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GP ItaliaExhibición inútil de Red Bull en Monza

  • Max Verstappen y Daniel Ricciardo han acompañado a Lewis Hamilton en lo más alto de la clasificación, pero las sanciones les obligarán a iniciar la carrera desde el fondo de la parrilla.
  • La lluvia ha jugado en favor de ambos pilotos, que han sabido ser competitivos en los minutos finales de la Q3 con los neumáticos de lluvia extrema.

3 min. lectura

Publicado: 02/09/2017 20:20

Mal día para brillar el que ha elegido Red Bull, que optó por penalizar a sus pilotos realizando cambios de motor y caja de cambios en un circuito poco favorable como el italiano para intentar aprovechar al máximo los puntos fuertes del equipo en la próxima carrera en Singapur.

Pero la lluvia les ha brindado hoy una oportunidad de oro que ha sido aprovechada por sus pilotos para alcanzar la segunda y tercera posición, aunque no podrá ser materializada en carrera. Max Verstappen ha sido el más rápido de los dos, superando por poco más de una décima a su compañero, aunque cediendo 1,148 segundos sobre Lewis Hamilton, que ha batido el récord de poles de Michael Schumacher.

“Fue una clasificación muy buena, todo fue bien. En la Q3 quizá no estaba tan contento como en Q1 y Q2, deslizaba mucho, especialmente en el último sector. La última vuelta estuvo bien, escuché que estaba en pole, mi ingeniero me iba diciendo los sectores y le dije: “Para, dime lo que está haciendo Lewis (Hamiton)”. Iba en tiempos de pole”.

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El piloto neerlandés ha valorado el mérito de conseguir la primera línea en un circuito tan rápido como Monza, aunque es innegable que la lluvia ha contribuído en gran medida a ello. “Ser segundo aquí con este coche significa que hemos hecho un gran trabajo, fue divertido conducir en mojado”.

Las condiciones ayudaron a Red Bull, pero las sanciones echarán al traste todo el esfuerzo.

Daniel Ricciardo logró la tercera plaza tras una difícil primera fase de la clasificación que pudo superar para colarse en la Q3. El monoplaza no era capaz de hacer funcionar los neumáticos, pero el australiano se las apañó para aguantar entre los mejores. “En la Q1 y Q2 estaba en tierra de nadie, si escuchaste mi radio verías que no estaba muy contento con el agarre. Sufría con todo, es como si los neumáticos no hubieran estado en los calentadores, estaban fríos y deslizaban”.

Posteriormente, al colocar los neumáticos de lluvia extrema en la Q3, las cosas cambiaron por completo, llegando a tener el mejor tiempo de la sesión en su poder. “En la Q3 con los neumáticos de lluvia extrema en la vuelta de salida encontré mucho más agarre que en Q1 y Q2, era un coche diferente. Creo que llegamos a estar primeros, pero Max y Lewis llegaron por detrás”.

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