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Ford patenta un vehículo policial de persecución totalmente autónomo

El programa de conducción autónoma de Ford ha registrado una novedosa patente para un vehículo policial totalmente autónomo. Este puede cazar infracciones estando en movimiento o incluso permanecer escondido y perseguir a un infractor determinado tras recibir un aviso, incluso sin haberlo visto.

3 min. lectura

Publicado: 26/01/2018 16:00

El actual vehículo policial que comercializa Ford sobre el Fusion Hybrid.

El programa de conducción autónoma de Ford no deja de generar noticias gracias a las muchas y diversas patentes que ha presentado en los últimos tiempos. A pesar de trabajar casi en silencio, sin publicar ningún avance, esta división ha generado un buen número de patentes en el último par de años, algunas de ellas muy curiosas.

En esta ocasión nos hemos encontrado con una solicitud de patente del año 2016 y que no ha sido publicada por la USPTO (la oficina de patentes estadounidense) hasta ahora, en la que se describe un novedoso vehículo policial dotado de un sistema de conducción autónoma completo (nivel 5), que puede prescindir por completo de conductor.

La patente en si no muestra ningún detalle sobre el vehículo propiamente dicho, sino que trata de describir los procedimientos que este puede realizar y el sistema de comunicación del mismo con la red bajo la que opera.

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Esquema de la patente presentada por Ford.

Este vehículo sin conductor podría estar en movimiento y monitorizar constantemente todo lo que sucede a su alrededor y en el caso de que otro vehículo cometiera una infracción, el vehículo policial autónomo podría expedir la correspondiente multa. De la misma manera, el vehículo podría perseguir a vehículos en fuga o que estén sobrepasando los límites de velocidad.

Según la patente, el vehículo podría estar incluso estacionado o escondido a la espera, y cuando la red le avisara podría salir “a la caza” de los infractores.

No es necesario que el vehículo policial esté presente durante la infracción. En el caso de que alguien, por ejemplo, se saltara un semáforo, si es registrado e identificado por cámaras, estas darían aviso a una central que activaría el vehículo policial, pasando este a localizar o perseguir al vehículo infractor. El sistema en si es bastante más complejo que el propio vehículo policial sin conductor, que entendemos podría ser de cualquier tipología o tamaño.

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