Tras declararse como 100% eléctrica esta querida marca italiana reconoce su error mientras "intentan" volver a la combustión
El mercado todavía no parece listo para la adopción del coche eléctrico. Menos si cabe los segmentos más pasionales, caros o deportivos. Una de las más queridas marcas italianas empieza a renegar de su más importante decisión.

A principios de la década fueron muchos los que aseguraron un futuro eléctrico para 2030. Basándose en proyecciones, estimaciones y algún que otro sueño, el mercado, Europa, cambió de mentalidad y puso rumbo al coche eléctrico. Hoy, apenas 5 años después el panorama es completamente diferente. La Unión Europea se replantea su estrategia, mientras que las marcas son condenadas por su propia precipitación. Abarth ya es una marca 100% eléctrica, pero las pocas ventas están destrozando la empresa. La marca se plantea volver al motor de combustión, aunque no es tan sencillo.
Una decisión como volverse una marca 100% eléctrica tiene diferentes implicaciones. Cambio de plataforma, nuevos ciclos de desarrollo, nuevos proveedores, nuevo posicionamiento de marca, nuevo marketing y una larga cadena de sucesos que cuestan mucho dinero y tiempo. En 2021 la cúpula de Abarth aseguró que iba a volverse una marca 100% eléctrica y en 2024 así lo hizo. De la noche a la mañana la compañía rompió con su impecable historial y abrazó mecánicas que con el tiempo se han demostrado que no interesan a ninguno de sus clientes.

Abarth ha reducido significativamente las ventas en todo el mundo
Las ventas de Abarth en Europa y en todo el mundo han caído en picado. La situación preocupa a los directivos que tras la llegada de un nuevo CEO a la órbita de Stellantis, respiran con más optimismo. Durante una entrevista a un importante medio inglés, Gaetano Thorel, CEO de Abarth ha vertido declaraciones sorprendentes a la par que duras. Thorel reconoce que las ventas están muy por debajo de las proyecciones y de seguir así el cierre de Abarth es una posibilidad bastante real. Sólo en UK han pasado de vender algo más de 1.000 unidades en un año a menos de 300. Los mismos resultados se cosechan en toda Europa.
El CEO reconoce que, además de las ventas, las opiniones de los clientes les han llevadoa. reconsiderar su estrategia: «El cliente de Abarth quiere un motor de combustión no solo por la potencia, sino porque, fundamentalmente, compra el coche y lo modifica con sus propias manos». «En el eléctrico no es posible, así que para ellos es una limitación: no pueden controlar el motor ni el combustible, y por eso el club Abarth no está muy contento con nosotros», ha afirmado el propio Thorel durante la ya mencionada entrevista. Abarth siempre ha vendido pasión y todos los sabemos que los eléctricos generan poca o ninguna.
A partir de esta situación se abren varias sendas de trabajo para la marca más canalla de FIAT. Los ingenieros de Abarth pueden volver a la plataforma anterior, desarrollar una propia o aprovecharse de la estructura modificada para el nuevo FIAT 500 Hybrid. Los turineses han hecho algo 'muy similar' a lo que ahora plantea Abarth. Ante la caída de las ventas, FIAT ha tenido que desarrollar en tiempo récord un 500 más barato e híbrido. Una unidad con motor de tres cilindros y 64 caballos de potencia que, lamentablemente, no le sirve a Abarth.

El 500 Hybrid es una excelente opción para FIAT, pero no para los del 'Escorpión'. Thornel ha confirmado que la plataforma modificada del nuevo 500 puede albergar más potencia, pero no con la estructura que plantea el modelo híbrido. Habiendo descartado las dos primeras opciones (cambio de plataforma), los ingenieros de Abarth buscan un motor que ponerle al nuevo 500 de gasolina. Se busca un bloque de cuatro cilindros que cumpla con las últimas normativas Euro 7. El problema de toda esta cadena de cambios no es otro que el precio. Volver a la combustión supondrá gastar mucho dinero mientras que las ventas siguen en caída libre.
Sin embargo, «lo estamos intentando», ha afirmado Thorel. La intención está ahí y es clara. Abarth se ha tropezado con la misma piedra que muchas otras marcas que se precipitaron en optar por la vía eléctrica. La mismísima Unión Europea cambiará su estrategia de 2035. A mediados de mes sabremos qué nuevo rumbo toma el Viejo Continente en materia de movilidad. Fabricantes, proveedores y clientes han dejado bien claro que el coche eléctrico no es todavía una alternativa 100% viable a la combustión. En contra, cada vez son más los que están a favor de soluciones intermedias como los eléctricos y/o los híbridos enchufables.
Fuente: Autocar

