de acuerdo a Solargis.
En el caso de Nevada, se calculó que la planta produciría más energía de la que necesitaría para funcionar, y el resto se puede verter a la red. En ese sentido la legislación española es deficiente, y esperemos que los nuevos partidos hagan que el Gobierno del PP retroceda en su política de "impuesto al sol" y tenga más sentido montar dicha fábrica, que podría hacer las veces de planta de energía para la zona con sus excedentes de producción. En España la electricidad de la red no es barata.
4) El Gobierno pone facilidades a los fabricantes
En los últimos años los distintos fabricantes han inyectado en las plantas españolas sumas que alcanzan los 10.000 millones de euros, y han recibido numerosas adjudicaciones de producción masiva, a saber: Renault Kadjar y Mégane, Volkswagen Polo, Citroën C4 (Picasso, Grand Picasso y Cactus), SEAT Ibiza y León, etc. En otros sectores no, pero en cuanto a automóvil, el Gobierno de turno ha puesto las cosas fáciles a las grandes empresas.
En otros países europeos se ha movido producción al Magreb, a Turquía o a los nuevos miembros de la UE (países del este). España no, la mayoría de sus fábricas están muy cerca de sus techos de producción, aunque hay modelos puntuales que no han dado el resultado esperado, como Nissan Pulsar o Citroën C4 Cactus (se produce en exclusiva en Villaverde, Madrid). Tesla sería bienvenido por las autoridades españolas, dejando al margen el tema de la energía renovable con balance neto y la política hostil contra las baterías domésticas.
5) Tenemos buenas comunicaciones e infraestucturas de transporte
Cada año se transportan dentro de España cinco millones de vehículos, es decir, dos millones más de los que se producen aquí. Disponemos de varios puertos importantes que son capaces de grandes volúmenes de importación/exportación, como Vigo, Santander, Sagunto, Valencia, Barcelona... La red ferroviaria no está muy optimizada que digamos, sobre todo si hablamos del famoso corredor mediterráneo, pero mejorará.
En otras palabras, somos capaces de producir mucho y enviar los vehículos donde se precisen, a destinos tan lejanos como Estados Unidos, Australia o Japón. Somos capaces de producir mucho y bien. El 10% de la población activa está relacionada con el automóvil. Somos muchísimo más que sol&playa o agricultura, hace décadas que se sentaron las bases para que España estuviese al nivel que está, así que ya lo sabe, señor Musk. Fíjese en España. Le esperamos.