He visto y tocado el OMODA 7 SHS y tiene un detalle en el interior que jamás había visto en un coche (vídeo)
El OMODA 7 SHS es la última gran novedad de la marca del grupo chino Chery para Europa y, más allá de su tecnología híbrida enchufable, cuenta con varios detalles que me han gustado mucho tras verlo en persona. Pero te destaco uno de ellos por encima del resto.

Hace unos días pude asistir a la presentación en España del OMODA 7, el tercer integrante de la gama de la marca china para nuestro mercado. La expectación era máxima, con un centenar de periodistas e influencers en un local preparado para la ocasión en el centro de Madrid. Una muestra ya del enorme poder de convocatoria para una marca recién llegada a nuestro país.
Sin embargo, OMODA nos sorprendió primero desvelando los detalles de otra de sus novedades, que no fue otra que la versión híbrida autorrecargable de su modelo más vendido, el OMODA 5. El SUV más pequeño de su gama estrenaba la tecnología SHS-H, que promete ser también un superventas gracias, principalmente, a su etiqueta ECO.
Pero la estrella de la cita fue el OMODA 7 SHS, otro SUV que se cuela en el centro de la gama entre el anteriormente mencionado OMODA 5 y el más grande OMODA 9, que también entró con buen pie en el mercado europeo. Estas son algunas de mis impresiones tras ver en directo y poder tocar un coche que llegará a nuestras carreteras en noviembre-diciembre de este año.

OMODA 7 SHS, más que un SUV híbrido enchufable
El OMODA 7 es un SUV que va directo al segmento D. Sus 4,66 metros de largo le colocan más bien a medio camino entre el C y el D, y tiene una distancia entre ejes de 2,72 metros. Como todas las propuestas de OMODA, es un coche que destaca por su elevado equipamiento de serie y que aspira, aunque todavía no hay precios oficiales, a tener una excelente relación calidad-precio.
Su diseño frontal es muy elegante y me ha gustado, poniendo un punto distintivo respecto a sus hermanos de gama, y los pilotos traseros en forma de relámpago y tecnología “Digital Pixel” le dan una impronta sugerente.
La marca dijo en su presentación que, si el OMODA 5 buscaba la «singularidad», con el OMODA 7 buscan la «calidad, un paso más». Sabemos que JAECOO, su marca hermana de Chery, cubre el hueco premium en el mercado, pero este OMODA 7 tiene claramente unas aspiraciones mayores y seguro que gustará mucho aquí en España.

De su tecnología híbrida enchufable, ya la conocemos al haberla probado en los JAECOO y en el OMODA 9: el sistema SHS todavía tiene cifras preliminares, pero ya apuntan a una autonomía eléctrica superior a 90 kilómetros y a un alcance combinado, fruto de su motor de gasolina de 1,5 litros, de más de 1.200 kilómetros.
La batería es una LFP Blade, de origen BYD, mientras que la mecánica en su conjunto tiene una potencia de 279 CV, sumando los dos motores eléctricos localizados junto a la transmisión del coche. Y cómo no, contará en España con la etiqueta CERO de la DGT.
Un interior que sorprende
En el interior los acabados del OMODA 7 son notables, con un nuevo volante de dos radios como protagonista, la consola central flotante con el cargador de 50W para smartphones, los reposacabezas integrados en los asientos delanteros, el control por voz de 4 zonas para que cualquier ocupante lo pueda usar, los 19 ADAS a bordo, control de aparcamiento remoto y por el móvil, cámara de 540 grados…
Pero déjame hablarte del detalle que más me ha sorprendido del coche, el cual puedes ver en el vídeo que acompaña a estas líneas. Se trata de su pantalla central flotante en el salpicadero, la “Super Floating IP”, como la llama la marca. Acompaña a la instrumentación de 12,3 pulgadas, también flotante.
En el caso de la pantalla central, es de generosas dimensiones y tiene una gran resolución: 15,6 pulgadas y 2,5K. Pero su sello distintivo está en que ¡se puede deslizar! Ya BYD nos sorprendió cuando trajo a Europa las pantallas que se podían rotar, pudiendo ser utilizadas en horizontal o vertical, como una tablet.
La pantalla principal del OMODA 7 SHS puede moverse desde el centro del salpicadero a la posición del copiloto. Tendremos tiempo en el futuro, seguro, para sacarle todo el partido a las funciones con las que contará en el sistema multimedia, pero sin duda que este detalle no lo habíamos visto en ningún otro coche del mercado europeo.
Nos consta que en China, concretamente ZEEKR, tiene un sistema similar. En el caso del OMODA, basta con deslizar 4 dedos hacia un lado para que la pantalla, como por arte de magia, cambie de posición. Una vez más, las marcas chinas nos vuelven a sorprender con sus innovaciones.
