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Jacob & Co. Bugatti Chiron Tourbillon, el único reloj con un motor W16 en su interior

Existe una relación directa entre los automóviles de lujo y los relojes aptos solamente para cuentas corrientes saneadas. Desde fabricantes de prestigio que incorporan sus relojes en el salpicadero hasta ediciones especiales a juego con determinados modelos. Pero el Jacob & Co. Bugatti Chiron Tourbillon está a otro nivel, no por precio (280.000 dólares o 256.400 euros) sino por la exclusividad de contar con el único motor W16 incorporado al mecanismo de un reloj.

Jacob & Co. Bugatti Chiron Tourbillon, el único reloj con un motor W16 en su interior
Jacob & Co. Bugatti Chiron Tourbillon

6 min. lectura

Publicado: 17/04/2020 21:30

Hay pocas cosas más bestias que el motor 8.0 W16 del Bugatti Chiron, capaz de desarrollar 1.500 CV. Ya no tanto por su tecnología, sino porque el propio vehículo es un objeto de arte. Tras 15 años juntos, Bugatti y el fabricante de relojes Parmigiani Fleurier finalizaron su colaboración. A partir de ese momento, han sido los neoyorquinos de Jacob & Co. los que se han puesto manos a la obra para lanzar un reloj que hiciese justicia al deportivo. Y vaya si lo han conseguido.

Bajo el nombre de Jacob & Co. Bugatti Chiron Tourbillon nos encontramos una caja de titanio con cristal de zafiro, el cual no solamente está presente en la parte superior o en la posterior, sino que también permite ver parte del mecanismo desde uno de los laterales.

De esta forma se puede admirar Tourbillon interno que, en esta ocasión, representa el motor W16 en miniatura. Realmente no tiene ningún cometido funcional. Es simple y llanamente puro espectáculo. Al presionar la corona, situada en la base de la caja, el motor comienza a girar durante aproximadamente 20 segundos. Es hechizante.

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El cigüeñal es de acero inoxidable fresado a partir de un lingote. Este acciona las correspondientes bielas y pistones que se mueven dentro de un bloque de cristal de zafiro que simula el bloque motor. Está además el añadido de dos turbocompresores (el Chiron real lleva cuatro) accesibles a la vista desde el costado.

El mecanismo se puede activar un máximo de tres veces antes de tener que volver a recargar la cuerda, girando la corona central en sentido antihorario. Esta “reserva de marcha” es independiente del mecanismo propio del reloj, que mantiene el reloj en movimiento hasta un máximo de 60 horas. Curiosamente, el indicador de reserva de marcha imita al del nivel de combustible del Bugatti.

Este reloj está considerado como uno de los más difíciles de fabricar de la historia. En total se necesitan 578 piezas. Para fabricar las de acero inoxidable del motor, se necesitan nada menos que tres días completos a la hora de dejar programada la máquina de CNC que las fabrica. Cuando hicieron las primeras piezas de prueba, no estaban ni seguros de que iba a funcionar.

En este vídeo de 10 minutos podemos descubrir todos los secretos del exclusivo reloj

Pero el diseño del reloj no se queda aquí. Si os fijáis, todo el mecanismo está suspendido por cuatro amortiguadores dobles tipo coilover situados en las esquinas. Esto permite un leve movimiento de flotación hacia arriba y hacia abajo que sirve como protección contra leves impactos o vibraciones. El propietario puede elegir el color de los amortiguadores (y las manecillas) para que hagan juego con su coche.

Justo donde se sitúan las coronas hay otro guiño al Bugatti Chiron, con una ventana que imita la icónica parrilla delantero de estos modelos. Desde ella también se puede ver parte del mecanismo del tourbillon.

Solamente se fabricarán un total de 250 Jacob & Co. Bugatti Chiron Tourbillon, cada uno de los cuales costará 280.000 dólares (256.400 euros al cambio). Por el precio del reloj podemos tener algún que otro deportivo jugoso, pero claro está que no podremos llevarlo en la muñeca.

Jacob & Co. Bugatti Chiron Tourbillon

¿Por qué esta relación tan estrecha entre relojes y coches? Es difícil saberlo. Ambos son gustos caros, eso esta claro. Pero también porque en la Fórmula 1 las marcas más prestigiosas siempre han estado presentes a la hora de ejercer como jueces frente al crono. La precisión necesaria en este deporte es máxima, y solamente los mejores relojeros te la garantizan.

Si viajamos en el tiempo vemos como Rolex, tras ser el cronometrador oficial de la Daytona International Speedway de 1962, lanzó un modelo conmemorativo al año siguiente denominado Rolex Daytona. Bentley y Breitling siempre han trabajado juntos, y en el Bentayga puedes pedir un reloj de oro y diamantes para el salpicadero que cuesta casi 200.000 euros.

Tag Heuer tiene el honor (o eso se dice) de haber desarrollado el primer reloj especialmente diseñado para los pilotos, y que no es otro que el Tag Heuer Carrera. Precisión absoluta.

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