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Volvo y Uber anuncian una gran alianza para desarrollar vehículos autónomos

Volvo y Uber firman un acuerdo de 300 millones de dólares. Ambas compañías se unen para crear una flota de vehículos autónomos capaces de transportar personas sin necesidad de conductor. Las pruebas se realizarán aleatoriamente en Pittsburgh, EEUU, con clientes de Uber reales.

3 min. lectura

Publicado: 18/08/2016 20:00

Volvo y Uber se alían para un proyecto común para vehículos autónomos

Volvo y Uber, las dos grandes empresas acaban de firmar un acuerdo de colaboración de 300 millones de dólares para el desarrollo de una flota de vehículos autónomos. La idea de Uber es la conseguir una flota de vehículos capaces de trabajar por sí mismos sin que requiera de una persona humana que lo supervise, y la necesidad imperiosa de pagarle, para ello Volvo le proporcionará las unidades necesarias.

El acuerdo pondrá en marcha una flota de unidades Volvo XC90 circulando por una ciudad con la capacidad de moverse por sí solos sin la ayuda de un humano, aunque de momento estos serán supervisados por un ingeniero a bordo. Los casos de uso serán tan reales que los vehículos serán llamados por teléfono aleatoriamente por clientes reales de Uber a los que tendrá que transportar a la ubicación que estos deseen.

La sorpresa de los clientes será gratificante puesto que en este caso no tendrán que abonar el importe por el traslado en agradecimiento por colaborar en el desarrollo de estos vehículos autónomos. Uber desea poseer en un futuro una gran flota de vehículos autónomos funcionales con los que poder seguir ofreciendo el servicio de siempre para el transporte de pasajeros pero a un coste inferior para los clientes, tanto que no merezca la pena poseer un vehículo para uso privado.

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El Volvo XC90 servirán como base de pruebas con usuarios de Uber reales

Estos Volvo XC90 están modificados puestos que el actual Pilot Assist de los suecos no es aún un sistema de conducción autónoma sino más bien un asistente como el de Tesla. Los SUVs suecos que estarán involucrados en este proyecto contienen una serie de sistemas añadidos para poder adquirir la capacidad de conducir pos sí solos: sensores, cámaras, sistemas de láser, radar y GPS.

Volvo construirá los vehículos y Uber los comprará para su uso. Ambas compañías utilizarán esta única base para crear sus estrategias de vehículos autónomos. Por una parte Uber conseguirá disponer de una flota de "vehículos trabajadores" que no requieran de una persona a bordo para su pilotaje mientras que Volvo consigue dar autonomía propia a sus vehículos basados en la nueva plataforma PSA, la misma que da vida a toda la serie 90: XC90, S90 y V90.

Fuente: Jalopnik

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