Europa toma una decisión que encarecerá los coches nuevos, y esta vez no tiene que ver con las normas emisiones
La Unión Europea ha tomado una polémica decisión que afectará directamente al coste de fabricación de los vehículos. Una medida que se traducirá en un incremento de los precios de los coches nuevos. Y esta vez no tiene nada que ver con las exigentes normativas de emisiones.

Malas noticias para los ciudadanos que tienen dificultades para acceder al mercado de coches nuevos debido a los elevados precios. La Unión Europea sigue tomando medidas que de manera directa o indirecta encarecen los automóviles. Y no solo se trata de las exigentes normativas de emisiones o del irracional cambio a la movilidad totalmente eléctrica en el que se nos ha embarcado de manera obligada. La última decisión tomada es un claro ejemplo de lo que no hay que hacer para evitar que los precios de los coches nuevos sigan creciendo.
Los negociadores del Parlamento Europeo y del Consejo han llegado a un acuerdo que afecta directamente al coste de fabricación de los vehículos nuevos. En concreto, se ha acordado la obligación de que los coches de nueva fabricación tengan como mínimo un 25% de plástico reciclado en su composición. Este objetivo de uso del plástico reciclado debe alcanzarse en un plazo de diez años.

Europa obligará a que los coches nuevos tengan al menos un 25% de plástico reciclado
Según ha señalado Jessika Rosswall, comisaria de Medio Ambiente, Resiliencia Hídrica y Economía Circular Competitiva, esta medida busca recuperar materiales críticos y avanzar hacia una economía circular en el sector del automóvil: «En un momento en el que el acceso a las materias primas está sometido a una presión creciente a escala mundial, aprovechar mejor los valiosos recursos contenidos en nuestros coches antiguos es beneficioso para el medio ambiente, la competitividad y la resiliencia de Europa».
La normativa establecerá por primera vez requisitos de circularidad que abarcan todo el ciclo de vida de los vehículos, desde su diseño y producción hasta su tratamiento como residuo. En el caso concreto del plástico, el sector del automóvil es uno de los mayores consumidores de este material. Las autoridades europeas aseguran que, un contexto en el que cada año más de seis millones de vehículos llegan al final de su vida útil en la Unión Europea, es de vital importancia evitar la pérdida de materiales como el plástico, el acero, el aluminio o el cobre.
Antes de alcanzar el objetivo del 25% en el plazo de una década, el texto aprobado también señala que en seis años, una vez la norma entre en vigor, los vehículos de nueva fabricación deberán tener como mínimo un 15% de plástico reciclado. Lamentablemente, como hemos señalado, esta medida afectará negativamente a los costes de fabricación. Y si los costes se incrementan, los precios de venta también.

El plástico reciclado es más caro, por lo que se incrementarán los costes
Los plásticos reciclados son más caros que los llamados plásticos vírgenes. Y es que se debe tener en cuenta que el plástico reciclado trae asociado toda una serie de costes adicionales relacionados con la recolección, clasificación y procesamiento. Además, el plástico nuevo (o virgen) se beneficia de la fluctuación de precios del petróleo.
Pero volviendo a la medida que ha tomado la UE, parte de este material reciclado deberá proceder de coches fuera de uso o de piezas ya recuperadas, todo ello con el objetivo de reutilizar los recursos existentes y reducir la dependencia de materias primas nuevas.
