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Audi retrasa las entregas de los A6 y A7 al detectar emisiones de NOx irregulares en su motor diésel V6

cuando todo parecía solucionado y que los nuevos modelos de Audi salían de cadena de producción sin los "fallos" en la gestión de los motores diésel que tanto ha sacudido al gigante alemán de Volkswagen, la marca de los cuatro aros detecta nuevas anomalías relacionadas esta vez con el sistema AdBlue y la gestión de la solución acuosa para reducir las emisiones de óxidos de nitrógeno.

4 min. lectura

Publicado: 10/05/2018 21:00

Séptima generación del Audi A6, modelo en el que se ha descubierto un incumplimiento en las emisiones de NOx

La séptima generación del Audi A6 y la primera del A7 Sportback están saliendo de la cadena de producción para ponerse en camino hacia sus destinos y las manos de los clientes. Pero estos deben saber que se van a retrasar y, por ahora, no hay una fecha concreta de que la situación se resuelva rápidamente.

La marca de los cuatro aros ha detectados "irregularidades" en las unidades de estos dos modelos equipados con el motor diésel de seis cilindros en V y 3.0 litros TDI (V6 TDI Gen2 Evo) que desarrolla una potencia máxima de 272 CV, una incidencia que se ha comunicado oficialmente al Ministerio de Transporte alemán -como debe de hacer la marca cada vez que detecte una irregularidad- para tratar el asunto y aclarar si fueron equipadas con una unidad de control del motor defectuosa o no.

En un comunicado oficial, Audi ha dicho que descubrió irregularidades durante las investigaciones internas del problema del diésel y agregó que informó inmediatamente el descubrimiento al Kraftfahrt-Bundesamt (KBA), la Autoridad Federal Alemana de Transporte. El CEO de Audi, Rupert Stadler, ha señalado que "Informamos regularmente al KBA sobre los resultados de nuestro programa sistemático de pruebas de motores reportando cualquier anormalidad a la autoridad que otorga la licencia, ya que nuestro mayor interés está en la transparencia total y lo hicimos de inmediato en este caso".

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La primera generación del Audi A7 Sportback equipado con el motor diésel TDI V6 es uno de los modelos afectados en una nueva entrega del Dieselgate

Se calcula que sólo en el mercado alemán hay unas 30.000 unidades afectadas y otra cantidad igual de unidades ya entregadas de ambos modelos en todo el mundo, una información que ha sido desvelada por el diario alemán Spiegel Online. Un total de 60.000 unidades a bote pronto y cuyo "problema" reside en la gestión de la inyección de AdBlue, una solución acuosa que se inyecta desde un tanque especial en la corriente de escape garantizando que los óxidos de nitrógeno se conviertan en nitrógeno inocuo y vapor de agua.

El fabricante apunta que rellenar el tanque de este líquido sólo debe realizarse en las revisiones de mantenimiento programado pero dado que el gasto es mayor, se está realizando un rellenado intermedio en algunas unidades. Durante las mediciones, el sistema Adblue funciona correctamente, pero en carretera el catalizador SCR de las unidades implicadas no funciona o solo lo hace de forma limitada emitiendo sustancias más nocivas en determinadas circunstancias que las "teóricamente" homologadas.

Sabiendo esta situación, lo lógico habría sido parar la producción de ambos modelos y más teniendo en cuenta que hay dos modelos completamente nuevos a la espera de entrar en producción, lo cual no sólo va a suponer importantes retrasos a los clientes que ya están esperando sus nuevos coches, sino un revés muy grande para la marca Audi que tiene al BMW Serie 5 como líder de ventas y Mercedes renovando todos los motores de la Clase E cumpliendo la exigente norma Euro 6d-TEMP con cifras de emisiones muy por debajo de las marcadas en el nuevo ciclo WLTP.

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Fuente: Spiergel Online

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