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Renault Wind Collection TCe 1.2 100cv. Diferente

Renault Wind Collection TCe 1.2 100cv. Diferente

14 min. lectura

Publicado: 27/02/2011 02:29

El Wind da un toque de sabor a la actual gama de Renault y acompaña al Megane CC como apuestas más arriesgadas del fabricante. El Wind es un biplaza descapotable de pequeño tamaño para disfrutar durante todo tipo de trayectos.

Tiene elementos comunes con el Twingo y el Clio aunque se caracteriza por contar con un techo metálico de accionamiento eléctrico que transforma el coche en coupé o en descapotable en tan solo 12 segundos; digno de aplauso. Viene a luchar contra el 500C, Opel Tigra y el Peugeot 207cc.

Aunque se le echa en falta más variedad de motores, es agradable de conducir. Nos ha parecido un vehículo adecuado para disfrutar de una conducción tranquila incluso en temperaturas realmente bajas.

Agradecimientos a Syrsa Automoción SL y a Sebastián Henry, por facilitarnos la unidad de pruebas.

SYRSA AUTOMOCION, S.L.

Dirección: AUTOPISTA DE SAN PABLO, S/N

41007 SEVILLA

Telf: 954939393

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Prueba

Exterior

Una pena que el Wind sean tan "alto", si fuera más bajo tendría un aspecto más deportivo, aunque no está orientado a la deportividad sino más bien al disfrute de la conducción sosegada.

Sus dimensiones son reducidas, hablamos de una longitud de 3.83m una anchura de 1.69m y una altura de 1’381m.

Nuestra unidad, cedida por nuestro colaborador Syrsa Automoción, destaca por un color blanco Glacial y por unas llantas de aleación de 17" Sphinx con un diseño exclusivo en neumáticos 205/40 Continental ConstiSportContact 3 (monta 16” de serie).

El diseño de las llantas así como algunos detalles a la carrocería se deben a que pertenece a la edición limitada Collection.

Los originales pilotos delanteros cuyos focos están envueltas en una carcasa azul que le da un aspecto más atractivo, se apoyan en un morro con una gran pendiente bajo los que se ubican las dos entradas de aire trapezoidales con detalles cromados y el logotipo de Renault resaltado en el capó. Una pena que no disponga de Xenon ni en opción.


Como veremos, el Wind es un coche de contrastes. Nuestra unidad tiene los espejos cromados, pero el tirador de la puerta de estilo retro, parece de hace 10 años, aunque lógicamente cumple su función a la perfección.

La parte más atractiva del vehículo me parece la trasera con ese alerón integrado en el maletero. A riesgo de recibir una paliza confieso que recuerda de pasada al todo poderoso Porsche Carrera GT.

Los pilotos posteriores que se extienden por la superficie del portón del maletero resaltan la anchura del vehículo, además el portón del maletero tiene detalles cromados que mejoran el aspecto del conjunto.

Interior

El interior tiene lo justo y necesario, no tiene una apariencia distinta al interior de un clio o twingo pero no necesitas más de lo que ofrece. Tiene detalles que son de nuestro gusto como los asientos envolventes de cuero calefactados (oh sí!) con reposacabezas integrado, el grosor y tacto del volante y la posición de conducción que es medianamente deportiva.

Para variar la altura de la banqueta tendremos que levantanos completament del asiento para que esta suba a su posición más alta, y luego con nuestro propio peso y una palanca irla bajando hasta la altura deseada.

El volante forrado en cuero tiene botones ubicados en su superficie para interactuar con el control de velocidad y detrás de este como de costumbre dos mandos para moverse por el ordenador de abordo y para el control del sistema multimedia que en este caso está compuesto únicamente por la radio mp3 con entrada de audio auxiliar (que estropeó la tarjeta de memoria de mi HTC Magic je-je). La gama Wind no tiene disponible un navegador integrado. El volante lamentablemente solo cuenta con regulación en altura.


La instrumentación orientada al conductor está compuesta por el ordenador de abordo y rodeando a este tres esferas, de izquierda a derecha se tratan del tacómetro, velocímetro y capacidad del tanque de combustible así como la temperatura del aceite.

La cubierta del cuadro de instrumentos es roja en nuestra unidad, aunque también puede ser azul (Es Roja por ser el nivel de equipamiento Collection). Se trata de otro toque de distinción de este Renault Wind que según vas conociendo le vas cogiendo más cariño.

Sin embargo otros detalles nos parecen modificables, aunque forman parte de la esencia del Wind, como los tiradores interiores de las puertas, que son de cuero en nuestra versión. Por otro lado la iluminación naranja/amarilla podría haber sido sustituida por la blanca que usan actualmente la gama Megane y Laguna.

La calidad de ajuste en los materiales empleados es buena, no tanto como la calidad percibida a la vista de los mismos pues son plásticos tratados, eso sí de mejor acabado donde el usuario va a prestar atención, como es la parte alta del salpicadero (Detalle ajuste).

Elementos como el radio Cd o el climatizador nos suenan de otros modelos de Renault. Echo en falta un reposabrazos.

Existe espacio suficiente para los dos ocupantes que puede albergar. Como lugares para depositar objetos tenemos los “cajones” de las puertas, contamos con la guantera y con un estante ubicado a media altura tras las plazas delanteras, donde pueden dejarse hasta una cámara de foto o video.

Si los asientos de los ocupantes van suficientemente adelantados, tras el respaldo de los mismos existe también espacio para dejar objetos pocos voluminosos.

Un punto fuerte del Wind es su maletero de 270L de volumen. Aunque de escasa altura tiene una superficie plana realmente aprovechable para las dos personas que puede movilizar el modelo.

El maletero tiene curiosamente dos barras que refuerzan el chasis que pertenece al Twingo (lógicamente se han hecho algunas modificaciones).

El techo

Para que el Wind pliegue su techo en el maletero hay que en primer lugar, desbloquear manualmente un seguro del mismo modo que hay que hacerlo en el Mx-5 (que también hemos probado). Este seguro está ubicado en la unión entre el techo y el montante del parabrisas.

Una vez desbloqueado con un gesto fácil y sencillo (hay que tirar hacia tí y girar) el techo comienza a bascula y sólo tarda 12 segundos en desaparecer. Lo hace en la propia tapa del portón del maletero, por lo que su espacio no se ve alterado en absoluto.

El techo es de una sola pieza y está fabricado por Webasto, una empresa con experiencia en este tipo de techo, lo que debería ser garantía de calidad. El techo y el mecanismo que lo mueven pesan tan sólo 21`8Kg.

Mientras el techo esté basculando el vehículo tiene que estar completamente detenido, incluso con el freno de mano puesto y el botón que nos permite retirar o poner el techo ubicado junto a la palanca de cambios debe estar presionado.

Como se aprecia en esta imagen, el ordenador de abordo nos indica mediante una gráfica compuesta de cuadritos el avance del proceso que acaba con un pitido.

Motorización: 1.2 TCe 100cv

El Wind está disponible únicamente con dos motores turbo gasolina, el 1.6 del Twingo RS de 133CV y el que equipa nuestra unidad: 1.2TCe de 100cv. No tiene disponible ninguna versión diesel y probablemente un 1.5dci le vendría de perlas.

Con este motor el Wind acelera desde parado hasta 100km/h en 10’5 segundos y tiene una velocidad máxima de 190km/h. Renault declara un peso de 1206kg y un consumo medio de 6.3L a los 100km, correspondiendo 5.3L en carretera y 8L en circulación urbana.

Nosotros decimos que no es extraño obtener registros cercanos a lo 10L cada 100km en una conducción exigente, además es complicado bajar el registro de consumos por debajo de 6Litros practicando una conducción normal.

Renault anunció que este motor cuenta con una función llamada “overpower” que aumenta la potencia de forma temporal en segunda, tercera y cuarta relación en la parte alta del tacómetro, a partir de 4500rpm.

Sólo hemos probado esta versión y según dicen la mayoría de compañeros que han probado la versión más potentes de 133cv, el motor más pequeño es el más recomendable por la comunión que tiene con el modelo.

En Movimiento

El Wind es un vehículo ágil ideal para enlazar curvas que se disfruta mucho conduciendo incluso en bajas temperaturas.

Los asientos calefactados (funcionan rápida y eficazmente) así como la climatización hacen que rodar a 5ºC sea posible y además se disfrute del paseo. Se calenta todo el asiento especialmente la zona lumbar.

Desgraciadamente los aireadores centrales situados en la consola central no son direccionables, por lo que no son todo los útiles que pudieran llegar a ser aunque con las ventanillas subidas este detalle pase por alto por el correcto funcionamiento del resto de elementos que ayudan a mejorar el confort a bajas temperaturas

A altas velocidades el aire entra con facilidad en el habitáculo. A mí no me resulta molesto, ni siquiera use el deflector de viento, aunque hay personas a las que si puede resultar especialmente molesto, ya sea por falta de confort o por la supervivencia de su peinado.

Con el techo quitado a partir de 80km/h el sonido exterior comienza a invadir el habitáculo y a 120km/h tener una conversación a volumen normal puede resultar complicado. Con el techo cerrado el Wind tiene un aislamiento acústico como cualquier compacto.

Al volante el 1.2 TCe transmite que se trata de un motor realmente elástico que entrega su fuerza de una manera progresiva, no percibí la patada del turbo en ningún momento. Lo recorridos de la palanca de cambios están bien marcados.

Hasta 2000rpm el motor parece que se está preparando para empujar, pero una vez rebasado ese límite sube de vueltas, sin prisas pero sin pausas hasta pasadas las 5000 donde entrega toda su fuerza.

Con este motor de desenvuelve perfectamente en ciudad y aguanta bien el ritmo en autovía.

En todo momento se siente tener el control del Wind incluso cuando se afrontan curvas cerradas a velocidades altas. Aunque si queremos hacerle bailar, siempre podemos sobrevirar si le buscamos las cosquillas y si tenemos el techo sobre el maletero.

En pocas palabras

Renault nos regala un descapotable con tamaño de utilitario Ideal para paseos a cielo abierto. Nos ha gustado por su aspecto arriesgado y por la sensación de conducción que es en todo momento muy fiable.

Con un maletero generoso únicamente echamos en falta algo de más calidad en elementos del interior. Desde poco más de 3 millones de pesetas se enfrenta cara a cara con modelos como el Opel Tigra e incluso el 207cc o el Fiat 500 convertible.

Tiene detalles peculiares tanto positivos como negativos y el resultado a nuestro ver es positivo.

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