Bruno Famin explica lo ocurrido en Alpine: «No se trata de cambiar el enfoque, sino de reforzar el proyecto e ir más rápido»

Cuando el 20 de julio Alpine anunció que el CEO de la marca, Laurent Rossi, dejaría su cargo en manos de Phillipe Krief, la noticia tuvo bastante impacto en la Fórmula 1, ya que a pesar de que el francés no ostentaba cargo alguno en el equipo, sí estaba involucrado en su gestión de manera permanente.

Pero el verdadero terremoto se produjo ocho días después, cuando Alpine F1 comunicó oficialmente la marcha de sus tres principales dirigentes: Otmar Szafnauer, Alan Permane y Pat Fry. El primero dejando la dirección de mutuo acuerdo (versión oficial) y el segundo, despedido de su cargo de director deportivo. Y el tercero aceptando una oferta para convertirse en director técnico de Williams.

Un proyecto de marca que debe ganar velocidad

Bruno Famin fue designado subdirector de operaciones deportivas de Alpine el 10 de julio, pero tras la marcha de Laurent Rossi y Otmar Szafnauer ha pasado a capitanear el barco, tanto en lo relativo a todo el programa de competición, como en lo que a la jefatura de Alpine F1 respecta.

Este último cargo será provisional hasta que llegue el nuevo director del equipo de Fórmula 1, pero mientras eso sucede, Famin se ha convertido en la cara y voz de la estructura. Y su discurso es claro: Alpine no ha revolucionado el equipo para cambiar las cosas, sino para hacerlo aún más sólido.

«En Alpine tenemos un proyecto fantástico, un proyecto de marca, para desarrollar la marca, con nuevos productos. Es muy ambicioso», señala de inicio el francés.

«Y es súper fascinante para mí, que soy un tipo de automovilismo, porque la estrategia global de Alpine también se basa en los programas de automovilismo y principalmente en la Fórmula 1, que es el programa principal. Hace dos semanas, la alta dirección decidió pasar a la fase 2 del proyecto de marca con algunos cambios».

Resulta complicado entender que un cambio tan radical a mitad de temporada se deba a que la marca quiere reforzar una dirección ya bien encaminada en lugar de buscar un cambio de rumbo errado.

Pero Bruno Famin insiste en ello, afirmando que lo sucedido no se tiene como objetivo «cambiar el enfoque, sino reforzar el proyecto e ir más rápido desplegando la marca. Y era lógico en lo relativo a la Fórmula 1, donde a mitad de temporada está claro que no estamos donde esperábamos estar».

«También empujamos para ir más rápido y tener más posibilidades, más posibilidades de alcanzar nuestras metas», reitera Bruno Famin, anteriormente director del programa de motores de Renault Sport.

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El plan de Alpine sigue su curso

Ahora, Bruno Famin recoge el testigo de Otmar Szafnauer al frente de Alpine F1, cargo provisional que considera «un desafío súper interesante. Lo interesante es todo el desafío. El proyecto de marca y hacer un equipo bueno aún mejor para luchar por la victoria».

Pero Famin afirma no tener intención de hacer grandes cambios, por lo que el plan de desarrollo del Alpine A523 y el resto de operaciones del equipo seguirán como hasta ahora.

«No habrá ningún impacto. Creo que toda la gente de Enstone y de Viry sabe perfectamente lo que tiene que hacer. Están centrados en mejorar el coche. Seguimos trabajando en eso, no habrá impacto», concluye.

Fotos: Alpine F1 Team