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Volvo Trucks y Volvo Cars estarán bajo el control de Geely

El multimillonario chino Li Shufu está negociando la compra de parte de la división sueca de vehículos industriales, Volvo Trucks. El conglomerado sinosueco se ampliaría aún más, relacionando las marcas Mack, Renault Trucks y UD a Volvo Cars, Geely, LYNK & CO, London Electric Vehicle Company (LEVC), Proton y Lotus.

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Publicado: 29/12/2017 20:30

Aunque parezca evidente que Volvo Trucks y Volvo Cars están unidas, lo cierto es que hace tiempo en que no es así. Ha sucedido varias veces en la historia que grandes compañías han quedado repartidas en trozos que han acabado en varias manos. Es el caso de AB Volvo, la empresa matriz. Ahora solo les unen los logos y la imagen corportativa, poco más.

Cuando Volvo empieza a comercializar turismos, la idea de un camión ya estaba en las mentes de sus directivos. En 1928 aparece la primera gama de camiones, la serie LV, solo un año después de la aparición del primer coche de Volvo. Ambas divisiones estuvieron juntas hasta 1998, habiendo adquirido en el camino otros fabricantes de camiones.

En ese año Ford Motor Company se hizo con Volvo Cars y sus destinos quedaron separados. La marca sueca de turismos permaneció dentro del grupo americano hasta la gran reestructuración automovilística en Estados Unidos por la crisis económica. Ford quería soltar lastre y vendió Volvo Cars a un fabricante chino en 2010, Zhejiang Geely Holding Group Co., o simplemente Geely.

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Geely, empresa fundada por Li Shufu, empezó dedicándose a los recambios para frigoríficos en 1986. Geely adquirió un negocio de fabricación de motocicletas de titularidad pública en bancarrota en 1994, y se inició en el mundo de los coches en 1997. Con el tiempo ha pasado a ser el mayor grupo automovilístico chino en manos privadas.

Cuando Ford vendió a Shufu la marca Volvo, muchos en la industria lo vieron como un posible desastre. Este periodista también fue muy escéptico al respecto, sabiendo que Geely había copiado descaradamente diseños de otros. El tiempo nos sacó de nuestro error, Volvo no ha perdido precisamente caché y ha tirado hacia delante con su propia tecnología, reduciendo costes de desarrollo al compartirlos con Geely.

Si bien Volvo Trucks y Volvo Cars no se van a fusionar como una misma marca, si estarán relacionados con el mismo dueño. Las acciones que Li Shufu quiere comprar no son suficientes para comprar la compañía de camiones ni para controlarla, pero sí tendrá peso en sus futuras decisiones como miembro del consejo de administración, será el accionista mayoritario.

Volvo Trucks se ha movido en los últimos años muy bien en redes sociales con vídeos que trascienden su tradicional público (los camioneros y profesionales del transporte)

El pasado miércoles Geely anunció la intención de la compañía de adquirir a la firma Cevian Capital AB una parte, el 8,2% del capital y el 15,6% de los votos. La operación está valorada en 3.250 millones de euros por Bloomberg, cantidad próxima a la que adelantó Reuters, por debajo de los 3.000 millones.

Geely se quedaría con 88,5 millones de acciones de Clase A y 78,8 millones de acciones Clase B. Aunque será el accionista mayoritario de Volvo Trucks, la compañía Industrivarden AB tiene más derechos de voto porque tiene más acciones "Clase A" y por tanto más poder de votación.

Cevian tiene acciones de Volvo Trucks desde septiembre de 2006, cuando se hizo con el 5% del control de votos. Hasta la semana pasada la inversión ha tenido una rentabilidad del 181% con sus acciones de "Clase B". Según Gardell, estos 11 años como inversores en la compañía sueca de camiones ha tenido un retorno de unos 2.000 millones de euros al cambio.

Ya con Geely dentro del accionariado, Volvo Trucks se beneficiara por sinergias de tecnologías en electrificación, conducción autónoma, conectividad, etc. El mundo del transporte pesado no se va a librar de esos avances, y Volvo Trucks no puede quedarse atrás, es el segundo fabricante europeo de vehículos industriales.

Prácticamente durante el mismo tiempo que Volvo Cars estuvo en manos de Ford, la división de camiones formó un cártel con DAF, Daimler, Iveco, MAN y -presuntamente- Scania. Los camioneros que se compraron un modelo de más de 6 toneladas pagaron de más hasta un 10% en virtud de ese pacto contra la libre competencia.

MAN fue exonerado de su implicación al ser en primero en delatar a sus socios ante las autoridades europeas. La sanción correspondiente a Volvo Trucks fue de 670 millones de euros. Aparte está la cantidad que ha de desenvolver a todos los camioneros que les hayan llevado a juicio. Según Fernadismer, en España hubo más de 1.500 afectados.

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