Skoda Karoq

Los vehículos tipo SUV son cruciales para Skoda. Sin embargo, hace poco más de media década los todocaminos tenían una presencia testimonial en la oferta de producto del fabricante checo de automóviles. Fue en el mes de mayo de 2017, en un evento celebrado en Estocolmo (Suecia), cuando se presentó en sociedad el Skoda Karoq. Un modelo que irrumpía en escena con el objetivo de reforzar la ofensiva SUV que había puesto en marcha la marca.

El Karoq desempeña un importantísimo papel en la gama Skoda. Es el «hermano pequeño» del Skoda Kodiaq. Un modelo que se posiciona como el «sucesor espiritual» del desaparecido Skoda Yeti. Está basado en la plataforma MQB del Grupo Volkswagen. A nivel técnico está estrechamente emparentado con el SEAT Ateca y otros todocaminos comercializados por distintas marcas del mencionado grupo automovilístico.

Skoda anunció en 2018 un importante hito para su familia SUV. La marca fabricó su vehículo SUV número millón. Y fue un Karoq. Un ejemplar que, curiosamente, tuvo como destino España. Un año más tarde, en 2019, el Karoq se convirtió en el modelo de Skoda más vendido a nivel global. Un éxito comercial que deja al descubierto la enorme popularidad de la que goza este modelo.

En el mes de diciembre de 2021 se presentó la actualización del Karoq de primera generación. El SUV compacto de Skoda estrenó un importantísimo lavado de cara. Un «facelift» con el que ponerse al día en cuestiones tan relevantes como el diseño exterior, el equipamiento tecnológico y la mecánica. Además, esta actualización de mitad de ciclo permitirá a la generación actual, la primera, poder afrontar el resto de vida comercial que le queda por delante.

El Karoq tiene unas dimensiones compactas. El modelo que podemos encontrar en los concesionarios mide 4,38 metros de largo. Una longitud que le encuadra en el segmento C-SUV. En su interior hay cinco plazas. El habitáculo es bastante espacioso gracias, en buena medida, a los 2,64 metros de distancia entre ejes. El maletero cubica un volumen de carga de 521 litros. Una cifra que se puede ampliar hasta los 1.630 litros abatiendo los respaldos de los asientos posteriores.

Está encuadrado en un segmento en el que existe una enorme competencia. A diario debe enfrentarse a una larga lista de adversarios. Entre los principales rivales del Skoda Karoq se encuentran modelos como el SEAT Ateca, el Volkswagen Tiguan, el Citroën C5 Aircross, el KIA Sportage, el Hyundai Tucson, el Suzuki S-Cross, el MG HS, el Nissan Qashqai, el Omoda 5, el Opel Grandland y el Mazda CX-5.

La gama de motores del Skoda Karoq está compuesta por una variada selección de mecánicas. Está disponible con motores de gasolina y diésel. El rango de potencias abarca desde los 110 CV de la motorización de acceso hasta los 190 CV de la opción tope de gama. En función del motor elegido nos encontraremos con una caja de cambios manual de seis velocidades o una transmisión automática DSG de doble embrague con siete velocidades.

Si bien la tracción delantera es protagonista en la gama Karoq, también es posible optar por versiones con tracción 4x4. A falta de una variante de altas prestaciones con las siglas RS, el modelo de Skoda dispone de una versión con diseño deportivo y un buen comportamiento dinámico. Se trata del Skoda Karoq Sportline.

El Skoda Karoq se fabrica en la República Checa. Más concretamente en unas instalaciones de Skoda localizadas en Kvasiny y Mladá Boleslav. Ahora bien, tal fue el éxito que obtuvo este modelo que la compañía se vio obligada a trasladar parte de la producción a otros centros del Grupo Volkswagen. Es por ello que el Karoq se fabrica (o se ha fabricado) en Eslovaquia y en Alemania. Este modelo también se ha producido en otras partes del mundo como Rusia y China.