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Cómo reparar el catalizador y resolver averías frecuentes

Las averías del catalizador son frecuentes y su solución no es especialmente barata. ¿Cómo se repara un catalizador, en los casos en que es posible? Hay veces que la única vía es sustituirlo por completo, pero en otras ocasiones se reconstruye.

Cómo reparar el catalizador y resolver averías frecuentes
El catalizador se repara haciendo una reconstrucción de su interior.

7 min. lectura

Publicado: 21/04/2020 21:00

El catalizador de tu coche está entre la salida de gases de escape y el silencioso. Evidentemente, esta es su posición solo en los coches que lo equipan, los cuales lo montan para reducir las emisiones contaminantes 'limpiando' los gases de escape antes de que salgan al exterior. Pero ¿cómo lo hace? Gracias a una alta temperatura y la reacción química entre los gases.

El problema está en que las averías del catalizador son realmente frecuentes y, aunque es habitual, reparar el catalizador no es económico. Además de que es algo que tienen que hacer profesionales cualificados, tiene un coste que puede partir desde los 200 euros y llegar hasta nada menos que 500 euros. ¿Sabes cómo se puede reparar el catalizador de un coche?

Sus averías son muy frecuentes, pero ¿cómo se puede reparar el catalizador?

El catalizador de un coche tiene una vida útil limitada y será más larga o más corta en función del uso que se haga del vehículo. Esto no quita, evidentemente, para que por otros motivos podamos sufrir una avería del catalizador. Se trata de una de las averías más comunes por las que acudimos al taller; que se rompa el catalizador tiene su origen en la excesiva acumulación de gases de escape sin quemar.

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El catalizador se encarga de reducir las emisiones contaminantes de tu coche.

Cuando ocurre esto, el catalizador no es capaz de eliminarlos al completo y el resultado es que las emisiones contaminantes crecen de manera significativa. Como avanzábamos, el uso tiene mucho que ver en esto: en coches gasolina los trayectos cortos y un mal estado de las bujías pueden provocar estas averías, y en coches diésel los recorridos cortos y el uso poco revolucionado del motor también tienen idéntico resultado.

Cómo detectar que nuestro catalizador se tiene que reparar por una avería

Los testigos son la clave. En el cuadro de instrumentos de tu coche, si tienes una avería del catalizador, se encenderá el testigo correspondiente. En el libro de mantenimiento de tu coche no solo puedes encontrar las intervenciones a las que debe someterse tu coche sino que en caso de una avería de este tipo, será donde veas qué significa el testigo que se te ha encendido. Es decir, que esta será una buena forma de saber que necesitas reparar el catalizador por una avería en este componente.

Pero además, si no ha llegado a encenderse el testigo, cuando vayas a pasar la ITV, con la prueba de emisiones detectarán anomalías. Así que también, si tienes que pasar por la Inspección Técnica de Vehículos, es posible que de forma prematura detecten una avería de este tipo. Ahora la cuestión, si te ha 'tocado' este tipo de avería en la mecánica de tu coche, es saber cómo se repara un catalizador y proceder a solucionar el problema.

Cómo reparar el catalizador de un coche diésel o gasolina

La tarea de reparar un catalzador no es, ni mucho menos, mecánica básica. Es algo para lo que hay que tener equipamiento y conocimientos de cierto nivel. Por lo tanto, lo más recomendable es acudir siempre a un taller porque, además, tomará la decisión adecuada sobre cómo proceder. Porque este tipo de averías no siempre son iguales, y su solución también puede ser bien distinta.

En coches anterior al año 2000, su sustitución es relativamente sencilla.

Un nuevo catalizador

Si tu coche es anterior al año 2000, luego ajustado a la normativa Euro 2, entonces es posible que el catalizador sea de tipo lineal y que, por lo tanto, se pueda proceder a montar un catalizador estándar soldable. También se puede hacer este tipo de 'reparación' en coches en los que exista suficiente parte rectilínea en la que cortar y soldar el nuevo catalizador.

Reparar el catalizador sin sustituirlo

En mecánicas posteriores a las mencionadas en el punto anterior, en coches actuales tanto diésel como gasolina, por la complejidad del sistema de escape es casi imposible sustituir el catalizador por uno nuevo. En estos casos se proceder a reparar el catalizador manteniendo el original y, sencillamente, haciendo una tarea de reconstrucción. Algo que, por otro lado, puede resultar bastante complejo.

En el proceso de reparar el catalizador, sea sustituyéndolo o sea reconstruyéndolo, lo habitual es que se vacíe por completo y se limpie con chorro de arena tanto por dentro como por fuera; la diferencia está en que la carcasa exterior se reutilizará en casi todos los casos.

El interior del catalizador se tiene que rellenar con monolitos metálicos de acero inoxidable refractario impregnado de platino y rodio. En caso de que sea necesario, se procede a soldar huecos de la carcasa exterior que, de dejarse abiertos, producirían fugas. Este conjunto se ensambla mediante soldadura y en un último paso se pinta la carcasa exterior con pintura antioxidante y resistente a altas temperaturas.

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