Indy 500Pole position y récord histórico de Alex Palou en las 500 millas de Indianápolis

Alex Palou ha escrito un nuevo capítulo glorioso en su creciente colección de éxitos históricos para el automovilismo español. El piloto español de Chip Ganassi Racing ha obtenido la pole position para las 500 millas de Indianápolis en su cuarta participación, que tendrá lugar el próximo domingo 28 de mayo. Lo ha hecho, además, obteniendo además el récord de la pole más rápida en los 107 años de historia de la prueba, caracterizada por velocidades que desafían los límites modernos.

Palou llegaba al Fast 6, la ronda decisiva de clasificación, tras haber sido cuarto en el Fast 12 con un promedio de 233.779 millas por hora. En el momento de la verdad, el campeón de IndyCar de 2021 subió el listón con una supersónica vuelta inicial de 235.131 mph, y un promedio al final de las cuatro vueltas de 234.217 mph, batiendo en 0.171 mph el récord establecido el año pasado por Scott Dixon (234.046). A su vez, es el segundo intento de qualy más rápido de la historia, tras el inalcanzable 236.986 de Arie Luyendyk en 1996 que no fue pole por no hacerse en el día en el que esta se decidía (formato distinto por entonces).

Es tan solo la segunda pole position de la carrera de Palou en IndyCar tras la obtenida en el Gran Premio de Portland de 2021, pero es sin duda la más importante, tras quedarse a las puertas el año pasado mientras su compañero Dixon le batía. No ha sido así esta vez, ya que el veterano hexacampeón se queda sin su tercera pole consecutiva en esta pista al clasificar sexto. La mayor amenaza para la pole de Palou, por tanto, fue el neerlandés Rinus VeeKay, que no se ha bajado del top 4 de parrilla en las cuatro ediciones disputadas (igual que Palou del top 7 en el mismo periodo).

De hecho, 'Van Kalmthout' hizo vueltas ligeramente más rápidas desde el segundo giro, igualando prácticamente los guarismos de Palou, pero las 18 milésimas que perdió en la primera vuelta fueron decisivas. Su promedio de 234.211 millas por hora le dejó exactamente a cuatro milésimas de la pole, el segundo margen de pole más escaso de la historia de la prueba (dos milésimas en 2012 entre Ryan Briscoe y James Hinchcliffe). Completó la primera línea Felix Rosenqvist, el último en salir tras ser el más veloz del Fast 12 con un 234 en notables condiciones de calor, pero que no logró ganar mucho más con una pista más favorable.

En su coche 100% americano, Ferrucci tumbó a varias estrellas y equipos establecidos.

Santino Ferrucci confirmó la sorpresa al clasificar cuarto en un coche de Foyt, pero el joven estadounidense quedó algo decepcionado después de haber llegado a coquetear con la pole, tras haber hecho las mejores vueltas por la mañana y el segundo mejor promedio en el Fast 12. Aún así, brindó a su equipo su mejor posición de salida de largo en 22 años, batiendo además a dos pesos pesados: el mexicano Pato O'Ward, sin grandísimas vueltas iniciales, se adelantó a Dixon por la quinta plaza a base de pura consistencia.

Después de brillar el sábado, Alexander Rossi volvió a tener una pérdida de ritmo en la penúltima ronda (algo habitual este año para él) y clasificó séptimo, sobre un Takuma Sato que no gozó del mejor balance en su coche, y un Tony Kanaan que arrancará noveno en su última Indy 500. Los tres primeros del Fast 12 en salir fueron los tres últimos en posición final, con el vigente ganador Marcus Ericsson en décima plaza tras perder mucho en las vueltas finales, y un Benjamin Pedersen que se dio el gustazo de batir como rookie al mejor Penske en la figura de Will Power.

Harvey salvó su asiento a última hora a costa de Rahal

Antes del éxtasis por la pole, se vivió el drama de la eliminación, con tres puestos en juego entre los cuatro peores pilotos del sábado, con Rahal Letterman Lanigan Racing como los grandes protagonistas con tres máquinas. El primer intento de todos dejaba en márgenes seguros a Christian Lundgaard y Sting Ray Robb, puso en la posición 33 al veterano Graham Rahal, y la soga en el cuello de un 'lentísimo' Jack Harvey, quien se estaba jugando su puesto en el equipo además de su presencia en parrilla. Unos cambios drásticos al final de la sesión mejoraron el coche notablemente, pero no era suficiente para alcanzar la posición 33 que ocupaba todo un Graham Rahal, y el tiempo se acababa.

No obstante, su equipo volvió a sacarle a pista con nuevas instrucciones para los ajustes activos durante la vuelta. Confiaban en que la velocidad estaba ahí, pese a que no había pasado suficiente tiempo para que el motor se refrigerara. Con todo en contra, y el crono cumplido, Harvey sacó la determinación necesaria para arañar dos décimas de milla y marcar un promedio de 229.166 mph que le otorgaba la última plaza en parrilla por tan solo cinco milésimas.

Desde los pits, Graham Rahal miraba con impotencia antes de romperse ante las cámaras. Las normas dictan que en el Last Chance no se puede volver a salir sin perder el tiempo, y la desconfianza en las habilidades del coche resultó fatal. Tras 15 ediciones consecutivas, Rahal (que ha coqueteado con un cambio de equipo o incluso la retirada) es el único descartado con una eliminación que cumplió los estándares históricos de drama del 'Bump Day', en el 30 aniversario de la situación idéntica que vivió su padre Bobby Rahal, por entonces el vigente ganador del evento.

POSICIONES 13 A 30: consultar crónica del primer día

Fotos: IndyCar Media