La entrada en escena del Alpine A290 en junio de 2024 marcó un antes y un después en la historia reciente de Alpine. Debutaba el primer coche eléctrico de la compañía. Un vehículo desarrollado sobre la base del Renault 5. Sin tiempo para asimilar este lanzamiento en Alpine elevaron su apuesta por la movilidad sostenible con el desarrollo de un modelo propio. En el Salón del Automóvil de París celebrado en dicho año se presentó un importante modelo conceptual. El Alpine A390_β.
Este concept car sienta las bases del primer vehículo eléctrico de desarrollo propio de Alpine. Descrito como «un Sport Fastback 100% eléctrico», se trata de un todocamino con la línea propia de un SUV Coupé. La versión de producción se presentó oficialmente en mayo de 2025. Llegaba el nuevo Alpine A390.
Basado en la plataforma AmpR Medium del Grupo Renault, mide 4,62 metros de largo. Una longitud que le sitúa en la parte alta del segmento C. En el interior hay cinco plazas. La distancia entre ejes es de 2,71 metros. El maletero cubica un volumen de carga de 532 litros. Una cifra que se puede incrementar hasta los 1.643 litros abatiendo los respaldos de los asientos traseros.
Entre los principales rivales del Alpine A390 se encuentran modelos como el Audi Q6 Sportback e-tron, el Tesla Model Y, el Xpeng G6, el Lexus RZ y el Porsche Macan Electric. La gama A390 está estructurada varias motorizaciones. El «corazón» de este Alpine es una batería de iones de litio de 89 kWh que alimenta tres motores eléctricos. Hay una versión de 400 CV y otra de 470 CV respectivamente. La autonomía del Alpine A390 alcanza los 555 kilómetros según el ciclo WLTP.
El Alpine A390 se fabrica en Francia. El proceso de producción en serie se lleva a cabo en unas instalaciones del Grupo Renault localizadas en Dieppe. Los motores eléctricos y las baterías también se fabrican en Francia. Y más concretamente en unas plantas localizadas en Cléon y Douai.