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GP MéxicoEl análisis: las claves del GP de México

  • Lewis Hamilton recortó aún más la diferencia de puntos respecto a Nico Rosberg, pero de manera insuficiente.
  • Los dos pilotos de Red Bull y Sebastian Vettel vivieron momentos de tensión entre ellos y los despachos determinaron finalmente que Daniel Ricciardo merecía el tercer escalón del podio.

12 min. lectura

Publicado: 01/11/2016 09:30

La carrera en México no fue de las mejores de este año, ni mucho menos, pero la atención generada tras ella será de las que más se recuerden a la hora de resumir la temporada.

Lewis Hamilton ganó de manera holgada, no sin antes dar pie a la polémica por el modo en que salvó su pasada de frenada en la curva 1 tras la arrancada. Y, en las últimas vueltas, fueron Sebastian Vettel, Max Verstappen y Daniel Ricciardo quienes acapararon toda la atención mediática en su disputa por el tercer escalón del podio.

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Las estrellas

Lewis Hamilton

El Gran Premio de México ha sido una continuación de lo vivido en Estados Unidos en lo que respecta a Lewis Hamilton. El británico extendió su dominio y llegó a maniatar a su compañero de equipo hasta que éste despertó finalmente en la Q3, salvando una situación que se antojaba complicada como consecuencia del buen rendimiento de los Red Bull.

Hamilton no depende de sí mismo y ya ni siquiera se puede permitir que Rosberg gane en Brasil o perderá toda opción matemática, pero al menos ha superado el bache de Suzuka y vuelve a ser el que vimos hasta la rotura de motor de Sepang.

Sebastian Vettel

Sebastian Vettel está dando muestras de estar bastante frustrado y sus conversaciones por radio del domingo lo dejan claro. Pero en lo estrictamente deportivo, Vettel volvió por sus fueros y, esta vez sí, mejoró lo ofrecido por su compañero de equipo y le complicó mucho las cosas a los Red Bull.

Independientemente de lo acertado de su comportamiento y de su defensa sobre Daniel Ricciardo, es innegable que su rendimiento en pista fue bueno y animó la carrera como pocos pudieron hacerlo.

Nico Hülkenberg

Nico reconoce que es muy posible que el fichaje por Renault le haya dado un plus de tranquilidad que haya afectado a su rendimiento de manera positiva. Desde luego, así lo parece y es todo un placer verle de vuelta de manera continuada.

También reconoce que ha conseguido entender mejor cómo poner a punto el monoplaza y eso le está ayudando, algo que ha sido muy evidente este fin de semana, en el que ha dominado a un Sergio Pérez que no pudo hacerse con el coche. Su clasificación fue brillante y, en carrera, fue el mejor del resto llegando a poner contra las cuerdas a Kimi Räikkönen. El trompo durante el adelantamiento del finlandés no deja de ser un detalle que no debe empañar un gran fin de semana.

Marcus Ericsson

Jolyon Palmer ha mejorado notablemente su rendimiento en las últimas carreras, algo que se vio recientemente compensado con un punto. Y lo mismo debería ocurrirle a Marcus Ericsson, que está realizando un final de temporada muy meritorio y en México estuvo a punto de conseguir finalizar la carrera entre los diez primeros.

Debido a su condición de brasileño, Felipe Nasr cuenta con más opciones de futuro en la Fórmula 1, pero el rendimiento del sueco está mejorando con mucho lo ofrecido por su compañero. Sea en Sauber o en otro equipo, es posible que Ericsson permanezca en la Fórmula 1 un año más y no sería injusto a tenor de lo visto este año.

Los estrellados

Sergio Pérez

Se esperaba mucho de Sergio Pérez este fin de semana, especialmente tras el cuarto puesto de la primera sesión de entrenamientos libres, pero todo terminó desde ese momento y ni siquiera pudo entrar en la Q3 mientras su compañero conseguía un espectacular quinto puesto en parrilla.

En carrera llegó a los puntos por los pelos tras pasarse más de media carrera detrás de Felipe Massa, culminando así un fin de semana en el que se esperaba mucho y se vio realmente poco.

McLaren

El equipo de Woking está alternando carreras prometedoras con otras bastante tristonas y eso es indicativo de que el coche depende demasiado de las características del circuito, algo que siempre indica debilidad.

Ahora sí, el equipo ha pasado a un periodo de transición en el que lo mejor que puede pasar es que se termine la temporada para poder centrarse al 100% en 2017. En México lo más llamativo fueron los comentarios de Fernando Alonso por radio y su encuentro con Carlos Sainz en la primera vuelta. Todo dicho.

Haas

No es sorpresa, pero no deja de ser llamativo. Haas volvió a tener problemas con los frenos y, lo que es peor, muchos otros desconocidos en el coche de Romain Grosjean, que empieza a estar realmente desesperado.

El francés se peleó todo el fin de semana con un coche inconducible que el equipo no supo solucionar y Esteban Gutiérrez sufrió sobrecalentamiento en los frenos durante la carrera. Aunque el resultado global de la temporada es, posiblemente, positivo, este tipo de cosas están empañanando la primera temporada de Haas y, seguramente, están creando fama de falta de profesionalidad en el paddock.

La zona oscura

Varias fueron las acciones polémicas de la carrera. La primera tuvo como protagonista a Lewis Hamilton, que en la frenada de la primera curva tras la arrancada, no pudo detener el coche a tiempo para trazar la misma y terminó en la hierba, reincorporándose a la pista en el tercer viraje y con notable ventaja sobre el grupo perseguidor.

No tardaron en surgir las dudas acerca de porqué no se sancionaba a Hamilton por dicha acción, pero existen varias razones para no hacerlo. La primera es que Hamilton se pasa de frenada de manera evidente (bloqueó el neumático delantero derecho), es decir, no hay intención de cortar la curva, sino que viene dado por un error de pilotaje. Además, la gran velocidad a la que llega hace imposible que vuelva a la pista por la curva 2 y opta por lo más seguro, retornar por la curva 3.

Es cierto que, cuando vuelve al asfalto, cuenta con mucha más ventaja que la que tenía cuando sale del mismo, pero no ha ganado posición y según la telemetría, levanta el pie para neutralizar la ventaja tomada. Para eliminar dudas, el coche de seguridad hace acto de presencia tras el accidente entre Gutiérrez, Ericsson y Wehrlein, dejando se ventaja en cero.

La segunda polémica de la carrera fue muy similar a la primera, pero con Max Verstappen como protagonista. El piloto neerlandés intenta defender el interior de la frenada -a la que, no olvidemos, se llega a más de 350 km/h- ante el ataque de Sebastian Vettel, pero es demasiado optimista y bloquea la rueda delantera izquierda. Seguramente para evitar un plano considerable, levanta ligeramente el pie del freno para eliminar el bloqueo y toma la escapatoria del mismo modo que Hamilton. Posteriormente, vuelve a pista del mismo modo que el de Mercedes, pero en esta ocasión con Sebastian Vettel justo detrás de él.

Una vez más, Verstappen se sale de pista yendo delante de su oponente y vuelve a la misma delante y sin haber ganado más terreno, sino conservando el que tenía antes de pisar la hierba. Pero, a diferencia de Hamilton, la FIA determinó que no había levantado el pie después de volver a la pista y, por tanto, había ganado ventaja con la maniobra. Quizá es más complicado de explicar porqué se sanciona a Verstappen en lugar de preguntarse porqué no se sanciona a Hamilton. En el automovilismo es inevitable que haya errores por parte de los pilotos y, al igual que no parece justo -ni recomendable- sancionar un intento de adelantamiento que no sale bien, tampoco debería serlo sancionar un fallo de pilotaje en una situación de carrera, siempre y cuando no haya intención de sacar ventaja.

La maniobra final fue la que le valió a Sebastian Vettel una sanción de diez segundos por modificar la trayectoria en fase de frenada, lo que el reglamento prohíbe de manera explícita desde el pasado Gran Premio de Estados Unidos. Aquí caben pocas dudas, porque, aunque poco, Vettel modifica la trayectoria y se va cerrando hacia el interior para complicarle la situación a Ricciardo. Y si la FIA, que tiene acceso a la telemetría, considera que lo hizo en fase de frenada, poco se puede discutir.

En cualquier caso, no me parece ni mucho menos una maniobra merecedora de intensa crítica, porque Vettel cierra la trazada de manera progresiva y suave, dejando en todo momento espacio a su oponente. ¿Sancionable? Así parece. ¿Merecedor de ser echado a los leones? Ni por asomo.


Fotos: Red Bull | Ferrari | McLaren | Haas | Mercedes | Sauber

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