Motor.es

Prueba Fiat Tipo 1.6 Multijet 120 CV, resultón, práctico y económico

Seguimos adelante con la presentación en sociedad del Tipo. En esta ocasión nos centraremos en la prueba del Fiat Tipo 1.6 Multijet de 120 CV con cambio manual de seis velociades. Un aspecto que bien puede sorprender a más de uno.

Prueba Fiat Tipo 1.6 Multijet 120 CV, resultón, práctico y económico

12 min. lectura

Publicado: 21/01/2016 09:00

Ayer mismo dábamos inicio a la toma de contacto del Fiat Tipo. Una berlina de tamaño reducido que quiere conquistar a los compradores por ser funcional, racional y espaciosa. Como bien ya dije ayer. Sin embargo es hora de adentrarse en el terreno de lo dinámico, en saber cómo se comporta en carretera y cuidad. Es hora de poner a prueba el Fiat Tipo 1.6 Multijet de 120 CV, la versión mecánica más potente de todas.

A pesar de ser un coche relativamente barato, Fiat no se ha olvidado de hacerlo atractivo a la vista

Antes de entrar en materia tengo que comentarte cómo está repartida la gama mecánica del Fiat Tipo. Por el momento solo hay tres motores disponibles, uno gasolina y dos diésel. El primero de ellos cuenta con 1.400 cc que desprenden 95 CV. La misma potencia que presenta el 1.3 Multijet, el más bajo de los diésel. Quedando por encima de los dos el 1.6 Multijet de 120 CV que nos ocupa en esta ocasión.

En todos los casos el bloque motor estará asociado a un cambio manual de seis velocidades. Por el momento Fiat no introducirá el cambio automático, cosa que sí hará a finales de año. Este se centrará en el confort y el consumo, presentando el mismo número de relaciones que el manual. Por último mencionar que dada la demanda de los clientes italianos, Fiat se encuentra en pleno proceso de desarrollo de una variante GLP. Ésta estará especialmente pensada para flotas de taxis, aunque obviamente también estará disponible para todos los clientes que así lo requieran.

Calcula ahora el precio de tu seguro de coche

¡Infórmate!

A lo largo de este año iremos conociendo otras versiones del Tipo. Quedan por conocer el compacto y el Wagon

Como ya dije en la primera parte de la presentación del Fiat Tipo, la marca italiana se ha centrado en mantener los costes bajos para así lanzar al mercado un producto económicamente atractivo. A priori esto podría indicarnos que no podemos esperar mucho del Tipo en cuanto a su comportamiento y dinámica, pero sin embargo puede llegar a sorprender lo que éste puede dar de sí. Al menos en su variante más potente, la única que tuve ocasión de probar.

Las llantas de 17 pulgadas vienen de serie en los acabados Lounge y Opening Edition +

Prueba Fiat Tipo 1.6 Multijet 120 CV

Nada más ponerte a los mandos del Tipo y girar la llave del contacto, entran en funcionamiento los cuatro cilindros turbo del motor diésel Multijet de Fiat, te sientes como si estuvieras ante un viejo amigo. Es el mismo motor que podemos ver en otras unidades de la marca, como el Fiat 500X o Fiat 500L. Es decir, estamos ante un bloque de contrastado resultado.

En los primeros metros sorprende el sonido que este motor emite, no es el más pasional de los rugidos, pero la verdad es que no se filtra mucho al habitáculo. Todo parece tranquilo, nada de vibraciones ni tirones. La misma sensación continúa cuando empezamos a rodar más alegremente. Resulta llamativo la rapidez con la que te haces a él. Es una de las señas de identidad del Tipo, su facilidad de uso. No es que el coche sea sencillo, es que todo está donde debe estar y todo se comporta como debe hacerlo.

Una vez en autopista sigue sorprendiendo el poco ruido que se filtra a la cabina. El motor empuja sobradamente, y la relación de marchas aprovecha hasta el último de los 120 caballos que entrega este motor. Es un comportamiento más que correcto, sin estridencias pero sin tachas. Pienso que es una gran elección, y sin haber probado el resto de motores que se ofrecen, la verdad es que esta es la combinación que elegiría para mí.

En las carreteras tan accidentadas que tenemos en España, por mucho que el Ministerio y la DGT sigan negándolo, el Tipo absorbe cualquier irregularidad a la que se enfrente. Es otro de los detalles que más me ha llamado la atención; el tarado de las suspensiones. Fiat ha elegido una suspensión McPherson para el eje delantero y una barra de torsión para el eje trasero. Una combinación más que probada, y que en este caso ha sido regulada para mostrar un comportamiento más relajado que dinámico.

Aun así, y una vez adentrado en carreteras reviradas, me sorprende que el Tipo aguante muy bien un ritmo alto. No balancea en exceso en las curvas y mantiene la trazada sin problema alguno. Obviamente no es capaz de alcanzar niveles de alta escuela, pero hay que tener en cuenta que el coche no ha sido pensado ni desarrollado para eso. Se comporta de manera eficaz en su zona de confort, y eso es algo de agradecer. Cero complicaciones al respecto.

A la caja de cambios le pasa lo mismo. Si bien antes he dicho que la relación de marchas estaba muy bien configurada, el movimiento de la palanca se me antoja un poco tosco. Recorridos largos y una holgura excesiva. No es nada terrible, pues no vibra ni resulta incómodo o peligroso, pero es algo que podría mejorar. Solo digo eso. A pesar de ello el recubrimiento de piel que lleva en esta versión hace que el tacto sea agradable.

La palanca de cambios muestra holguras aunque presenta un tacto agradable acabado en piel

Abandonando las carreteras y adentrándome en ciudad es hora de comprobar cómo marcha el modo CITY de la dirección, algo que Fiat lleva instalando en sus modelos desde hace años. Bien es cierto que en carretera he notado la dirección ligeramente pesada, dura, aunque en combinación con el chasis, aguanta perfectamente los cambios de dirección. Se nota que ambos componentes pueden soportar más potencia, pero por el momento esta es toda la que tiene y dudo que llegue más.

Con el CITY activado rápidamente me doy cuenta de la variedad en la dureza. El volante se vuelve muy ágil y ligero, apenas hay que moverlo para notar cambios en la dirección de las ruedas. Está pensado para eso, para resultar cómodo en la ciudad, y está claro que cumple su propósito. Es a la hora de aparcar cuando realmente te das cuenta de lo práctico que resulta, pues se puede girar el volante con un par de dedos y acabar la maniobra de forma sencillísima, ayudado en esta ocasión de la cámara de visión trasera.

Gracias a las funciones del sistema de dirección en ciudad, el Fiat Tipo presenta un excelente radio de giro de 11 metros

Por último tengo que hablar de consumos. Bien es cierto que el propósito de la prueba no se centró en ello, pero durante 40 kilómetros tuve ocasión de poner a prueba la sed del motor Multijet de 1.6 litros. Fiat homologa un consumo mixto de 4,2 litros a los 100 kilómetros. Tengo que decir que en ningún momento me acerqué a estas cifras, y eso que en ese tramo circule con tranquilidad y a velocidades legales. Al final de la mini prueba de consumo el ordenador de a bordo desprendía 5,4 litros a los 100 kilómetros. Muy lejos de lo estipulado.

La dirección presenta un tacto ligeramente duro, aunque el modo CITY la vuelve completamente ligera

A este respecto tengo que decir que fue en autopista donde empezó a elevarse el consumo. En ciudad, y a pesar de carecer del sistema de parada y arranque automático, considero un error no ponerlo, el Tipo mantuvo los consumos bajos, y eso que la cantidad de semáforos en rojo llegó a desesperarme. Realmente, ante ese panorama, esperaba que los consumos se dispararan, pero no fue así.

Conclusiones

La conclusión clara es que Fiat ha hecho un gran trabajo con el Tipo. No será el coche más lujoso, más potente, más rápido o más refinado del mundo, pero es el coche que necesita la mayor parte de la población. Es barato, es práctico, es eficaz, es resultón y se comporta lo suficientemente bien como para que no echemos en falta más detalles. Tal y como dice Fiat, prestaciones sin adornos. Una compra de lo más lógica tanto para familias como para otros sectores que no buscan desembolsar grandes cantidades de dinero por un coche.

Lo mejor sin duda es el precio, seguido por la habitabilidad y el espacio. Son los puntos fuertes de este coche, no te quepa duda, pero alegra saber que el Tipo es capaz de recompensarte con un comportamiento más que correcto, con un diseño muy a la italiana, y con un equipamiento más que necesario. Es el coche que Fiat llevaba necesitando desde hace mucho tiempo, y no tantas versiones extrañas del 500.

Un gran trabajo es lo que ha hecho Fiat con el Tipo. No será su coche más pasional, pero es el que necesita tanto la marca como el cliente

Compártela en:

Pixel