BMW M5

La división deportiva BMW M es la encargada de coronar la Serie 5 con una auténtica bestia sobre ruedas. Uno de los deportivos premium más populares del mercado europeo y con un enorme legado a sus espaldas. La historia del BMW M5 se inició en el año 1984 con la puesta de largo de la primera generación de un modelo que debutó en el marco del Salón del Automóvil de Ámsterdam. La década de los años 80 fue de vital importancia para muchos coches deportivos.

El M5 es una variante de alto rendimiento del BMW Serie 5. Un modelo diseñado y desarrollado por BMW M. La primera generación del M5 fue concebida sobre la base de un BMW Serie 5 E28. Estuvo muy poco tiempo a la venta. Sin embargo, fue un éxito rotundo. Lo que supuso un acicate para que el fabricante alemán se planteara el desarrollo de un nuevo modelo con el que seguir adelante.

En sus aproximadamente cuatro décadas de historia el M5 se ha consolidado como una de las referencias de su competido segmento. La gran mayoría de las cifras de ventas contabilizadas hasta la fecha corresponden al modelo con carrocería tipo sedán. Ahora bien, también se ha comercializado una alternativa más práctica y familiar. Un lobo con piel de cordero. El BMW M5 Touring.

El primer M5 Touring de la historia vio la luz sobre la segunda generación del M5. Es decir, con el M5 E34. Estuvo disponible en un bajo volumen de unidades y todas ellas con volante a la izquierda. Una carrocería que, tras un largo periodo de ausencia en los concesionarios, se ha optado por revivirla gracias al lanzamiento de la sexta generación del M5.

Es un automóvil rápidamente reconocible. El M5 luce toda una serie de rasgos distintivos que le permiten distanciarse de un Serie 5 convencional. Unos elementos de diseño y/o equipamiento que sacan a la luz todo el carácter que esconde este modelo. Grupos ópticos, kit de carrocería, llantas y, por su puesto, un sistema de escape a la altura. El chasis cuenta con una puesta a punto específica y, por su puesto, todas las miradas están puestas en el apartado mecánico.

En el mes de junio de 2024 se presentó oficialmente la séptima generación del BMW M5. El sedán deportivo firmado por BMW M vivió un cambio generacional importantísimo. Una renovación cuya entrada en escena supuso un antes y un después en la historia de este automóvil de altas prestaciones. Por primera vez en sus 40 años de periplo comercial, el M5 apuesta por la electrificación en un altísimo nivel.

El sedán deportivo desarrollado por BMW M recurre a la tecnología híbrida enchufable (PHEV) para seguir ofreciendo unas prestaciones elevadísimas y, de manera paralela, mantener bajos los niveles de consumo y/o emisiones. La séptima generación del M5 será la última con motor de combustión interna. Una despedida por todo lo alto. Es más grande, es más tecnológico y es más eficiente que su predecesor.

Tiene un tamaño grande. El M5 que podemos encontrar en los concesionarios mide 5,10 metros de largo. Una longitud que le sitúa en la parte superior del segmento E. En su interior, que es muy espacioso y lujoso, hay un total de cinco plazas. La distancia entre ejes alcanza los 3,01 metros. El maletero cubica un volumen de carga de 466 litros. Una cifra que se puede incrementar abatiendo los respaldos de los asientos posteriores.

Compite en una categoría especialmente elitista y en la que un pequeño número de modelos lucha a diario por el liderato. Entre los principales rivales del BMW M5 se encuentran modelos como el Audi RS 5 Sportback, el Audi RS 6 Avant y El Mercedes-AMG E 63 4MATIC+.

La gama de motores del BMW M5 ha sufrido importantes ajustes con el paso de los años con el objetivo de adaptar este modelo a los diferentes cambios que se han producido en el mercado europeo. Unos cambios que, en buena medida, han estado impulsados por la entrada en vigor de nuevas y exigentes normativas de emisiones. Por ejemplo, en el pasado este modelo estuvo disponible con motor V10.

El lanzamiento de la séptima generación del M5 marcó un punto de inflexión a nivel mecánico. Si echamos un vistazo bajo el capó del nuevo M5 nos encontraremos con un motor electrificado a un elevado nivel. En concreto, este sedán recurre a la tecnología híbrida enchufable. Y más concretamente a la tecnología M Hybrid de BMW M.

El sistema de propulsión se compone de un motor de gasolina V8 de 4.4 litros M TwinPower Turbo de 585 CV y un motor eléctrico de 145 kW (197 CV). La potencia total alcanza los 727 CV y 1.000 Nm de par máximo. Se maneja a través de una caja de cambios automática M Steptronic de ocho velocidades y un sistema de tracción total M xDrive. Puede acelerar de 0 a 100 km/h en 3,5 segundos y alcanzar una velocidad máxima de 305 km/h.

Gracias a una batería de iones de litio de 18,6 kWh, situada en los bajos del coche, el nuevo M5 puede circular en modo completamente eléctrico. En concreto, la autonomía 100% eléctrica es de 69 kilómetros según el ciclo WLTP. Por lo tanto, luce el distintivo ambiental 0 Emisiones de la DGT (Dirección General de Tráfico) con todas las ventajas de movilidad que ello supone.

El BMW M5 se fabrica en Alemania. En concreto, el proceso de producción en serie de este deportivo tiene lugar en unas instalaciones del Grupo BMW localizadas en Dingolfing. Es la misma planta en la que se produce el BMW Serie 5 estándar.