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Pieza única: el único prototipo del Bizzarrini BZ 2001 aparece a la venta

El Bizzarrini BZ 2001 es otro de esos proyectos inconclusos que trató de reverdecer los laureles de una marca clásica y al que la falta de financiación condenó al olvido. Aunque de esta iniciativa quedó el prototipo inicial, que aún se conserva intacto y que ha aparecido a la venta recientemente en Bélgica.

Pieza única: el único prototipo del Bizzarrini BZ 2001 aparece a la venta
Bizzarrini BZ 2001 - Varios

5 min. lectura

Publicado: 02/01/2020 08:00

Giotto Bizzarrini fundó su compañía en 1964, tras hacerse un nombre como ingeniero en marcas tan prestigiosas como ISO, Ferrari o Alfa Romeo. Solo estuvo en activo durante unos pocos años en la década de los sesenta y aunque solo fueron fabricados un puñado de modelos, todos ellos en cantidades muy limitadas, estos son a día de hoy piezas muy valoradas por los coleccionistas.

A pesar de que su compañía no llegó oficialmente a la década de los setenta - quebró oficialmente en 1969, Bizzarrini continuó colaborando en numerosos proyectos automovilísticos, como fue el caso del excitante AMC AMX/3 del que os hablamos hace solo unos días.

Pieza única basada en el Ferrari Testarossa.

En las décadas siguientes hubo varios intentos de resucitar la desaparecida firma del ingeniero italiano, pero ninguno de ellos logró llegar a buen puerto. Una de las iniciativas más sonadas fue la de Barry Watkins, un empresario estadounidense que financió el desarrollo del prototipo que podemos ver en estas imágenes bajo el sello World SuperCars, Inc. y que contó con el beneplácito y en cierto sentido, con la colaboración del propio Giotto Bizzarrini.

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Este extraño deportivo de carrocería abierta recibió la denominación Bizzarrini BZ 2001, aunque algunos le añaden la expresión 5300 GT, en recuerdo del anterior modelo fabricado por Bizzarrini entre 1965 y 1968, el 5300 GT Strada. Aunque lo parezca, la cifra 2001 no hace relación al año, ya que este fue desvelado en 1991, sino que forma parte del nombre. Emplear cifras relacionadas con el número 2000 fue una costumbre muy extendida a finales del siglo XX.

Este prototipo fue presentado en varios eventos y Salones del Automóvil, como fue el caso del Concours Italiana del Quail Lodge de Monterey en 1993, donde ganó el primer premio del evento, aunque al haber sido un vehículo presentado por uno de los sponsors (Pirelli), el trofeo le fue concedido al segundo clasificado.

A la venta en Bélgica.

Aunque su desarrollo no fue completo, ya que no cuenta con chasis y motor propios sino que emplea como base el bastidor y el motor de 12 cilindros de un Ferrari Testarossa, los responsables de esta iniciativa encontraron tremendamente complejo pasar el modelo producción, sobre todo en el capítulo financiero, ya que a inicios de la década de los noventa el mundo occidental estaba atravesando una notable recesión económica. Por lo que como muchos otros proyectos similares de la época, el Bizzarrini BZ 2001 terminó relegado a las páginas de historia como una anécdota más.

El ejemplar que vemos en estas fotografías es el prototipo inicial, el mismo que sirvió para presentar el proyecto y que ahora se encuentra a la venta en Bélgica. Este ejemplar único se encuentra en perfecto estado y sigue siendo un vehículo plenamente funcional, por lo que es toda una pieza de colección a tener en cuenta.

Además del motor V12 plano del Ferrari Testarossa, el BZ 2001 cuenta con numerosos elementos realizados ex profeso para este proyecto, como fue el caso del embrague de carbono diseñado por Tilton Industries, los amortiguadores Penski o un sistema de frenos Alcon. La carrocería del BZ 2001 fue realizada por completo en fibra de carbono, toda una rareza en aquella época.

Numerosos elementos del Testarossa, como los relojes o algunos mandos.

El vendedor asegura que el modelo se encuentra en perfecto estado, aunque no ha revelado su precio. Teniendo en cuenta que se trata de un proyecto inconcluso basado realmente en otro modelo no creemos que su valor sea demasiado elevado, aunque seguramente, dada su condición de pieza única y con verdadera relación con el ingeniero italiano del que toma su nombre, tampoco será una ganga.

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