Un español en Reino Unido: "Aquí los coches no pasan la ITV como en España, se hace de otra manera"
La manera en la que se revisan los coches en las islas británicas es muy, muy diferente a lo que tenemos ya por costumbre en España desde hace cuatro décadas, algo que han comprobado aquellos españoles que residen desde hace años en torno a Inglaterra.
Especialmente cuando nuestro vehículo ya tiene unos cuantos años encima (a partir de los 10 años anual, de 4 a 10 años bienal), llega un momento del año que produce una mezcla de incertidumbre y temor. Nos referimos, claro está, a la hora de pasar la ITV, anual a partir de cierta edad del vehículo.
En particular en el caso de España, dado que continúa siendo de los parques más automovilísticos más envejecidos de Europa. Por tanto, buena parte de la población pasa anualmente la ITV con vehículos de una edad superior a los 10 años e incluso 15-20 años.
¿ITV en Reino Unido? Muy diferentes
Ahora bien, en todos los sitios no funciona igual. Y, de hecho, la ITV como la conocemos en España desde 1985 tal no existe en otros países europeos. Sin ir más lejos, en Reino Unido el funcionamiento del mecanismo nacional para controlar el buen estado de los vehículos es muy, muy distinto.
En tierras británicas lo que existe en su lugar es el llamado MOT Test. En sí, funciona como la ITV, examinándose todos los puntos vitales del vehículo para su correcto funcionamiento, pero con unas diferencias fundamentales.
MOT Test, la ITV británica
Importante, además, considerando que por sus condiciones climatológicas en Reino Unido los coches son más propensos a sufrir problemas de óxidos si no están debidamente preparados. Esto se observa notoriamente con coches históricos, muy comunes en UK dada la larga tradición de sus marcas, en particular modelos de la British Leyland.
La primera de las grandes diferencias está en que en el MOT Test de Reino Unido no hay edificio propio como la ITVen España. No existe un lugar único donde convergen cientos de coches cada día, esperando su turno mirando una pantalla digital.
En lugar de una estación unificada, en talleres certificados
En su lugar, uno elige dónde va a pasar el MOT Test en talleres certificados donde se realice este proceso. Es decir, si el taller de confianza de uno resulta ser uno de ellos, el trámite se puede realizar allí. "Allí no tengo que ir a pasar la ITV como en España, sino que elijo el taller donde se inspecciona mi coche", nos cuenta un español residente en Inglaterra desde hace varios años.
De modo que incluso en pueblos o pequeñas ciudades podemos encontrar no uno o dos, sino más de una decena de centros en los que pasar el test. A la hora de pedir cita, eso sí, funciona de manera casi idéntica a como se hace en España. "Sólo por donde vivo hay como 14 talleres donde puedo hacer el MOT Test", nos cuentan desde Northampton.
Tarifas unificadas
Otra diferencia fundamental reside en las tarifas. Estamos acostumbrados a ver cómo en España el precio de la ITV no sólo depende del tipo de vehículo sino que varía de manera notable en función de la comunidad autónoma en la que se realice el proceso.
Por ejemplo, el precio medio para pasar la ITV en Andalucía con un turismo de gasolina se sitúa en unos 32,51 € mientras que el de un turismo diésel se encuentra en 36,73 €. En Cataluña, la media es de 30,01 € para turismos de gasolina y de 34,22 € para diésel, mientras que en Madrid los dueños de turismos de gasolina pagan una media de 49,95 € y los de diésel, 59,95 €.
Para todo turismo convencional, 54,85 libras
Con el MOT Test, en cambio, no es así. Existe un precio fijo para todo el territorio, evitando así que se juegue con el mismo al tratarse de diferentes negocios realizando está labor, un precio que varía según tipo de vehículos. Para coches de hasta 8 pasajeros, quads, ambulancias, taxis y vehículos de 3 ruedas de más de 450 kg de peso, la cantidad se unifica en 54,85 libras (62,53 euros). Poco o mucho, depende dado que el sueldo de los trabajadores varía en función del condado.
Eso sí, en España hay una clara ventaja o comodidad, por así decirlo. Si un vehículo no pasa la ITV por un problema concreto, digamos los frenos, en la segunda inspección se comprobarán directamente los frenos y no el resto del vehículo.
Una gran comodidad en España
En cambio, la inspección es completa en estos casos en el MOT Test. Es decir, si se detecta un fallo en la primera inspección, la segunda inspección también será completa. Pero si se detecta o aparece un nuevo problema en esta segunda inspección, también puede ser motivo de suspenso.