Empeñar el coche: ¿cómo se hace y cuáles son las condiciones?

Empeñar un coche es obtener un préstamo mobiliario utilizándolo como aval o garantía de pago. Dicho de otro modo, es el vehículo el que te permite acceder a una cantidad determinada de dinero que deberás devolver según las condiciones pactadas con la entidad que te preste el dinero.

Tipos de empeño de vehículos

Existen dos formas de empeñar un vehículo con el que obtener dinero o financiación a cambio. De elegir una u otra dependerán las condiciones del préstamo, así como el derecho de uso del vehículo.

Empeño con custodia

La entidad concede un préstamo con garantía inmobiliaria en el que el coche designado como aval de pago queda en posesión de dicha entidad hasta que se haya pagado íntegramente dicho préstamo.

Esta modalidad permite asignar un valor superior al vehículo, pero también el pago de los intereses del préstamo y los gastos derivados de la custodia del vehículo.

Empeño sin custodia

Esta modalidad permite acceder al préstamo, pero también seguir utilizando el vehículo. Generalmente, esto implica el pago de la cuota asociada al préstamo, una cantidad en concepto de alquiler del vehículo y también la obligatoriedad de disponer de un seguro de coche a todo riesgo.

¿Cuál es el proceso para empeñar un coche?

El proceso por el cual puedes empeñar tu coche es sencillo en la mayoría de los casos, aunque necesitarás cumplir algunos requisitos para poder acceder a ello. Principalmente, tu coche debe tener un máximo de 10 años de antigüedad (o ser de gama alta) y haber sido pagado en su totalidad, sin préstamos ni ningún otro tipo de financiación pendiente.

Una vez comprobado eso, el proceso es el siguiente:

1. Valoración del coche: la empresa tasará el vehículo. La cantidad a prestar dependerá de cada una, pero oscila generalmente entre el 50 y el 80%.
2. Presentación de la documentación: DNI, ficha técnica con ITV en vigor, permiso de circulación, IVTM pagado y acreditación de vehículo libre de cargas y embargos.
3. Resolución del estudio de viabilidad: si es positiva, se ejecuta la entrega del dinero, que deberá devolverse a plazos en el tiempo acordado.

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La opción de empeñar el coche no es generalmente la más aconsejable y sólo debe recurrirse a ella cuando no queda otro remedio. El principal argumento en contra es que el dinero entregado no cubrirá el valor del vehículo. En caso de no devolver el préstamo, habrás perdido el coche por una cantidad muy inferior a la que habrías obtenido de haberlo vendido.

Por el contrario, suele ser una opción viable para personas que no tienen una nómina o se encuentran en listas de impagos como RAI o ASNEF y que, por tanto, no pueden acceder a financiación de otro modo.

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