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El presidente de Mitsubishi dimite por el escándalo en Japón

El escándalo japonés de las homologaciones fraudulentas se lleva por delante su primera víctima, el máximo responsable de la división automovilística de Mitsubishi. La dimisión no tiene carácter inmediato, y ha sido "voluntaria". El sucesor se conocerá a finales de junio.

5 min. lectura

Publicado: 18/05/2016 17:00

El último mes ha sido movidito para Mitsubishi Motors Corporation. Hoy se ha anunciado la dimisión del presidente de la empresa, Tetsuro Aikawa, que se hará efectiva a finales del mes que viene. La dimisión está motivada, no es por "razones personales", sino por su responsabilidad directiva por la manipulación de los consumos. También se va Ryugo Nakao, vicepresidente responsable de calidad y estrategia de producto.

El 20 de abril supimos que Mitsubishi reconoció que había sobreinflado las ruedas de unos pequeños utilitarios para mejorar sus cifras de consumos oficiales. Son dos modelos de marca Mitsubishi (eK y eK Space) y otros dos de marca Nissan (DayZ y DayZ Roox). Están afectados 625.000 coches dentro del mercado japonés.

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Posteriormente la empresa admitió que desde los años 90 no se ha respetado en su totalidad el procedimiento de homologación japonés, por lo que pueden aparecer más desviaciones, aunque sea de décimas de litro. De momento no tenemos constancia de que haya ocurrido con ningún modelo exportado fuera de Japón.

Carlos Ghosn (izquierda) y Osamu Masuko (derecha)

Nissan y Mitsubishi llevan colaborando cinco años en diferentes áreas. En este caso concreto, Mitsubishi fabrica para Nissan esos utilitarios, para ahorrar conjuntamente costes. La colaboración va a ir más allá, porque Nissan se hará con el 34% de las acciones de MMC, por lo que se convertirá en el accionista mayoritario.

Ahora que Mitsubishi Motors Corporation se "ha salvado", Tetsuro Aikawa se quita de enmedio. El directivo pidió perdón con una reverencia, un hecho muy importante en la cultura japonesa. Ha asumido las culpas, pero la orden de manipular las homologaciones no vino de arriba, o eso dijo.

Según su versión, las primeras investigaciones internas apuntan al mal hacer de algunos ingenieros que no se veían capaces de lograr los objetivos de la dirección sin hacer trampas. Es exactamente el mismo alegato que hace Volkswagen respecto a su propio escándalo: la culpa es de unos empleados renegados.

Carlos Ghosn y Osamu Masuko durante la comparecencia a los medios (foto: Reuters/Toru Hanai)

En la firma del acuerdo Nissan-Mitsubishi, Carlos Ghosn (máximo responsable de Nissan) afirmó que el acuerdo es beneficioso para ambas partes, y que permitirá aumentar sinergias y una mayor cooperación entre los dos fabricantes. Por su parte, Osamu Masuko (consejero delegado de MMC) lo ve como un paso hacia el futuro de ambas compañías.

Nissan ha salido beneficiado del escándalo, ya que la caída de los títulos de MMC en el parqué de Tokio ha reducido la cantidad a pagar. Se tiene en cuenta la cotización media entre el 21 de abril (tras saltar el escándalo) y el 11 de mayo, es decir, 468,52 yenes por título.

El imperio Renault Nissan tiene bajo su control al fabricante ruso AvtoVAZ (Lada), Datsun, Dacia e Infiniti. Esta nueva adquisición reforzará la posición de la Alianza, que incorpora a su órbita a un reputado constructor de todoterrenos, SUV y pick-up. Aunque Mitsubishi es una empresa gigantesca en Japón, la división automovilística no es precisamente un pez gordo.

Mitsubishi eK Custon y eK Space Custom

El mes que viene se conocerá el sustituto de Tetsuro Aikawa, probablemente sea el actual consejero delegado, Osamu Masuko. El 24 de junio será la junta de accionistas, y Nissan podría colocar a alguno de sus hombres en el área de desarrollo de producto.

La operación de compra del 34% de MMC no está precisamente cerrada, es necesario que las autoridades den el visto bueno. Resulta sorprendente cómo ha mejorado la situación del imperio de Carlos Ghosn, tras ponerse al timón de una Nissan que estaba al borde de la quiebra. Ahora es un pez muy grande.

Y nos queda la pregunta del millón: ¿quién ordenó manipular las homologaciones? ¿Realmente fueron unos ingenieros rebeldes que temían decepcionar a sus jefes, o hubo un mandato desde la cúpula? Todas las opciones están abiertas, tardaremos en conocer la verdad.

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